Ahora quiero llamar su atención al libro de Génesis. Vamos a leer un versículo que mencionamos hace una semana en el capítulo 3, Génesis 3. Vamos a leer en el versículo 14 y 15 palabras del Señor en la maldición a la serpiente. Y Jehová Dios dijo a la serpiente, ¿Por cuánto esto hiciste? Maldita serás entre todas las bestias y entre todos los animales del campo. Sobre tu vientre andarás y polvo comerás todos los días de tu vida. y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya, ésta te herirá en la cabeza, y tú la herirás en el calcañar." Empezamos diciendo que no hay libro como este libro, la palabra de Dios, la Santa Biblia, En este libro, Dios se revela a nosotros. Con cada otro libro, nosotros lo leemos, pero este libro nos lee a nosotros. Nos revela a nosotros mismos. Y en este estudio, esta serie de unos ocho o nueve estudios en que estamos resumiendo la Biblia, vimos en la semana pasada los grandes temas centrales sobre las que se construye el resto de la escritura. En los primeros tres capítulos de Génesis, consideramos la creación y la caída del hombre en el pecado, la maldición de muerte sobre el hombre y sobre toda la tierra, Y vimos la promesa de la redención que Dios hizo aquí en este versículo 15. Esta te herirá en la cabeza y tú la herirás en el calcañar. palabras de Dios a Satanás respecto al Redentor que iba a venir. La simiente de la mujer que está hablando del Señor Jesucristo. Y aquí en Génesis 3, 15, leemos de este conflicto de los siglos. que culminaría con la victoria de Cristo sobre Satanás, la anulación de la maldición sobre el hombre y la tierra, el restablecimiento de la vida, aún la vida eterna, la restauración de comunión con Dios, que se perdió en la caída y la maldición. Y toda la historia humana es el desenlace de este drama de redención que desarrolla hasta el día de hoy. Estos primeros capítulos de la Palabra de Dios son muy importantes. Y aún el resto del Libro de Génesis que vamos a considerar ahora tiene mucho material fundamental para el resto de la Biblia. Leemos como Adán y Eva no murieron físicamente de inmediato. Aunque empezaron a morir, empezaron a envejecer y a decaer físicamente en aquel momento, en aquel día. Pero la gracia de Dios estaba en operación, en acción. les concedió tiempo para tener una familia y perpetuar la raza humana para traer al Redentor prometido que sería la simiente de la mujer. Ahora El resto del libro de Génesis se puede dividir en dos partes. La primera parte del capítulo cuatro al capítulo once. De Adán a Abraham. Y estos capítulos cuatro a once son la historia de la humanidad en general. Y en estos capítulos se registran tres grandes acontecimientos. Primero es la historia que acabo de leer de Caín y Abel, hijos de Adán y Eva. Abel creó en Dios. creó en la promesa del Redentor que iba a venir, pero Caín no creó. Dios aceptó a Abel y su ofrenda y rechazó a Caín y la suya. Y por envidia y odio, Este Caín, el primer hombre nacido, fue un asesino. Es un testimonio a la raza humana caída en el pecado, que el primer hombre nacido, porque Adán no fue nacido, fue creado como adulto, Caín fue el primer hombre nacido. Fue un asesino. Y el mundo entero está simbolizado en estos dos hermanos. Hay los que son creyentes y los que son incrédulos. Los salvados y los perdidos. los que adoran a Dios verdaderamente y los que por lo más le adoran falsamente, en vano. Y amigos, esta misma división continúa hasta el día de hoy. Cada uno de nosotros Nos vemos o en Caín o en Abel. Eres tú como Caín o como Abel. Después de la muerte de, bueno, del asesino de Abel, Dios levantó a otro hijo, a Adán y Eva, que fue fiel. Leemos en el versículo 25 de este mismo capítulo 4. Y conoció de nuevo Adán a su mujer, la cual dio a luz a un hijo y llamó su nombre Seth. Porque Dios, dijo ella, me ha dado otro descendiente en lugar de Abel a quien mató Caín. Y a Zed también le nació un hijo y llamó su nombre Enos. Y dice, entonces los hombres comenzaron a invocar el nombre de Jehová. En esta línea de Seth y su hijo Enos, vemos la línea fiel, los creyentes en Jehová, los que esperaban en el Redentor que Dios prometió. En el capítulo cinco, leemos una genealogía larga Y hay personas que dicen, ¿por qué tenemos estas genealogías a través de la Biblia en varias partes? Bueno, sirven un propósito o pues varios propósitos, pero especialmente nos muestran que Dios cumplió su promesa de enviar el Redentor por la mujer, como simiente de la mujer. Y estas genealogías lo prueban, nos muestran cómo sucedió. Y aprendemos que Dios está mirando y pues guiando nuestras vidas, nuestro nacimiento, nuestra muerte también. Dios tiene un récord de todo, de cada ser y esto es un consuelo para nosotros también. Después, en el capítulo 6 hasta el capítulo 9, leemos del gran diluvio. Con vidas muy largas y muchos hijos, la población de la tierra creció rápidamente. Y en esta población, vemos las dos líneas de personas, la línea fiel y la línea infiel. Y leemos en los primeros versículos del capítulo seis cómo estas líneas se mezclaron. Se desdibujaron, dice, y aconteció que cuando comenzaron los hombres a multiplicarse sobre la faz de la tierra y les nacieron hijas, viendo los hijos de Dios, que las hijas de los hombres eran hermosas, tomaron para sí mujeres, escogiendo entre todas. Y leemos en esta descripción del mundo antes del diluvio cómo el pecado creció. Había anarquía y violencia. Dice en el versículo 5, y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal. El mal. Todo tipo de pecado en todas partes del mundo ocurrió. Y entendemos que El hombre en pecado, dejado solo sin la gracia de Dios, tiende a la destrucción bajo la ira de Dios. Y leemos cómo Dios determinó destruir la tierra con agua como castigo. por el pecado del hombre. Pero, leemos en el versículo ocho de Génesis seis, pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová. Un hombre en el linaje de Set, que se llama Noé, halló gracia ante los ojos de Jehová, no por ninguna bondad en sí mismo, sino fue un hecho de pura gracia, gracia de Dios. Y durante ciento veinte años, Noé predicó y construyó un gran barco, según el mandato de Dios. Y en este barco, Noé y su familia, unos ocho personas, nada más, en todo. Y unos animales de la tierra sobrevivieron al diluvio en este gran barco, el arca. Y todo el resto del mundo, toda la gran población del mundo murió en el diluvio. El propósito de Dios continuó en el arca con ocho personas. Y después la tierra fue repoblada por esta familia de Noé. Es importante entender que el diluvio de Génesis explica los factores geológicos que existen en todo el mundo hoy en día. El registro fósil apoya completamente el diluvio mundial. Dios ha pues dejado evidencia en cada parte del mundo. de este gran hecho del diluvio mundial. Los evolucionistas malinterpretan esta evidencia, pues casi todo. A pesar de la abrumadora evidencia en cada lado, de este diluvio. Incluso en la familia de Noé, el pecado seguía presente. Y la humanidad seguía bajo el pecado y la maldición de la muerte Pero gracias a Dios la línea fiel, la línea de los creyentes continuó a través de algunos de los descendientes de un hijo de Noé que se llama Sem. Otra vez, vemos como el propósito de Dios continuó en la historia humana. con este set y sus descendientes. Esto nos conduce al capítulo 11. El tercer acontecimiento grande respecto a todo el mundo en general es esta Torre de Babel en el capítulo 11. La tierra volvió a poblarse rápidamente otra vez después del diluvio. Y la gente desafió la voluntad revelada de Dios de extenderse por toda la tierra, de espaciarse por toda la tierra. Y en vez de obedecer, a Dios, concentraron su civilización después del diluvio en un lugar que se llamaba Babel. Este fue el primer intento de un gobierno mundial. Este fue el plan de los hombres en Babel. Tener un gobierno sobre todo el mundo. Fue una amenaza para el pequeño número de los creyentes en Jehová, las personas fieles a él. Y déjame decir que el gobierno mundial es siempre una amenaza y debe ser resistido. Babel fue el comienzo de la falsa religión, una falsificación. de religión para competir con la verdadera religión, la adoración de Jehová. Y esta religión falsa fue construida sobre el hombre en vez de sobre Dios. Sobre el hombre y los planetas y la creación, las estrellas. en vez de Dios y la verdad revelada por Él. Según el versículo 4 de Génesis 11, dijeron, de toda la tierra. El propósito de esta gran torre de Babel fue hacer un nombre para el hombre. La religión verdadera tiene que ver con hacer un nombre a Dios, glorificar a Él. Pero la religión falsa quiere glorificar al hombre. Empezaron a construir un alto monumento, una torre, una estructura tipo pirámide, sin duda, para alabar al hombre. Tal vez fue un observatorio o un lugar de sacrificio. Tuvieron grandes planes para unificar toda la tierra e imponer la conformidad a todos, incluidos los infieles. Pero Dios le puso fin rápidamente por medio de confundir su comunicación. No podían entender el uno al otro cuando Dios hizo este milagro de confundir las lenguas. Y esto dio división y dispersión según las lenguas. Así vemos el comienzo de las naciones del mundo. Y la gran característica es hablar lenguas individuales. Las gentes dispersan después por toda la tierra. Los que hablaban la misma lengua se fueron a un lugar y otros a otro lugar. Y lo que se llama la barrera del lenguaje continúa hasta ahora, ¿verdad? Pero, más que eso, la barrera del lenguaje continúa impidiendo un gobierno mundial hasta el día de hoy. Y esto fue el propósito de Dios, para guardar seguro los fieles en este mundo. Por esta época ocurrió la historia de Job. Hay un libro más adelante que se llama el libro de Job. Y en esta historia de este hombre Job vemos un ejemplo en detalle de la línea fiel. Este Job fue un hombre sufriente, probado y fiel a Dios. Esperaba la llegada del Redentor. Y habla de eso en varias partes del libro de Job. Esta es la parte de Génesis, los primeros once capítulos que hablan de la historia del hombre generalmente. Comenzando con el capítulo doce, leemos de la historia de una nación en particular. Otra vez el propósito de Dios continuó. Una nación fue escogida para llevar a cabo el propósito redentor de Dios. Y esa nación comenzó con un solo hombre que se llama Abraham. unos 200 años después de Babel, más o menos, es el tiempo de Abraham. Y desde Génesis 12, el capítulo 12, la historia del Antiguo Testamento se especializa y se centra en lo que sucedió con Abraham y sus descendientes que se convertiría en la nación de Israel. Y en el resto de Génesis, leemos de ciertos personajes claves, comenzando con Abraham mismo. La historia de Abraham Leemos en el capítulo 12 al capítulo 24. Leemos en el capítulo 12 y el versículo 1. Y Jehová había dicho a Abram, vete de tu tierra y de tu parentela y de la casa de tu padre a la tierra que te mostraré. Y haré de ti una gran nación, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición. Y bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren, maldeciré. Y serán benditas en ti todas las familias de la tierra. Esta llamada de Abraham desde Ur de los Caldeos es un acontecimiento de suma importancia en el Antiguo Testamento. En él vemos obviamente, claramente, la elección hecha por Dios. Abraham no era diferente de ninguno de sus vecinos, pero Dios lo eligió, Dios lo escogió como objeto de su favor inmerecido. Dios no le debía nada a Abraham. lo eligió libremente para bendición, para bendecirlo. Y en estos versículos es como si Dios dijera, la simiente promotida de la mujer en Génesis 3, 15, Vendrá a través de ti y a través de tu familia. Que llegará. A ser una gran nación. Dice otra vez al fin del versículo 3 y serán benditas en ti todas las familias de la tierra como. Por. La venida del Redentor. en su, bueno, por sus descendientes. Dios prometió a Abram una simiente y una tierra y le dio la circuncisión como marca distintiva de su pacto, de su promesa solemne a Abram Y podemos preguntar ¿por qué Dios redujo así el foco de su propósito a un solo hombre? y según la palabra de Dios, fue para establecer una línea fiel, separada y cohesiva que sería guardiana de la revelación escrita, registrando las promesas de Dios y los cumplimientos de sus promesas. Y otra vez, a través de Abraham vendría el Redentor, el Salvador, el Mesías, el Ungido de Dios, el Señor Jesucristo. Abraham no vivió para ver el cumplimiento de las promesas. Eso quedaba para las generaciones futuras, pero Abraham creyó en la palabra de Dios y actuó en consecuencia. Su fe es su gran característica. Fe dada por Dios a Abraham y ejercida por Abraham. Y vemos el ejercicio de su fe en muchas escenas en su vida, al dejar su ciudad natal y vivir como nómada en tiendas toda su vida, en el cambiar el nombre de padre exaltado es lo que quiere decir Abraham en la forma corta. Y su nombre se cambió a padre de muchas naciones, Abraham, en la forma más larga. Perdón. Vemos el ejercicio de su fe en Dios y en sus promesas en dar a luz a Isaac cuando tenía cien años y ofrecer este mismo Isaac como sacrificio, casi ofrecerlo. y comprar una tumba en la tierra extranjera que aún no era suya. Pero fue lo que Dios había prometido a darle o dar a sus descendientes. Abraham vivió una vida de fe. y es un modelo de fe y obediencia fiel a Dios para todos nosotros. Se convirtió en una especie de padre, y este título es utilizado respecto a él en la palabra de Dios, un padre, es decir, una plantilla o modelo para todos los que creerían en Dios después de Abraham. Más tarde, Dios se identifica como el Dios de Abraham. Y los que tienen la fe que Abraham tuvo son justos con Dios, aceptados con Dios. como Abraham fue. Confían en el mismo Dios y reciben sus promesas como Abraham las recibió. Las promesas espirituales que Dios hizo a Abraham se cumplen en Cristo y en aquellos a quienes Cristo redime. Y esta es la perspectiva del Nuevo Testamento claramente. en Galatas 3 y Romanos 4 y otros pasajes. Bueno, rápidamente pasamos al hijo de Abraham que se llama Isaac. Y la historia de Isaac encontramos en los capítulos 25 a 27. Y este Isaac tuvo dos hijos Esaú y Jacob. Y Jacob fue la línea de promesa, la línea fiel. Y la historia de Jacob leemos en el capítulo 28 a 36. Este Jacob, mientras juía por su vida de su hermano Esaú, Dios le confirmó el pacto, el pacto de la gracia. Fue heredero de las promesas. Y este Jacob engendró doce hijos. A su regreso a Canaán, Dios le cambió el nombre por el de Israel. Y este Jacob ahora se llama Israel, que quiere decir príncipe con Dios. Y este nombre siguió a utilizarse para su familia. y la nación que vino de ellos. Y por fin hubo doce hijos de Jacob, patriarcas de la nación, y leemos de estos doce hijos en el capítulo 37 hasta el fin de Génesis, el capítulo 50. Y en estos capítulos se presta más atención a un hijo, el undécimo, que se llama José. Este José fue odiado por sus hermanos y vendido por ellos como esclavo. Y terminó en Egipto. Vemos que en esta familia de Jacob no todos eran verdaderamente fieles. Pero Dios siempre preservó y preserva ahora un remanente fiel. En Egipto, por providencias asombrosas, José se convierte en el segundo al mando, es bien dicho, de Faraón, el rey de Egipto, desde un esclavo al segundo al mando, de faraón y llegó a ser el instrumento para las supervivencia de la familia durante la hambruna. Y no hemos tenido tiempo para leer mucho, pero debemos leer la la vista que José tuvo sobre todo la providencia de Dios en su vida. Dijo a sus hermanos, los que lo vendieron a la esclavitud, dijo, vosotros pensasteis mal contra mí, pero Dios lo pensó para bien. para hacer lo que vemos hoy, para mantener con vida a mucho pueblo. Y amigos, esta es la perspectiva que necesitamos tener sobre todas las cosas que nos pasan en esta vida. Es según el propósito de Dios. Aún las cosas difíciles y el mal que otras personas hacen contra nosotros. Dios lo piensa para bien. Descansamos en la gracia de Dios, en su gran poder y sabiduría y propósito de gracia en Cristo. Estamos en manos buenos, digo, en las manos de Dios. Por fin, en estos últimos versículos del libro de Génesis, muere Jacob, muere José, muere todos sus hermanos, Pero vive el propósito de Dios. Y leemos como a través de Judá, otro hijo de Jacob, uno de los doce, vendría el Redentor. En estas bendiciones que Jacob pronunció respecto a sus hijos, Dijo en el capítulo 49, el versículo 10, y terminamos con este versículo, no será quitado de Judá el centro ni legislador de entre sus pies hasta que venga Silo y a él será la obediencia de los pueblos. Este Silo, ¿qué es? significa el que trae la paz. Y este versículo es otra promesa de Dios respecto al Redentor del mundo, el Señor Jesús. Este si lo iba a venir por la tribu de Judá. Y las genealogías de Mateo y Lucas en el Nuevo Testamento muestran que fue así. Por la tribu de Judá vino el Mesías. Terminamos diciendo esto. Cristo es el que trae la paz. Cristo es el silo. es el pacificador, el reconciliador de Dios y los pecadores. Y amigo, solo en Cristo encontrarás la paz con Dios. Y mi pregunta es, ¿te acercas a Dios por la fe en Cristo? Si es así, el Dios de Abraham es tu Dios. Amén. Si no es así, digo, cree en él, cree en Cristo ahora y sálvate por su gracia. Amén.