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Romanos 8-9 dice, Si alguno no tiene el Espíritu, no es de él. Cada uno que ha aceptado a Cristo en su corazón tiene el Espíritu Santo en su vida y corazón. Muchos tratan porque todos quisiéramos ser mejores personas de lo que somos, y muchos tratan de ser mejores personas en su propia fuerza, y se convencen, yo puedo, yo puedo, y es lo que dijo Cristo en la parábola de un señor que ella fue un demonio, pero luego, si no tiene el Espíritu del Señor en su corazón, regresa eventualmente este demonio de vicios, y entonces trae siete peores con él. Nosotros no podemos vivir la vida cristiana que quisiéramos vivir sin el poder del Espíritu Santo. Y no tienes el poder del Espíritu Santo si no tienes el Espíritu Santo en tu vida. Por eso, número uno, es aceptar a Cristo. Antes de hablar del Espíritu hay que hablar de Jesucristo. La paz del pecado es muerte y todos hemos pecado, así la muerte pasó a todos los hombres, dicen romanos 5, 12 y 19. Pero el Señor no quiere que usted viva en este pecado y que tenga que morir. Por eso el mensaje más grande de esta iglesia y de todas las iglesias, el mensaje más grande de toda la historia humana, es que Jesús Cristo nació de una virgen para vivir como Dios en la tierra siendo hombre. Él murió por ti. Él murió por mí. Y en la Biblia dice que su muerte, su sangre nos limpia de todo pecado, pagó por todo pecado. Y entonces, además de que tenemos pecado pagado, ya me da, dicen romanos 5, 9, o romanos 8, 9, Y en primera de Corintios 12, versículo 13, dice, todos habéis sido bautizados en el Espíritu, ya cuando recibes al Señor, no sólo tienes perdón, pero ya tienes el Espíritu Santo adentro. Por esta razón, muchas veces yo me doy cuenta que predico, usted debe servir al Señor y no debe hacer cosas malas y casi no necesito predicar porque dice en 1 Juan 2, 20 y 27 que todos tenemos la unción del Espíritu y somos salvos que nos enseña todas las cosas. Así que, muchas veces, uno dice, el pastor no sabe de qué habla, no hay nada malo con eso u otra cosa, pero en tu corazón, como predico de acuerdo a la palabra de Dios, Dios quiera, entonces yo sé que predico de acuerdo con el Espíritu Santo, y eso hace que el Espíritu Santo le está convirtiendo. Y aunque podemos dar excusas y razones y decir, oh, eso no importa, yo puedo hacer eso otra cosa, yo no tengo que orar tanto, no tengo que ir a la iglesia tanto, no tengo que ganar almas, yo no tengo que hacer eso y todavía soy buen cristiano. Puedes decirlo. Y puedes convencerte a ti mismo de esto, pero allí en tu corazoncito, en tu alma, en tu conciencia, si usted es salvo, el Espíritu Santo está convenciéndote, usted debe servir al Señor más. Usted debe alejarte de las cosas malas y mundanas más. Usted debe entregarte al Señor, y realmente el pastor no tiene que predicarlo, el Espíritu le habla. Pero, como el Señor sabe que podemos entristecer, resistir y apagar el Espíritu Santo, y ya no escuchar esa vocecita y dar nuestras excusas, por eso el Señor dice, lo que yo les digo, apóstoles, en el oído, ustedes tienen que predicar desde los techos. desde la azotea de la casa, porque los hombres tienen que escuchar y así confirmar que esta vocecita de verdad es la voz del Espíritu y confirmarlo con la predicación de la Palabra de Dios. Así que el Espíritu Santo es todo importante en la vida. Primero para convencerte a ser salvo. Romano Juan 16, 7 y 8 dice que el Espíritu convence a todo el mundo de pecado, juicio y justicia. Convence a todos. Así que si usted nunca escucha un sermón de mí, usted en su corazón sabe por el convencimiento del Espíritu que debe andar en la luz, que debe acercarse a Jesús, que no debe vivir esta vida mundana, que debe vivir para el Señor Jesucristo. La predicación es solamente un instrumento del Espíritu para usar la Palabra de Dios, que es la Espada del Espíritu, a convencernos de lo que sabemos en el corazoncito que es correcto, que debemos servir al Señor y seguir al Señor, y así aclarar en una voz física lo que el Espíritu nos dice en esa vocecita de la conciencia en el corazón. No, santo, si usted es salvo. Si usted no es salvo, déjame decir que lo que voy a decir ahora no le importa a usted. Así que si no quiere ser salvo, si no el Espíritu no está en su corazón, nunca puede ser lleno del Santo Espíritu si no tiene el Espíritu en el corazón. Pero si tienes el Espíritu, vas a tener hambre y sed de justicia. Vas a tener ganas de servir al Señor. Y siempre que uno de los primeros sermones, todavía recuerdo, hay un pastor ya ancianito, no sé si tiene ochenta y algo años de edad, el doctor Nelson, todavía predica a veces en Bob Jones, y yo recuerdo en 1961, El primer año que estuve en la Universidad Bob Jones, que él predicó acerca de... era 72, porque fue, me parece, en la conferencia bíblica de Bob Jones, y entonces, al final de ese año, 71-72, y entonces predicó de la genuina del Santo Espíritu. Luego, como treinta años más tarde, le escuché predicar otra vez el mismo sermón. Y así que es un sermón que ha sido de bendición a muchos porque es pura palabra de Dios. La necesidad de ser lleno del Santo Espíritu. Hace varios miércoles, primero de junio, tratamos de aprender Orfeisios 5, 18, como uno de los versículos de Victoria para aprender para acampamento, no debes emborracharte, ¿verdad? de vino si no está lleno de Santo Espíritu. Y así prediqué acerca de eso, usando especialmente Romanos 8 y un poco de Efesios 5, 18 al 20. A lo mejor regreso a una porción de esto esta noche, pero hay mucho para decir de la llenura del Santo Espíritu. Incluso sólo hace una semana que lo mencioné en relación con el fruto del Espíritu en miércoles. Ya prediqué mucho por Romanos 8 y allí entonces hablé de los pasos para ser lleno del Santo Espíritu. A lo mejor lo predico en más detalle el domingo que viene por la noche. Pero por ahora vamos a ir al Libro de los Hechos. porque aquí tiene la primera presentación de la llenura del Santo Espíritu al comenzar la Iglesia. De hecho, el Señor dijo en Juan 20, 22, que respiró y dijo, recibida el Espíritu, Y hay debate de qué significa esto en muchos sentidos, pero yo lo entiendo más bien que es una profecía que los discípulos iban a recibir el Santo Espíritu en el día de Pentecostés. en Hechos capítulo 2. Y la misma profecía que Cristo dio en Juan 20 está repitiendo en Hechos 1, versículo 5. Porque Juan ciertamente bautizó con agua, mas vosotros seréis bautizados en el Espíritu Santo dentro de no muchos días. A través de los años, si usted entiende un poco la doctrina de la Iglesia y la historia de la doctrina de la Iglesia, y mi hijo Jason va tardando posiblemente dos o tres sábados acerca de la historia de la doctrina, Va, si lees muchos libros, o hace un siglo casi, va a leer libros que hablan del bautismo del Espíritu cuando realmente están hablando de la llenura del Santo Espíritu. Y a veces lo confunden con la unción del Espíritu, que es su moral dentro de nosotros, y ese poder que nos da para servirle al principio de la vida cristiana. Pero aquí, él está hablando del momento cuando iba a venir el Espíritu y formar una iglesia, bautizarlos en un solo cuerpo. El bautismo físico es símbolo de muchas cosas. Primero es símbolo de la muerte y resurrección de Jesús y como yo estoy diciendo a todos que creo en la muerte y resurrección de Jesús para salvar mi pecado y es un símbolo de mi obediencia al Señor, es un símbolo de mi deseo de de morir a mi naturaleza vieja y vivir una vida cristiana para el Señor, pero también es símbolo, según eso, en 1 Corintios 2 y 13 y Colosenses 2 y 3, de un revestimiento de la nueva vida, de una asociación de cristianos con cristianos en un cuerpo de Cristo que se llama la Iglesia. Así es como ponerme el uniforme de un cristiano delante del mundo cuando me bautizo y es un símbolo entonces, primero de Pedro 3.20, habla de un lavamiento de mi conciencia. Ese bautismo es lo que el Espíritu hace en mi corazón, en mi conciencia, de lavarme, pero entonces de unirme a la Iglesia y darme una posición en el Ejército del Señor, cuando yo me bautizo físicamente, simblo lo que ya pasó en mi corazón, que fui bautizado por el Espíritu para servirle. Pero, Aunque estoy ya bautizado en el Espíritu, Primero de Corintios 12, 13, todos han sido bautizados y son cristianos, ya necesito una llenura continua del Espíritu para cumplir el propósito de mi bautismo. El Señor me colocó en el cuerpo, me dio un don espiritual, bautizado, me puso en el cuerpo el don para ejercer este ministerio que me puso dentro del cuerpo, pero el bautizo, la leñura del Espíritu Santo, me da poder para cumplir con ese propósito del bautismo. Necesito poder y fuerza. Así que aquí es una profecía del bautismo del Espíritu. Pero vamos a ver en un momento cuando fueron bautizados a la vez fueron llenos del Santo Espíritu en el momento de comenzar la Iglesia y así yo creo que cuando un cristiano ya acepta a Cristo no solo es bautizado por el Espíritu, pero en ese momento de salvación, de entrega total al Señor, está también lleno del Santo Espíritu. La cosa es que el bautismo es una sola vez. Nunca se repite, no se pierde, no se recibe otra vez. Pero la llenura del Santo Espíritu, significa una entrega al Señor. Y uno cuando es salvo se entrega al Señor, pero muchas veces luego, aunque sigue salvo, ya se aleja de esa entrega. Es como si retira esa entrega al Señor. Ya resiste la guía del Señor para ganar almas, para servirle al Señor. Y entonces pierde la llenura del Santo Espíritu, porque la llenura es la cosa de Efeisios 5.18 que significa que mi mente está empapada de lo espiritual. Romanos 8, versículo 5, vamos a ver en un momento, que dice que los que están ocupados del Espíritu son los que de verdad piensan en las cosas del Espíritu y sin tener ese pensar llenándome como un joven que no puede pensar en otra cosa sino esa muchacha, o no puede pensar en esa cosa sino esa pieza que va a tener, o no puede pensar en otra cosa sino lo que va a hacer después de la iglesia y ese cine. Yo me doy cuenta que esta semana había un cine allí que muchos fueron para ver, para mí por lástima, pero eso es de cada uno. Pero de cualquier manera, un problema que tengo con los cines del mundo es que esta película está corriendo en las mentes de muchos jóvenes hoy. y por eso no están concentrando lo que yo estoy diciendo, están todavía reviviendo lo que miraron, no solo en esa película, pero en cualquier película que haya visto durante la semana, es que le enfoque su mente en eso. En el momento de estar enfocado en esa película, absorto en cualquier película, no está absorto en el espíritu, no está ocupado en el espíritu. La mente no está llena de qué quiere el espíritu para mí. Y por esa razón yo digo que nosotros perdemos mucho poder de Dios y mucha bendición de Dios. cuando nosotros no queremos encontrar nuestra satisfacción en Cristo. Necesito más que Cristo para satisfacerme. Es que sí, está bonito ir a la iglesia, es bonito leer la Biblia, pero también hay que ir a las películas, ¿verdad? También hay que escuchar la música del mundo, ¿verdad? Que uno no puede vivir sin eso. ¿Cómo va a tener gozo y alegría como joven si no hace las cosas mundanas? Y mi contención es que uno lleno del espíritu no le importan las otras cosas. Un pastor no tiene que decir, no hagas eso, no escuches eso, no vayas aquí. No, si usted está lleno del espíritu, dice, yo no quiero nada para estorbar mi mente de pensar en lo espiritual, de pensar en Dios, en la gloria de Jesús, en las almas, en la palabra de Dios. Yo quiero llenar mi mente de lo espiritual, y como la espada del Espíritu es la palabra de Dios, cuando hablo de ser lleno de algo, en Colosios 3, 16 y 17, el mismo texto se lee solamente en vez de llenarse del Espíritu, la idea de llenarse de la Palabra del Señor. Porque los que están con la mente tan llena de... Mira, tengo versículos para memorizar. Tengo que pensar, ¿qué son esos versículos? Y una y otra vez va a dedicar por lo menos media hora al día para memorizar versículos de la Biblia. Y ya cuando está tan empapada la mente de memorizar la Biblia, lo demás del día va a gobernar su vida y no va a querer olvidar esos versículos porque el Espíritu Santo va a guiarte con esos versículos que usted está memorizando de la Palabra de Dios. Aquí encontramos que uno que está lleno del mundo Y la mente está ocupada con esa fiesta, esa música, esa película. No está ocupada con los versículos de la Biblia. No está ocupada con las historias de la Biblia. No tiene la mente ocupada con esas cosas si está ocupada con otras cosas. Y no digo que las otras cosas son malas. A lo mejor las otras cosas es como salvar las ballenas de la tierra. Y usted tiene una gran meta en tu vida. Tengo que salvar las ballenas. Porque hay muchos que esto es su meta, ¿verdad? Dice que hay que salvar las ballenas que están en la tierra. Y no hay nada más importante que salvar las ballenas de la tierra. que hablé con un vecino aquí, ¿verdad?, que estaba quejándose de una cosa, y dijo, mira, lo más importante es salvar las plantas, no importa ganar almas, no importa orar, un pastor, dedícase, me dijo el pastor, dedícase todos los domingos a predicarle a la gente la necesidad de la ecología de salvar las plantas de la tierra, porque no hay cosa más importante que salvar las plantas. Y las plantas, hay que salvarlas, va a tener vida eterna, ¿verdad? La Biblia dice, no, las plantas son como una hierba de campo, que se florece, se marchita, y allí va. Y si está plantado en mi jardín, marchita más rápido. Pero el hecho es que No puedo dedicar mi vida a lo que se marchita. Tengo que dedicar, pero hay muchos que, oh, hay que hacerlo bueno. Hay que salvar las plantas y las ballenas y hay que rescatar los drogadictos. Y es bueno rescatar drogadictos. Es que debe hacer los drogadictos vivir vidas sanas y buenas sin las drogas para que vayan al infierno bien sanos. Así es lo que van a decir, es que no le dicen que debe aceptar a Cristo, que debe entregar su corazón a Cristo si no es un lugar cristiano para decirle eso, y decir, mira, ella fue ese demonio de la bebida, que bueno, del alcohol, que bueno, de la droga, que bueno, aleluya, amén. Es que queremos que vaya bien cuerdo y sin borrachera al infierno. ¿Y qué vale? ¿Qué vale tener plantas sanas, ballenas vivas y borrachos que ya han dejado su borrachera si van al infierno después? ¿Qué es más importante en esta vida que servirle al Señor? y llenarnos de lo espiritual, de la gloria de Jesucristo, de la gloria de Dios. ¿Qué puede dar más llenura a la vida que servirle a Él? Por eso, uno que es salvo cristiano de verdad tiene interés en esto. Uno que no es salvo dice, está interesante eso, pastor. Tengo una película que mirar. ¿Cuándo va a terminar el servicio? Pero uno que es salvo está pensando, eso es lo que quiero yo. Cuando escuché al Dr. Nelson allí la primera vez de la Genura del Santo Espíritu, en medio del sermón me eché a llorar. Y salí de esa capilla de Bob Jones. Estaban usando nada más una capilla llamada Rodeheaver, uno más chiquito, ¿verdad?, que solo caben seis mil personas, no donde van ahora de siete mil personas. Pero allí entonces me eché a llorar. Y entonces fui corriendo a mi dormitorio, donde ya creo que perdí el almuerzo de este día, y solamente quería orar. Y decía el Señor, lléname del Santo Espíritu. No me importa nada más en el mundo que ganar almas, que entender las palabras, que servirte, que glorificarte, Señor. Lléname del Espíritu, porque no puedo hacer eso a mi propio poder. Y es una cosa que uno se llena en un día, pero el próximo día o dentro de cinco minutos resiste el espíritu y se aleja de él. ¿Cuántos han venido al altar aquí? Es buena cosa, pero a lo mejor ya nada más diez minutos después está en la calle platicando con otros de groserías y vulgaridades y cosas mundanas, y se olvida completamente del deseo de seguir a Cristo de todo corazón. La llenura del Espíritu Santo es lo que de verdad nos guarda de esto, y guardarnos de esto es lo que el Espíritu usa para prepararnos para la llenura del Santo Espíritu. Porque la llenura es el control del Espíritu Santo de mi vida, de decir, Señor guíame, Contrólame, úsame, dame poder, Señor, dame tu dirección en mi vida. No quiero hacer nada de mi voluntad. Señor, Tú tienes que darme la sabiduría y la dirección. Y Señor, necesito el poder para resistir mi tentación y para ganar almas para Cristo. Por esa razón lo que quiero hacer en estos minutos es leer los versículos en Hechos que tienen que ver en especial con la leyenda del Santo Espíritu. No voy a comentarlo con mucho detalle. El Pastor Esteban va a dar todo. una clase acerca de hechos de los apóstoles en diciembre, octubre y noviembre a través del año a los sábados y va a poder estudiarlo con 26 clases y los mediantes. Pero ahora solamente leer algunos de los versículos y mirar cuando habla de la llenura del espíritu habla de otra cosa. y con qué asocia la llenura en nuestras vidas. Aquí encontramos en Hechos 1-8 que dice, recibe de poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, Todavía no habla de la llenura. Habla de la venida del Santo Espíritu, su bautismo, en el momento de comenzar la iglesia, o para nosotros, en el momento de insertarlo. Pero está indicando la necesidad de su llenura con venir sobre nosotros el Espíritu Santo, porque dice, cuando haya venido sobre vosotros. También en este momento el Espíritu vino dentro de ellos para morar en ellos. Pero cuando habla de venir sobre nosotros, muchas veces indica más la idea de tener poder del Espíritu, dirección del Espíritu, aunque el texto se puede interpretar de diferentes maneras. Aquí entonces tenemos en Capítulo 2, versículo 4, en el día de Pentecostés, cuando ellos fueron bautizados del Espíritu Santo, a la vez, en versículo 4, dice, fueron llenos, todos llenos, todos los que fueron bautizados recibieron Espíritu, fueron llenos del Espíritu Santo, y allí comenzaron a hablar en otras lenguas según el Espíritu les daba si hablase. Tenía que comenzar la iglesia con ese don de las lenguas para mostrar que los judíos incrédulos serían castigados y exiliados para escuchar otras lenguas en otras tierras por su rebelión, y así que ya que se cumplió eso, Cuando vino Tito, el general de Roma, en el año 60 después de Cristo, destruyó Jerusalén, a la vez entonces creo que realmente se hizo las lenguas. En ese tiempo, porque ya no había más necesidad de las lenguas especiales, pues ya se cumplió la profecía de que los judíos incrédulos serían castigados y exiliados. No obstante, eso creo que tiene un sentido espiritual para nosotros, como en Hechos 1-8. La idea es que el Señor suelta nuestra lengua para alabar al Señor, y nos ayuda para alabarle delante de otros, y comenzaron a hablar. Y muchas veces queremos hablar hasta en otras lenguas. Mi lengua natal es el inglés, por supuesto. Y así el Señor tiene que darme una ayuda para hablar algo del español para que me puedan entender. El hecho es que tenemos que decir, Señor, ayúdame a hablar por Ti. Otras lenguas ¿Qué si ponemos una cosa un poco espiritualizada de eso? Y decir que mi lengua, cuando soy cristiano, llega a ser lengua diferente de lo que era antes de ser cristiano. Ya tengo otro vocabulario, ya tengo otra manera de hablar, no con blasfemias, no con palabrosas, no con cosas mundanas, sino ya hablo en otra lengua y la gente dice, ni le entiendo a usted ahora porque ya no está hablando con la lengua de antes. Pero hablando en otro sentido, misioneros, quiero hablar no solo en Jerusalén y Samaria, pero en todo el mundo. Señor, si es tu voluntad, ayúdame a hablar en otras lenguas para predicar el Evangelio en otros países. Aquí la idea original, por supuesto, es hablar en las lenguas que el Señor les dio para hablar para diferentes naciones en Hechos 2 y predicar a la gente, o mejor dicho, alabar al Señor delante de la gente para que miraban el poder del Señor. Pero aquí habla de hablar. Esto es lo que quiero apuntar. Llenos para hablar. Vamos a ver esto en la mayoría de los versículos de Hechos. Que cuando hablan de la llenura del Santo Espíritu, hablan de muchas cosas, pero entre las cosas de las más importantes, es que es para hablar con el Señor. Cuando uno va, como ayer, a tocar fuerzas, entonces uno dice, Señor, no tengo valor, no tengo palabras, por eso confío en el Señor. Como Moisés, ¿Quién es tu lengua? ¿Quién hizo tu lengua? dice el Señor en Éxodo 3. Y así, cuando Moisés dijo, manda otro, allí Dios se irrita, allí Dios se enfada. con Moisés, se enoja con Moisés. Cuando Moisés dice, no envía otro, yo no voy a hacerlo. Porque Dios dice, yo sé que no puedes en tu propia fuerza, pero yo hice tu lengua y yo pondré las palabras en tu boca y tu tendrás las palabras que necesites decir. Y entonces muchas veces no necesitas decir nada. En la mayoría de casos, cuando vamos tocando las puertas, les invito a la iglesia, les digo, Jesús le quiere salvar, si quiere, podemos hablar, y muchos ya no quieren hablar. Pero, no debo así hablar, si el Espíritu no me da la apertura, y no me da las palabras. Pero, a veces abre la conversación, y si Él abre la conversación, Él me dará. las palabras para hablar. Puedes confiar en el Señor para usarte a ti para hablar por el Señor. Luego en Hechos 4, versículo 8, la próxima vez que habla que se encuentra algo de la genuina del Santo Espíritu, 4, 8. Entonces Pedro lleno del Espíritu Santo les dijo, gobernantes del pueblo y ancianos de Israel ya empiezan a predicar a la gente, así fue lleno del Espíritu Santo para hablar en el nombre de Jesucristo. Versículo 10 Sea notorio a todos vosotros y a todo pueblo, que en el nombre de Jesucristo, a quien vosotros crucificasteis, a quien Dios rechazó por él este hombre, está en vuestra presencia sano. Y había sanado un Señor, y dice, en el nombre de Jesucristo, este hombre pudo ser santo, salvo y sano, y así Pedro lo dijo, de Jesús lleno del Santo Espíritu. No sé por qué pasa, pero llegamos a hablar de la religión y podemos discutir. Mi iglesia es mejor que tu iglesia. Mi denominación es mejor que tu denominación. Pero cuando viene de hablar de Jesucristo y no más a hablar de Jesucristo, ya parece que no podemos ni hablar. hace que el Espíritu Santo nos llena, porque uno puede hablar de Jesús sólo en el poder del Espíritu y hablar eficazmente del Señor Jesús sólo en el poder del Espíritu Santo. Si usted trata de hablar de Jesús a la gente sin el poder del Espíritu Santo, a lo mejor discute de Jesús, pero no va a convencer a nadie que Jesús debe ser su Salvador, No van a querer ser salvos si ustedes no predican el poder del Espíritu Lleno, del Espíritu Santo, como Pedro. Capítulo 4, versículo 31, sigue. Delante entonces, con la llenura, aquí están perseguidos, y entonces están antes escondidos allí, y dice, estaban orando. Y cuando vieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló. y todos fueron llenos del Espíritu Santo y hablaron con denuedo la Palabra de Dios. Ves que habla mucho de hablar, predicar, testificar y con denuedo, con valor. ¡Ay, no tengo valor! Porque necesita ser lleno del Espíritu Santo. Y así es que cuando uno tiene la llenura, la entrega del Espíritu para dirigir su vida, para darle poder, y sabiduría, entonces la llenura me da de nuevo, me da valor que yo no tengo, ni tienes tú, para hablar a nadie de Cristo, si no decimos Señor después de orar, lléname de Santo Espíritu y al Señor puede ayudarnos. Capítulo 6, versículo 3, después hay más percusión en capítulo 5 aquí, y poder salir para, hace 541 ellos salieron de la presencia del concilio, gozosos de haber sido tenidos por dignos de padecer a frente por causa del nombre. Ellos tenían gozo en enfrentar a estas tribulaciones por causa de 431 que estaban llenos de Santo Espíritu. No podemos enfrentar lo que los hermanos enfrentaron en algunas casas ayer, si no tiene la llenura del Santo Espíritu, pero lleno del Espíritu uno hasta encuentra el gozo que el Señor le permite a sufrir un poco por su nombre para glorificarle a Él. Pero entonces capítulo 6 y versículo 3 dice, Buscad pues hermanos de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, lleno del Espíritu Santo y con el Espíritu lleno de sabiduría a quienes encargamos de este trabajo. Uno quiere trabajar por el Señor que está lleno del Santo Espíritu. Si usted no quiere trabajar por el Señor es porque no está lleno del Santo Espíritu. Tiene que estar lleno y cuando está lleno, no me diga, oh, yo soy lleno del Santo Espíritu, pero no quiero ganar almas. No, si usted está lleno, va a querer servir al Señor. Pero lo que aquí dice es que varones de buen testimonio y de sabiduría tenían allí en el medio la leñura del Santo Espíritu para ayudarles a resistir el pecado, dar buen testimonio de santidad, y a la vez para tener la sabiduría para vivir de acuerdo a la palabra de Dios y hacer las cosas con prudencia y la sabiduría del Señor. Todo por el poder del Espíritu Santo. Versículo 5, nota. Agradó la propuesta a la multitud de persistir en oración, ministerio de la palabra y apartar diáconos para la iglesia, y así que eligieron a Esteban, varón lleno de fe y del Espíritu Santo. Note que cuando uno está lleno del Espíritu tiene más fe. Ya no anda quejoso y preocupado que me va a pasar, cómo me voy a pagar los miles. No, lleno del Espíritu, el Espíritu le da fe para servirle, para orar y para saber que Dios proveerá todo para ti. Y versículo 8 sigue hablando de Esteban. Esteban lleno de gracia y de poder, pero yo no tengo poder para vencer el pecado menos predicar a otros. Bueno, hay que ser lleno de gracia y poder y eso viene del Espíritu Santo para la gloria del Señor, como hemos leído en versículo 5. La gracia de Dios sobre ti, el poder de Dios para hacer grandes prodigios y señales, llenar muchas almas, y orar, y ver Dios contestar las oraciones, para hacer esos señales, y orar, y ver sus milagros. Ya eso viene de la llenura del Santo Espíritu de su poder. Capítulo 5, capítulo 6 entonces, Hablo de Esteban como tenía poder hasta para morir, porque estaba lleno de Santo Espíritu. Tenía sabiduría para ser un diáfano en la iglesia, porque estaba lleno de Santo Espíritu. Capítulo 7, versículo 55. 7, 55. Pero Esteban, Lleno de Santo Espíritu, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, y dijo, ¡He aquí! Vean los cielos abiertos, el Hijo del Hombre que está a la diestra, y los enemigos dieron voces, y así le echaron por la ciudad, le apedrearon, y le hicieron martir, así el primer martir de la iglesia. Lleno del Santo Espíritu tenía fuerza para llegar hasta ser mártir, porque lleno del Santo Espíritu tenía los ojos puestos en el cielo y vio la gloria de Dios y a Jesús. Usted lee la Biblia, usted escucha un sermón, y si usted está lleno del Santo Espíritu, no está escuchando la voz del pastor, no está leyendo palabras secas. Usted está escuchando la voz de su Salvador, de tu Amado Celestial, del Espíritu Santo de Dios iluminándote el Señor Jesús. Cuando usted ora, es como si puede imaginar que Jesús está allí en su Trono del Cielo, y usted un gusano chiquitito hablando delante de Él. Y usted levanta los ojos y usted puede ver y sentir la presencia del Señor Jesucristo en tu vida y en tu corazón. guiándote y alabándole a él para su honra y gloria, porque usted está lleno del Santo Espíritu, tus ojos están puestos en el cielo, y dice en Efesios 1 que andes en los celestiales para glorificar al Señor. Luego dice en capítulo 9, versículo 17, siguiendo de hablar de la llenura. Fue entonces Ananías y entró en la casa, porque ya Saúl se había convertido, iba a ser Pablo, verdad, San Pablo. Y ese Ananías, un profeta, pone sobre sus manos y dijo, hermano Saúl, el Señor Jesús, quien se te apareció en el camino por donde venías, me ha enviado para que recibas la vista y que seas lleno de Santo Espíritu y al momento le cayeron los ojos cuando tenía la llenura del Espíritu como estamos porque él había sido cegado por un tiempo y ya pudo ver otra vez literalmente y recibió al instante la vista y levantándose fue bautizado. Y en versículo 20 enseguida predicaba a Cristo en las sinagogas diciendo que este era hijo de Dios. Noten que cuando llena el espíritu puede ver claramente, físicamente, como nosotros podemos ver más bien la palabra de Dios, la voluntad de Dios, qué es lo que el Señor quiere para nuestras vidas, apreciamos más al Señor, pero entonces se bautizó. Si usted dice, yo acepté a Cristo, pero usted no se bautizó después, usted no está lleno del Santo Espíritu. Hasta me pregunto si usted es salvo, si no se presenta para ser bautizado. Porque uno que de verdad es salvo, es cristiano, lleno del Santo Espíritu. la primera cosa que quería hacer es ser bautizado. Por eso vendría a una clase como el próximo domingo para entrar y decir yo quiero ser bautizado y mostrar mi deseo de servirle al Señor. Y allí encontramos que fue bautizado en versículo 20 y enseguida predicaba a Cristo. Cuando uno está lleno de espíritu y quiere hablar de Jesucristo, Todo el mundo quiere predicar al Señor Jesucristo a todos y cómo ser salvo. Hechos 11, versículo 24. Hechos 11, versículo 24. Aquí dice, porque era varón bueno y lleno del Espíritu Santo y de fe. Y una gran multitud fue agregada al Señor aquí. Aquí encontramos que cuando el Espíritu Santo tiene su mano sobre alguien, tiene bondad. Es hombre bueno y tiene fe. Es hombre que tiene más fe y más fidelidad al Señor. Y es un hombre eficaz para ganar otras almas al Señor. Esa es mi oración por cada persona aquí, cada joven, que se meta en la vida, su deseo en la vida, es ganar muchas almas para el Señor Jesucristo. Si tú quieres ser matemático, tú quieres ser maestro, que sea con el propósito de ganar más almas a Cristo. Si quieres trabajar como jefe y dueño de una tienda, que sea para ganar más almas para Cristo. Si quieres ser misionero, que sea para ganar más almas para Cristo. Uno que está lleno del Santo Espíritu, el deseo de su vida, es ganar más almas para el Señor Jesucristo y ver si es posible una gran multitud añadida. Y no va a pasar eso si usted no está lleno del Santo Espíritu. Si usted no está lleno, usted probablemente necesite muchos otros. Y si usted testifica a alguien, nadie va a ser salvo casi, si no sea por la gracia de Dios que alguno por allí está suscrito. Usted no está ganando armas si usted no es lleno de Santo Espíritu. Y si usted es lleno del Santo Espíritu, tiene ganas de hablar de Jesucristo y ver otros llegar a conocerle al Señor Jesucristo. Aquí encontramos lleno del Espíritu, pudo así servir al Señor. Capítulo 13, versículo 9. Entonces, Saúl, que también es Pablo, lleno del Espíritu Santo, fijando en él, en un profeta malo, los ojos, dijo, Oh, lleno de todo engaño, de toda maldad, hijo del diablo, enemigo de toda justicia. No es su valor en el poder del Espíritu, pero lo que yo quiero apuntar aquí es su discernimiento. para ver si uno es sincero o no. ¿Qué es bueno? ¿Qué es malo? ¿Qué es buena doctrina? ¿Qué es mala doctrina? Aquí tenemos uno que tiene discernimiento para saber que este es un falso profeta y tener valor para reprenderle, pero lo más importante que quiero apuntar, tener discernimiento. Muchos no tienen discernimiento. Si yo les hablo, ese cine no es bueno, usted va a decir, no, no hay nada malo en eso y eso es otra cosa. Si no tiene el nudo del Santo Espíritu, no tiene discernimiento de qué es bueno y qué es malo, y sólo va a dar excusas acerca de lo mundano porque usted no quiere obedecer al Señor puesto que no entiende. No ve nada malo en eso. No ve nada malo en esa manera de vestir. No ve nada malo en esa música. Porque ese discernimiento viene a los que se llenan del Santo Espíritu. Y el Espíritu les da sabiduría, como a Esteban, lleno de sabiduría. y discernimiento, como Pablo aquí, para saber qué es bueno, qué es malo, y hasta reprender lo malo y hacer lo bueno. Capítulo 13, hablando de los primeros misioneros aquí, versículo 52, los discípulos ya estaban llenos de gozo y del Espíritu Santo. Llenos de gozo y del Espíritu Santo. ¿Por qué no tiene más fruto del Espíritu que el gozo? Será que usted necesita posiblemente ser lleno de santo espíritu para su honra y gloria. Y un versículo para terminar ya todo hecho, sólo mencioné que leeríamos Romanos 8, versículo 5, lo que comencé mencionando, Romanos 8, 5. Los que son de la carne piensan las cosas de la carne. Les interesan las cosas de la carne, pero los que son del Espíritu son las cosas del Espíritu. Porque ocuparse en la carne es muerte, mas ocuparse en el Espíritu es vida y paz. Es que es interesante un poco hoy en día el Facebook, ¿verdad? Porque se ve lo que interesa a la gente. Se ve lo que están pensando y lo que están hablando. Y así muchos no quieren hacerse amigos de la Iglesia porque no quieren que el pastor sepa lo que usted está hablando con sus amigos, ¿verdad? Yo me doy cuenta que hay algunos que no han aceptado mi invitación para ser amigos de la Iglesia. Pero de cualquier manera, haz lo que se hacen amigos, a ver si a Pastor Esteban o yo hagamos algún comentario, ¿verdad? O usted dijo que eso era bueno, recuerde que lee la Biblia hasta mejor. Para animarles, ¿verdad?, a reconocer que cuando uno es lleno del Santo Espíritu, lo que le interesa hablar es el Señor. Lee la página de la iglesia. Allí está hablando de pura Palabra de Dios, de puras cosas, de videos cristianos, de inspiración para servir al Señor, para crecer en el Señor. El hecho es que eso es lo que yo quiero pensar, es lo que quiero ocupar mi tiempo y mi mente, en servir al Señor, en ganarnos al Señor. Mis sermones son mezquinos, son pobres. Yo necesito dedicar mucho más tiempo, no menos, para llenarme del Santo Espíritu, hermanos. ¿Y usted es menos? ¿Usted no tiene interés en hacer más para Dios? ¿En ganar más almas para el Señor? A lo mejor usted necesita ser lleno del Santo Espíritu, porque entonces no tendrá nada que esconder en Facebook. Usted con mucho gusto va a decir, Pastor lee mi Facebook, porque estoy hablando de todos mis amigos de Cristo. Estoy poniendo versículos de la Biblia que leí esta mañana. Estoy poniendo las bendiciones de la iglesia. Hasta estoy dando los bosquecos de sus sermones, porque cuando Yo escucho el sermón, estoy tomando apuntes, ¿verdad? Por eso usted pone detrás en el boletín una página en blanco para escribir los apuntes del sermón. Y estoy haciéndolo. Y lo pongo en Facebook para que la gente vea que dice la palabra de Dios. Mira, yo veo Facebook como uno de los instrumentos más maravillosos para predicar la Palabra de Dios. Porque ya puede poner cada día, cada momento, otro versículo y va a aparecer en el newsfeed de la gente, ¿verdad? Hay algunos de ustedes que lo hacen. Y muchas veces estoy diciendo, like, like, like, ¿verdad? Porque me gusta cuando ya empieza a dar la Palabra de Dios y no quiere decir, ya fui a este cine, o ya Estuve haciendo esto, estuve siendo perezoso hoy. ¿Por qué quiere jactarse de estas cosas? ¿Verdad? Pero el hecho es que nosotros debemos reconocer que la palabra de Dios es lo más importante. La vida de Cristo es lo más importante. Y por esa razón, cuando usted está lleno del Espíritu Santo, el Pastor, no tiene que decirle eso, va a salir naturalmente de usted, que no va a querer dedicar tiempo a otras cosas mundanas. Porque va a querer ser más lleno del Santo Espíritu de lo que usted es. Más entregado a Él. Más guiado por Él. Dirigido por Él. Dado más poder de Él. Va a orar día y noche. Señor, no he ganado almas para Ti. Hay muchas más almas que debo ganar para Ti. Señor, por favor, salve más almas. Úsame, Señor, dame poder, dame más sabiduría. Señor, mi mente ha estado tan ocupada con las cosas que he visto en el mundo, preocupada por mis amistades del mundo. Y Señor, perdóname, lléname de Tu Santo Espíritu. Hermanos, después de ser salvo, esta es la segunda cosa más importante para mi vida y para mis mensajes de cada cristiano. Ser lleno del Espíritu comienza con ser lleno de la palabra del Señor. De memorizar la Biblia diariamente, de leer la Biblia diariamente, a lo mejor 5, 10, 20 capítulos de la Biblia. Si eso le parece mucho, entonces por lo menos cuatro versículos de la Biblia. Pero creo que debemos decir, Señor, yo confieso, no he estado muy ocupado de las cosas del Señor. Mi ocupación ha estado mucho más en mis preocupaciones mundanas. Señor, cámbiame, transformame, lléname de tu Santo Espíritu. La próxima vez hablaremos un poco más de Festivus V y cómo ser genio. Por eso. De pie, por favor.
La llenura del Espiritu en Hechos
Series Discipulado
Sermon ID | 719111819545 |
Duration | 48:16 |
Date | |
Category | Sunday - PM |
Bible Text | Acts 1:5-8; Acts 2:4 |
Language | Spanish |
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