Buenos días a todos hermanos, una vez más. Para los que no he saludado, siempre, a veces no tengo tiempo de saludar a todos, pero aquí arriba hay la oportunidad de volver a saludarnos. Abran sus Biblias en el Evangelio de Marcos en el capítulo número 13. Marcos capítulo número 13. Y en esta mañana vamos a estar estudiando la porción que abarca los versículos número 14 hasta el versículo número 23. Estamos en una porción de las escrituras que es conocida como el Sermón de los Olivos o del Monte de los Olivos, donde el Señor Jesucristo está hablando de el fin de los tiempos. Está hablando de la destrucción del templo en Jerusalén. Está hablando de las guerras, rumores de guerras y los conflictos donde padres se volverán contra los hijos, hijos contra los padres. Está hablando de los falsos maestros. Y hemos llegado a una porción donde va a hablar de la famosa abominación desoladora, que es donde el anticristo toma el lugar de Dios en el templo y de esta manera comete una abominación y el lugar queda desolado porque la gente comienza a oír. Esto ocurre durante el tiempo que es conocido como la gran tribulación, donde la iglesia no se encuentra ya en este momento, donde están ocurriendo esos eventos y donde se cumple la profecía de Zacarías que dice, se lamentarán por aquel que traspasaron como quien se lamenta por primogénito, donde el pueblo de Israel reconocerá que el Señor Jesucristo era quien verdaderamente dijo ser. Entonces, estamos en esa porción de las Escrituras y vamos a orar antes de comenzar a estudiar la porción de esta mañana. Padre, nos inclinamos una vez más delante de tu presencia para seguirte adorando y dando gracias. por permitirnos congregar en este primer día de la semana para adorarte como congregación, para celebrar el Día del Padre y todas estas cosas tan hermosas que hacemos aparte de venir y adorarte. Señor, queremos rogarte que nos hables a través de tu palabra en esta mañana que si bien habrá porciones de las escrituras que no tienen una aplicación para nosotros directamente, sabemos que toda la escritura es inspirada por Dios. Y mientras que vivimos en ese tiempo, antes de que tu palabra nos dice que vendrás y arrebatarás a tu iglesia, tú nos exhortas a mirar y a vivir de una manera vigilante, perseverando hasta el fin. para que de esta manera, Señor, aseguramos cada uno de nosotros nuestra salvación. Te doy gracias, Señor, por la porción de Tu Palabra que estudiamos en esta mañana. Te pedimos, Señor, que nos ayudes, que nos des entendimiento para poder no solo comprender, sino aplicar las verdades de Tu Palabra a nuestras vidas. Estas cosas te las rogamos en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén. Vamos a leer primeramente, hermanos, la porción de las Escrituras, Marcos 13, versículo 14 al versículo número 23. Dice así la palabra del Señor. Pero cuando veáis la abominación desoladora de que habló el profeta Daniel, Puesta donde no debe estar, el que le entienda, entonces los que estén en Judea huyan a los montes. El que esté en la azotea no descienda a la casa ni entre para tomar algo de su casa, y el que esté en el campo no vuelva atrás a tomar su capa. Mas hay de las que estén encintas, y de las que críen en aquellos días. Orad, pues, que vuestra huida no sea en invierno, porque aquellos días serán de tribulación, cual nunca ha habido desde el principio de la creación que Dios creó hasta este tiempo ni la habrá. Y si el Señor no hubiere acortado los días, nadie será salvo. Mas por causa de los escogidos que Él escogió, acortó aquellos días. Entonces, si alguno os dijere, mirad, aquí está el Cristo, o mirad, allí está, no le creáis. porque se levantarán falsos cristos y falsos profetas y harán señales y prodigios para engañar, si fuese posible, a uno de los escogidos. Mas vosotros mirad, os lo he dicho todo antes". Hasta ahí nada más, hermanos. Nosotros continuamos en el estudio de este capítulo y ustedes recordarán la semana pasada estuvimos viendo el capítulo 13 versículo número 1 en donde los versículos 1 al 2 uno de los discípulos le hace una referencia al Señor Jesucristo del templo de lo magnífico que es el templo. ahí en Jerusalén. Y nosotros estuvimos estudiando algo acerca del templo, la construcción, para darnos una idea de su magnificencia, que era conocida en aquellos días como una de las maravillas del mundo. Y también recordarán ustedes que en el versículo número 3, el Señor Jesucristo se sienta, dice el versículo, ahí junto al monte de los Olivos, frente al templo. Y Pedro, y Jacobo, y Juan, y Andrés le preguntan aparte, y le hacen dos preguntas. La primera es ¿cuándo serán estas cosas y qué señal habrá cuando todas estas cosas hayan de cumplirse? Entonces aquí estamos viendo en esta porción de la Escritura que el Señor Jesucristo va a responder únicamente acerca de las señales que vendrán antes del fin y de la señal que vendrá antes del fin de la gran destrucción. Pero no responde la fecha, porque hay dos ocasiones en este pasaje donde el Señor Jesucristo enfatiza y dice, nadie sabe el día y la hora. Pero lo que sí sabemos es que estas cosas habrán de ocurrir. Y antes de comenzar a estudiar el versículo número 14, quisiera estar en acuerdo con lo que dicen muchos pastores y la mayoría de los comentaristas, que Marcos 13, 14 es el versículo más difícil de interpretar de todo el Evangelio de Marcos, de todo el Nuevo Testamento y quizás de toda la Biblia. Y la dificultad consiste en que hay aproximadamente 18 interpretaciones de lo que significa la abominación desoladora. Entonces, en esta mañana vamos a hacer nosotros un intento por comprender y yo quisiera que ninguno de ustedes me malentiendan esta mañana. Yo tengo Tengo una posición acerca de este versículo. La voy a enseñar con convicción. Quiero saber lo que significa. Mas al mismo tiempo, no voy a criticar a nadie que no piensa como yo en cuanto a este versículo. Porque sabemos que es un versículo muy difícil de interpretar. Pero quiero llegar a traer un entendimiento del mismo. Y de todas maneras les pido que seamos sabios en cómo escuchamos y cómo procesamos la información. En esos versículos el fundamento bíblico que vemos en este pasaje es que Jesús está prediciendo la destrucción del Templo de Jerusalén, las señales que van a preceder su segunda venida, Y incluso dice que son tiempos en que aún los elegidos podrán ser engañados. También habla acerca de la abominación desoladora y él exhorta a los creyentes diciéndoles en el versículo 14. Así que cuando veáis la abominación desoladora de la que habló el profeta Daniel, que está donde no debe estar el que le entienda, entonces los que estén en Judea huyan a los montes. El contexto bíblico de esta porción de la Escritura, específicamente el versículo 14, se encuentra En el Antiguo Testamento donde el profeta Daniel menciona en tres ocasiones la abominación desoladora y también en el libro de Apocalipsis, en el capítulo número 13, en los versículos número 4 y versículo número 8. Vamos a ir primero a Daniel y leer una porción que dice en Daniel 7, 25. Daniel 7, 25. y hablará palabras contra el Altísimo, y a los santos del Altísimo quebrantará, y pensará en cambiar los tiempos de la ley, y serán entregados en su mano hasta tiempo, y tiempos y medio de tiempo. Daniel está profetizando no solamente de algo que ocurre cerca de su tiempo, sino algo que ocurre en el año 70, en la destrucción de Jerusalén, y algo que ocurrirá cuando el anticristo venga y se establezca en el templo de Dios para profanarlo y convertirlo en una abominación y una desolación. Entonces, este es el contexto en el que nosotros vamos a estar hablando. Vamos a estar viendo donde en Apocalipsis 13, versículo 4 al 8 dice, Y adorarán al dragón que había dado autoridad a la bestia, y adoraron a la bestia diciendo, ¿Quién como la bestia y quién podrá luchar contra ella? También se le dio boca que hablase grandes cosas y blasfemias y se le dio autoridad para actuar 42 meses y abrió su boca en blasfemia contra Dios para blasfemar de su nombre, de su tabernáculo y de los que moran en el cielo. Y se le permitió hacer guerra contra los santos y vencerlos. También se le dio autoridad sobre la tribu, sobre tribu, sobre toda tribu, pueblo, lengua y nación, y la adoraron todos los moradores de la tierra, cuyos nombres no estaban escritos en el libro de la vida del Cordero, que fue inmolado desde antes del principio del mundo. En este último acto de blasfemia que es mencionado aquí y advertido por el Señor Jesucristo, en Marcos 13, 14, vean el versículo. Y quiero que lo leamos primero y tratemos de entenderlo por lo que el versículo número 14 dice. Primero, noten que comienza con una pequeña palabra que dice, pero, es en español. Y esto se le llama una conjunción. Conecta lo que ya se ha dicho con lo que se va a decir. Dice, primero está hablando el Señor de las señales, pero luego viene una señal, que es la señal. Dice, pero cuando veáis la abominación desoladora de que habló el profeta Daniel, puesta donde no debe estar, el que le entienda, entonces los que estén en Judea huyan a los montes. Noten en primer lugar que el Señor Jesucristo le está hablando a quienes conocen el libro de Daniel. Ellos ya saben que el profeta Daniel habló de la abominación desoladora. La palabra abominación y el calificativo desolador tiene que ver con algo que profana el templo, pero también tiene que ver con el resultado de la profanación que es un abandono y nadie va al templo a adorar. Y luego ahí nos dice que Daniel es quien habló. Luego nos dice que esta abominación está puesta donde no debe de estar. Es decir que aquello profano que es el anticristo que entra en el templo y se pone en el lugar santo, no debe de estar ahí. Entonces, ¿qué es lo que ellos deben de hacer? Los que estén en Judea huyan a los montes. Y ese es el contexto de todo lo que vamos a estar hablando. En primer lugar, uno necesita entender y elaborar un poco qué es la abominación desoladora. En primer lugar, esto es un símbolo de completa rebelión contra Dios y contra su pueblo. Es decir, es un acto que el anticristo cometerá que es una rebelión abierta contra Dios y contra el pueblo de Dios, una persecución contra su pueblo. En segundo lugar, representa la profanación definitiva del lugar santo donde mora la presencia de Dios. Es decir, hace tal profanación que ese lugar lo deja de una forma en la que ya no se deberían ofrecer sacrificios a Dios ahí. En tercer lugar, las acciones del anticristo no sólo profanan el templo, sino que también simbolizan su intento de usurpar Toda la autoridad de Dios y de enseñar a la gente para que lo adoren a Él en lugar del único Dios verdadero. Y esa es la intención del anticristo. En primer lugar, vamos a ver la señal del fin. La señal del fin. Y eso se encuentra en el versículo 14. La semana pasada estuvimos hablando del principio del fin, porque nos dice el versículo ahí que todo eso solamente será principio de dolores. Dice el versículo 14. Pero cuando veáis la abominación desoladora de que habló el profeta Daniel puesta donde no debe estar el que le entienda, entonces los que estén en Judea huyan a los montes. Ya hice mención en un momento, hermanos, que la palabra pero es una conjunción que indica eventos que están íntimamente relacionados. Es decir, en el año 70 vino la destrucción del Templo de Jerusalén. Desde el año 70 hasta nuestros días, han corrido ya un poco menos de 2.000 años, pero desde nuestros días hasta que venga la abominación desoladora, es una época la cual está conectada la destrucción, los días donde viene lo que mencionamos en el momento ahí, guerras, rumores de guerras, falsos maestros queriendo engañar a la gente, persecución contra los creyentes. Todo esto está directamente relacionado con la venida del anticristo. Por eso dice el versículo, pero, pero, Esto indica la continuidad de un acontecimiento relacionado. O sea, que en los ojos del Señor Jesucristo, Él está viendo todo como un evento. Cuando viene la destrucción del templo, es el principio. Pero es el principio de algo que tiene una culminación, que es donde el anticristo viene y usa o usurpa el lugar de Dios. Pero luego viene el Señor a hacer guerra para defender a su pueblo y vencer a las naciones. Luego viene su reinado terrenal. por mil años y después viene la culminación de los tiempos. Entonces, en segundo lugar dice el versículo, cuando veáis la abominación desoladora. Jesús le está diciendo a los discípulos aquí que la señal para que ellos huyan es la abominación desoladora. Esta abominación desoladora sugiere algo que es ofensivo para Dios. Mientras que la desolación implica el abandono del templo. O sea que el templo pierde la virtud para lo cual fue hecho para la adoración a Dios y la gente ya no va más. Pero esta abominación desoladora fue mencionada por el profeta Daniel, según leemos ahí. Dice que habló el profeta Daniel. O sea que los que están con el Señor Jesucristo conocen la lectura de Daniel Y ellos saben lo que Daniel dice y nosotros vamos a leer algunas referencias. Por ejemplo, vayan conmigo al capítulo número 9 de Daniel. Ya leímos el versículo, ya leímos un versículo en el capítulo número 9, pero vamos a leer otros capítulos. Por favor, libro de Daniel. Y ahí en esta porción de las escrituras, hermanos, nosotros vamos a estar viendo las tres menciones que Daniel hace acerca de la abominación desoladora. Y para que podamos entender qué es lo que Daniel tiene en mente. Daniel 9.27 nos dice de esta forma. Vean lo que dice ahí. Y por otra semana confirmará el pacto con muchos. A la mitad de la semana hará cesar el sacrificio y la ofrenda. Después, con la muchedumbre de las abominaciones, vendrá el desolador hasta que venga la consumación, y lo que está determinado se derrame sobre el desolador. Esa es la primera mención. La segunda está en el capítulo número 11, en el versículo número 31. 11.31. Dice, y se levantarán de su parte tropas que profanarán el santuario y la fortaleza y quitarán el continuo sacrificio y pondrán la abominación desoladora. Ahí mismo adelante, ahora en el capítulo número 12, en el versículo número 11, dice, y desde el tiempo que se ha quitado el continuo sacrificio hasta la abominación desoladora, habrá 1.290 días. Entonces vemos en tres ocasiones que se menciona lo que se llama la abominación desoladora. En otras palabras, lo que está diciendo aquí que viene el cumplimiento de la profecía. Pero leímos nosotros ya, hermanos, en Daniel 11.31 y aquí viene donde hay una, vamos a decir, una contrariedad entre comentaristas. Porque hay dos eventos históricos que ya ocurrieron. Y el primero fue en el año 67 antes del Señor Jesucristo. donde Antico IV Epifanes, quien era un gobernante sirio, en este año 67 profanó el altar de los holocaustos del templo judío, sacrificando un cerdo y vertiendo sangre de cerdo sobre el altar. Y él dejó claro que el cumplimiento, según Ezequiel, el cumplimiento de Daniel, el cumplimiento de esta profecía es Daniel 11.31. O sea que ya hay un evento que ocurrió. donde el templo es profanado, donde se ofrece un sacrificio por parte de Antiquio Epifanes en este año. Después viene otro evento que es el evento del año 70, donde los romanos vienen a la ciudad de Jerusalén, la rodean Entran en el templo con sus banderas militares y las colocan como objeto de culto. Es donde destruyen básicamente el templo, se roban el oro y hacen todo esto. Entonces, para algunos creyentes, esta profecía de la abominación desoladora es cumplida en el año 70. Dicen, ya ocurrió lo del año 70, ya el Señor vino en ese momento, ya no hay arrebatamiento de la iglesia, no hay reinado terrenal de Cristo. Cristo está reinando espiritualmente en los corazones de las personas. Pero hay un problema para creer todo eso. Razones. Porque el mismo pasaje, en lo que vamos a estar estudiando, nos hablará de cosas que uno claramente se puede dar cuenta que no han ocurrido. Como, por ejemplo, nos dice que esta tribulación, en el versículo número 9, 19, Marcos 13, 19, dice, porque aquellos días serán de tribulación, y escuche esto, cual nunca ha habido desde el principio de la creación que Dios creó. Dice, hasta este tiempo ni la habrá. O sea que, hasta el tiempo que venga la abominación desoladora, nunca ha habido una tribulación como esta. La tribulación que viene especialmente al pueblo de Israel Nadie jamás ha sufrido de la manera como estos han sufrido. Sin embargo, parece que hay algo más en la declaración del Señor Jesucristo, porque Él quizás tiene en mente que estas profecías se cumplan en los últimos tiempos por el anticristo. Por ejemplo, vayan conmigo a Mateo capítulo 24, versículos 29 al 30. Mateo 24, 29 al 30. En estos dos versículos dice, inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, la luna no dará su resplandor y las estrellas caerán en el cielo y las potencias de los cielos serán conmovidas. Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo con poder y gran gloria. Esto es algo que aún no ha ocurrido. Es algo que no ha ocurrido, pero que habrá de ocurrir. Y en 2 Tesalonicenses, capítulo 2, versículo 3 hasta el versículo número 10, Pablo toca este tema con mucho detalle. Dice el versículo, Nadie os engañe en ninguna manera, porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, es decir, el anticristo, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición, el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto, tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios. Es lo que dice aquí en el versículo número Marcos 13, 14. Dice, puesta donde no debe de estar. De hecho, la gramática en este versículo en griego nos habla de alguien, no de algo. Y aquí en el versículo número 5, donde dice, versículo 4, tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios haciéndose pasar por Dios. Dice, versículo 5, no os acordáis que cuando yo estaba todavía con vosotros os decía esto y ahora vosotros sabéis lo que lo detiene. a fin de que a su debido tiempo se manifieste. Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad, sólo que hay quien al presente lo detiene hasta que él a su vez se ha quitado de en medio. Vean este versículo sumamente importante porque dice que hay algo o alguien que al presente lo detiene, y es el Espíritu de Dios. Cuando la iglesia sea arrebatada y el Espíritu de Dios levante a su iglesia, entonces vendrá el anticristo con todo su furor, y después él mismo será quitado de medio. Versículo 8. Entonces se manifestará aquel inico a quien el Señor matará con el espíritu de su boca y destruirá con el resplandor de su venida. Los eventos son correctos de acuerdo como él los predice acá. Iniquo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales prodigios mentirosos. Aquí lo dice el pasaje que acabamos de leer. Y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. Por esto Dios les envía un poder engañoso para que crean la mentira, a fin de que sean condenados todos los que no creyeron a la verdad. sino que se complacieron en la injusticia. Estos dos pasajes nos muestran que la destrucción del Templo de Jerusalén del año 70 no es la señal de la abominación desoladora, sino que es algo que viene después de la destrucción del templo. Entonces, quizás la mejor solución para entender esta frase en el versículo número 14 de la abominación desoladora tiene Algo que se llama un cumplimiento múltiple y lo quiero explicar de esta manera. Cuando Daniel dice que vendrá la abominación desoladora, está hablando no solamente del primer rey asirio que vino en el tiempo de Antico Epifanes. Está hablando de los soldados romanos cuando llegan al templo en el año 70. y también está hablando del anticristo en el tiempo final. Y estas profecías no tienen relación, vamos a decirlo de esta manera, no tienen una relación cronológica, pero sí tienen una relación teológica. O sea, cuando habla de la abominación desoladora, lo que los identifica teológicamente a las tres etapas o los tres eventos es que el intento es profanar el templo. El primer rey que viene, el primer asirio que viene, este gobernante Antíoco Epifanes quiere profanar el templo. Los soldados romanos vienen al templo para profanarlo y el anticristo como un intento final viene a querer destruir el templo. Entonces, no nos engañemos o no seamos engañados de que todo esto es algo que ya se cumplió porque no se ha cumplido y la escritura nos lo va a mostrar ahorita. En su comentario a este versículo, MacArthur dice, sin embargo, la profanación del templo por parte de Antico fue sólo un presagio de la futura perversión del anticristo. Daniel 9.27 y Daniel 12.11 describen ese acontecimiento de los últimos tiempos, ubicando en el punto medio de la séptima semana de Daniel cuando el anticristo establezca su trono en un templo reconstruido en Jerusalén y declare ser Dios. O sea que cuando leemos El 13-14, en Marcos 13-14, la abominación desoladora se refiere en un sentido a esos tres grandes eventos, pero se refiere a uno que está por venir, donde el anticristo toma, se siente en el lugar que no debe sentarse, toma el lugar que no le pertenece, intenta usurpar la autoridad que no le pertenece y el lugar se convierte en un lugar desolado porque todo mundo quiere huir. Ahora versículos, la última parte del versículo 14 hasta el versículo número 18, vemos el espanto de las personas, como ellos huyen de aquel lugar. Dice, entonces los que estén en Judea huyan a los montes. Ahora hermanos, yo quiero clarificar algo y tenemos que tener cuidado cada vez que leemos la Biblia, tenemos la tendencia como de aplicar inmediatamente eso para nosotros. O es que esto, tenemos que tener cuidado, cuando veamos eso tenemos que huir. Vean lo que dice claramente. Los que estén en Judea huyan a los montes. Judea es el lugar más cercano al templo de Jerusalén. Cuando esto ocurra, Está hablando del lugar geográfico de personas que vivan en ese tiempo y en ese tiempo nosotros no vamos a estar aquí. La iglesia ya es arrebatada. La iglesia está en las bodas del Cordero. La iglesia está en el cielo. Pero están los judíos que negaron a Cristo y ellos habrán de creer en Cristo. ¿Cómo creerán en Cristo? Vean el versículo número 23. Marcos 13, 23 dice, mas vosotros mirad, os lo he dicho todo antes. Aquellos que vean esta señal de la abominación desoladora y lean lo que se dijo en Marcos capítulo 13 En Mateo capítulo 24 y del Evangelio de Lucas con referencia a este punto leerán y creerán que la profecía de Cristo se está cumpliendo y creerán porque la profecía se cumplió y dirán verdaderamente ese es el Cristo. Esto no es para nosotros. Esto es algo que nosotros no vamos a tener que enfrentar. Esto es algo que enfrentarán los judíos en aquel tiempo y no solamente los judíos serán engañados sino la humanidad entera básicamente es engañada. Y Jesús dice aquí que los que están en Judea huyan. Pero luego dicen en el versículo número 15 que los que estén en la azotea de su casa no desciendan de la casa ni entren para tomarlo a su casa. O sea que su huida debe de ser lo más pronto posible. Es interesante cómo se muestra la arquitectura en el versículo número 15. Dice los que estén en la azotea. En Jerusalén En aquellos tiempos, y aún en el tiempo de hoy, por lo caliente del lugar, se siguen construyendo casas con grandes terrazas. Porque la gente, por las tardes, cuando el calor se comienza a ir, salen a la terraza a descansar y la casa siempre está debajo. Pero aquí dice, no bajen a la casa. No tome nada de la casa. Váyanse inmediatamente de su casa. Y luego menciona a aquel que está trabajando en el campo. Dice, no vuelva atrás para tomar su capa. Y luego menciona a las mujeres embarazadas y a las mujeres que estén criando bebés. Dice, esto va a ser terrible para ellas. Versículo 18. Orad pues que vuestra huida no sea en invierno. Ahora, hermanos, quizás por la mente de algunos de ustedes esté pasando algo y estén pensando, oye, ¿por qué les hablo en primera persona? ¿Por qué le está diciendo a ellos que ellos hagan esto? Como si estos eventos fueran a ocurrir en los días de ellos. Y la respuesta es que la Escritura muchas veces habla así, para que todos los que la lean Respondamos con urgencia a ella. Les doy un ejemplo. Cuando Pablo habla de la resurrección, de la venida de Cristo, dice, no todos moriremos, sino que algunos seremos transformados. En un momento, en un abrir y cerrar de ojos. Pablo está diciendo que en la venida de Cristo, él va a ser transformado. Él está esperando la venida de Cristo, pero la venida de Cristo no ha llegado. Pablo murió. Pero está hablando de una forma para que cuando usted y yo leamos, lo tomemos eso personal. Digamos, tenemos que prepararnos. Ahora, para aquellos que les toca experimentar esto, ellos tienen que orar. Tienen que orar para que su huida no sea en invierno, según el versículo número 18. Y el versículo número 19 y versículo número 20, hablan de la misericordia de Dios. Vean ahí esos versículos, hermanos. Pero antes de verlos, quisiera hablar de algo que se repite. En el versículo número 14 al final dice, huyan a los montes. En el versículo número 15, Dice que no se detenga en su casa. Es el mismo concepto de huir. En el versículo número 16, el mismo concepto. Dice no vuelva atrás. O sea, huya. En el versículo 17, en el versículo número 18, especialmente el 18 dice, orad pues que vuestra huida. Esta palabra, huir, tiene que ver con una palabra que se relaciona directamente con un fugitivo. O sea, que todas esas personas vendrán a ser legalmente como fugitivos de la ley. Porque será en contra de la ley de ese tiempo de que ellos huyen y no quieran obedecer al anticristo. Entonces, esto es importante porque esta palabra está ligada íntimamente con esta palabra que tiene que ver con el fugitivo. Y para los residentes de Jerusalén, Será abandonar su ciudad y lo más seguro que es para que se esconden en los montes, porque dice ahí el versículo. Ahora, vean hermanos algo bien tremendo que está acá en el versículo número 19. Dice, porque aquellos días serán de tribulación cual nunca ha habido desde el principio de la creación que Dios creó hasta este tiempo ni la habrá. Ya ocurrió la tribulación después del tiempo de Daniel, la tribulación en el año 70, la destrucción que habrá de venir es aún superior que ésta. Por ejemplo, en el año 70 no se cumplieron importantes detalles de esta predicación de Cristo en el Monte de los Olivos y otras profeticías en el Antiguo Testamento. Por ejemplo, Zacarías 12, 8 o 9 dice que la destrucción de las naciones, que habrá destrucción de las naciones que atacan a Jerusalén. O sea que ahí es donde viene lo que se llama como la batalla de Armagedón. donde las naciones vienen contra el mundo y Jesucristo defiende a Israel. También hay otro evento que es el evento visible de Cristo, que está en Zacarías 14, del 1 al 11, en Marcos 13, 24, que es el versículo aquí que nosotros vamos a leer la semana que viene, donde dice, Pero en aquellos días, después de aquella tribulación, el sol se oscurecerá y la luna no dará su resplandor. Y viene diciendo, y dice el evento que está por ocurrir. En Hechos capítulo número 9, capítulo 1 perdón, en el versículo 9 al versículo 11 dice, Y habiendo dicho estas cosas, viéndolo ellos falsado, y escuchen esto, y le recibió una nube que los ocultó de sus ojos. Y estando ellos con los ojos puestos en el cielo, entretanto que él se iba, he aquí se pusieron junto a ellos los varones con vestiduras blancas. Versículo 11. los cuales también les dijeron, varones galileos, ¿por qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, o sea, el que ellos han visto, así vendrá como le habéis visto ir al cielo. O sea, que Él volverá y se le verá físicamente. Entonces, esto todavía no ocurre, hermanos. No ocurrió en el año 70. El juicio de las naciones de parte del Señor, como dice en Mateo 25, el establecimiento del reino terrenal en Jerusalén por mil años, como lo dice Apocalipsis 24 al 6. Entonces, la destrucción de Jerusalén del año 70 no concuerda para decir que es la abominación desoladora, sino todo lo que habrá de venir. Entonces, estas profecías no cumplidas indican que los horrores de los ataques al templo en las dos ocasiones anteriores no tiene nada que ver con esto que habrá de venir. ¿Por qué razón? Vean ahí en el versículo número 19 hay una palabra que tenemos que prestar atención porque aquellos días serán de, como dice ahí hermanos, tribulación. Esta palabra tribulación significa Un estado de estrés constante. Ahora piensa un poquito en esto. Un estado de estrés constante. Una presión constante que tiene que ver con opresión física, mental, social y económica. Y ustedes leen Apocalipsis, hablando de la gran tribulación, describe exactamente eso. Una presión que tiene que ver con lo físico porque es persecución, es mental porque está en la mente de las personas, es social porque es colectiva para todos y es económica porque nadie puede comprar y vender si no tiene el sello de la bestia. Esto es increíble. Esto no es increíble, es asombroso. Es asombroso. Hermanos, esta es una situación en donde no hay ninguna clase de paz, sino todo lo contrario. Por eso se le llama la gran tribulación. Y esa tribulación es tan, tan sin igual, porque dice el versículo ahí, cual nunca ha habido desde el principio de la creación. Hermanos, ni el diluvio es comparable a la gran tribulación. Dice, no ha habido desde el principio. Y dice ahí más enseguida, dice, ni lo habrá. No ha habido desde el principio, dice el versículo número 19, de la creación de Dios que Dios creó, hasta este tiempo, o sea, hasta el tiempo de Cristo. Es decir, que cuando el hombre asirio que atacó el templo en la primera vez por la profecía de Daniel, Jesús está diciendo, ustedes creen que eso es la abominación? Que eso es una destrucción, es una tribulación? No habrá nada. Comparado a eso, eso no es nada comparado a lo que viene. Versículo 20. Aquí viene la misericordia de Dios. Y si el Señor no hubiese acortado aquellos días, nadie será salvo. Ahora, piensa en un momento en esto. El propósito de la gran tribulación, Dios quiere que la gente sea salva. Y la pregunta es, ¿cómo se salvarán en la gran tribulación si no habrá quien predique el evangelio? No va a haber evangelistas, no va a haber cristianos, porque los cristianos vamos a estar en la presencia del Señor. Y la respuesta es lo que dice el versículo 23. Mas vosotros mirad, os lo he dicho todo antes. Ellos van a tener que leer la escritura y reconocer que lo que Cristo dijo, eso está ocurriendo. Y entonces creerán en el Señor Jesucristo. Esta frase se encuentra en el Evangelio de Juan muchas veces. Y Jesús dice, os lo he dicho antes para que creáis. Han visto esto, verdad hermanos? Supongo que si han leído. Entonces, el Señor está acortando los días, porque los días son tan intensos que en lugar de que sea la tribulación por mucho tiempo, Él la va a acortar. Y la palabra acortar significa reducir en número. Es decir, que el anticristo quisiera más tiempo, pero el Señor tiene el control de la gran tribulación. Eso es importante, hermanos. El anticristo cree que está controlando Pero quien reduce el tiempo de la tribulación es Dios. Eso nos muestra que Dios es soberano aún en la gran tribulación. Y eso es importante entenderlo. Entonces, los elegidos aquí son aquellos que Dios elige para salvación. Son elegidos porque Él los elice. El versículo 20 nos dice, por causa de los escogidos que Él escogió. Hablando de la elección. Acortó aquellos días. Versículo número 21. Entonces, si algunos dijeran, miren hermanos, a ver, ¿qué dice el versículo 14, el final? Dice, entonces los que estén en Judea, ¿huyen a dónde hermanos? A los montes. Están escondidos, ¿verdad? Y luego, ¿qué vienen y les dicen hermanos? Versículo 21. Si algunos dijeren, mirad, aquí está el Cristo. O mirad, allí está. ¿Qué dice? No le creáis porque lo que quieren hacer es traerlos para capturarlos, para volver a tomarlos y meterlos en esclavitud. Esto es importante que nosotros prestemos atención porque estos falsos cristos, estos falsos maestros tienen este propósito. Entonces, habrá en aquellos días Como dice, si usted tiene su bile de estudio MacArthur, el de una nota muy buena que dice, en aquellos días habrá una proliferación satánica de falsos cristos, satánica de falsos cristos, que tendrán el propósito de engañar a los escogidos, haciéndoles creer que Cristo ha regresado para que salgan de donde estén así y así perseguirlos. O sea, estos falsos cristos harán falsas señales, harán falsos engaños, pero va a ser tan real que aún los escogidos pueden ser engañados. Ese es el arte de Satanás. Satanás tiene ese arte para hacer las cosas. Pero serán, sin embargo, lo que se debe reconocer como un pseudo milagro. O sea, no son milagros verdaderos. Vean lo que dice aquí el versículo. Dice el versículo número 21, entonces alguno... No, versículo 22. Se levantarán falsos cristos. Falsos profetas y harán señales y prodigios, pero estos también son falsos, no son verdaderos. Son pseudo milagros inspirados satánicamente y son empleados para apoyar su afirmación de ser el verdadero Cristo. Pero la Escritura dice en 2 Tessalonicenses 2.9, Iniquo, cuyo advenimiento por obra es de Satanás, y con gran poder y señales, prodigios mentirosos. Ahora, hermanos, seguimos leyendo donde hay una advertencia para que crean del versículo número 23. Dice el Señor, mas vosotros mirad, os lo he dicho todo antes. O sea, antes de que ocurra, ya se los dije. ¿Cuál es el propósito? Para que cuando lean los que están siendo perseguidos, ellos puedan creer en el Mesías. Ellos puedan creer en el Señor Jesucristo. Ahora hermanos, si nosotros no vamos a estar ahí, podríamos decir, bueno, ¿a nosotros qué nos preocupa si nosotros no vamos a estar ahí? Pero recuerden que nosotros vamos a estar aquí en el tiempo del versículo número 3 hasta el versículo número 13 donde habrá guerras, rumores de guerras, falsos maestros que quedarán a engañar a los escogidos. Y la pregunta es, entonces, ¿cuáles son las implicaciones para nosotros? Primero, como creyentes, es necesario que entendamos la gravedad de la abominación desoladora y la urgencia de estar en guardia contra las falsas enseñanzas y los falsos Mesías. En segundo lugar, invertir nuestro tiempo en la gran comisión, es decir, predicar el evangelio a toda criatura. No detenernos en predicar el evangelio porque esa es nuestra responsabilidad. Esa es nuestro cargo impuesto por el Señor Jesucristo. También en los tiempos finales, según lo que observamos aquí, habrá muchos que afirmen tener la respuesta. y traten de engañar incluso a los elegidos con falsas profecías, milagros, promesas, según el versículo número 22. Por lo tanto, necesitamos de permanecer arraigados, hermanos, cimentados en la palabra de Dios. No movernos, hermanos. Yo pienso que los hermanos que no vienen a la escuela dominical, ahorita que estamos estudiando doctrina bíblica, son como las dos plantas que están a la entrada del templo acá. Mi esposa fue y compró dos plantas iguales, en el mismo lugar, de la misma clase, la misma altura. Las puso una a un lado, a la puerta del templo. Pero si ustedes ven, una está casi el doble de grande de la otra. ¿Sabe por qué? Le llega más luz. le llega más luz. Y de tiempo en tiempo hay que voltearla porque se inclina. Está más cercana a la luz. Los hermanos que no viven en la escuela dominical están más chaparritos espiritualmente hablando. Hay cosas que no las entienden, que no las comprenden. Por ejemplo, estuvimos hablando acerca de los profetas bíblicos, los falsos profetas, los apóstoles bíblicos, los falsos apóstoles. Y si usted no no escucha, no entiende la enseñanza de las escrituras. Es como si usted fuera una persona que tiene anemia por falta de nutrición. Ustedes han visto una persona anémica que no tiene las fuerzas que debería tener una persona normal, ¿verdad? Una persona que está bien nutrida, bien descansada o bien ejercitada. Nosotros vamos a visitar a nuestro nietito lo más que podemos y lo estamos viendo crecer y le tienen una disciplina de descanso y de alimentación y demasiado, ¿no? Pero está el niño demasiado fuerte. Está muy fuerte para su edad. ¿Por qué? Porque lo tienen en actividad constantemente en el parque afuera. Come muy bien, descansa muy bien. Gracias, ahorita está bien. Lo mismo con una persona que tiene una vida de ejercicio, buena alimentación, buen descanso. Ustedes ven los atletas. Los atletas solamente practican, duermen y se alimentan. Son sus tres tareas. Por eso están en óptima condición. De la misma manera, Los creyentes que participan en las reuniones a la mitad de semana, vienen a la escuela dominical, vienen al servicio y entre semana en sus casas leen la escritura, oran la palabra de Dios. Esos van a ser creyentes sólidos y fuertes. Van a estar listos para la hora que viene, la dificultad, la prueba, cuando viene el ataque del pecado, cuando viene el ataque de Satanás. Están listos. Y nosotros necesitamos prepararnos hermanos para esas cosas. Que no nos sanglotee, que no nos mueva nada. En Miami, perdón, en Florida. Florida es uno de los estados donde más falsos maestros han salido en los últimos tiempos. Hay muchos falsos maestros en Florida. Y salió uno allá por la época de los años 2000, a principios de 2000. Y recuerdo que Hacía cosas que eran escandalosas. Por ejemplo, una anciana tenía cáncer y la pateó en el estómago diciéndole que el cáncer iba a ser expulsado. A otros los escupía en la cara, a otros los golpeaban el estómago. Y hubo unos pastores de acá de California que fueron a ver el avivamiento que estaba ocurriendo en Florida. Yo no entiendo. ¿Cómo estás viendo que un individuo está actuando tan carnalmente? Un individuo que no tiene ningún trasfondo que sea conocido. Un individuo que tiene una apariencia pésima. Un individuo que no tiene teología bíblica. Pero bueno, como todas las cosas, el avivamiento se acabó, se divorció de la esposa, se casó con otra mujer, tomó dinero del ministerio, quedó totalmente desacreditado y por ahí anda otra vez resurgiendo. ¿Pero cuánto tiempo nos debe de tomar a nosotros como cristianos identificar a alguien para decir, es un falso maestro, no lo sigan, no le pongan atención, no lo escuchen? Lo único que logra una persona tener discernimiento es conocer la palabra de Dios. ¿Qué dice la Biblia? Es tener una forma de pensar bíblica. Es cuando escuchas algo, alguien te dice algo y no dices, yo creo que no, tú no creas nada, tú crees lo que dice la Biblia. ¿Qué dice la Biblia al respecto? Siempre debería de ser nuestra respuesta. ¿Qué dice la Biblia? Pero para eso hay que conocer la escritura. Hay que leer la escritura. Hay que entender las escrituras. Y el Señor Jesucristo está llamando a los creyentes aquí. Versículo 4, el capítulo 13. Mirad, dice el versículo. Ya estudiamos la semana pasada que seis veces está la palabra mirad, mirad, mirad, mirad. Y eso significa estén vigilantes. Y la única forma de que un cristiano está vigilante es cuando entiende y conoce la palabra de Dios. De otra manera, ¿cómo vas a vigilar? Si no sabes cuál es el peligro, ¿cómo vas a vigilar? ¿Qué esperas? Tienes que saber cuál es el peligro. Tienes que identificar las falsas enseñanzas. Tienes que identificar un falso maestro. Tienes que identificar un falso Cristo. Tienes que saber identificar todas las cosas. De otra manera, no puedes. Entonces, hermanos, esta es ya como una exhortación para que le echen ganas, se levanten un poquito más temprano, para que se arreglen los que no tienen ningún impedimento, los que estén físicamente bien. Vengan, hagan un esfuerzo. No lo hagan porque uno les pide. Mire, yo no le voy a hacer mala cara si vino o si no vino. El punto es que estoy hablándoles de un bienestar espiritual para ustedes. Yo no voy a sentir mejor porque esté lleno el lugar. Yo no voy a sentir mejor porque el lugar esté lleno. Si cinco están, yo enseño de la misma manera. Enseño la palabra de Dios y enseño con gozo. Pero mi trabajo como pastor es supervisar también, sobrever. Y si yo veo que están carentes en una área, mi trabajo es exhortarles, es decirles. Y los que aman a Cristo van a obedecer la palabra de Cristo. Y van a buscar servir al Señor. Entonces, continuando con estas exhortaciones en las aplicaciones, pensemos un poco cómo aplicamos esta porción de la escritura. Por ejemplo, la pregunta es ¿qué podemos hacer para prepararnos para la venida del anticristo? ¿estemos aquí o no estemos? Es lo mismo para todos. En primer lugar, uno debe estar atento a cualquier señal de engaño. Las señales de engaño vienen. Juan, en su primera epístola de Juan, dice, han venido muchos anticristos. Juan ya habla de anticristos que están viniendo, pero viene uno, es el anticristo. Pero mientras que llegan los anticristos, debemos estar atentos a estas señales. También debemos de continuar creciendo en nuestro conocimiento, en nuestro entendimiento de la palabra de Dios, para que no seamos fácilmente influenciados por cualquier falsa enseñanza. Le estaba comentando a mi esposa esta mañana que un pastor que acaba de renunciar al ministerio después de 48 años tiene una doctrina de la justificación que no es nueva para él. Él enseñó esto por muchos años y es una idea de que las personas pueden ser justificadas a parte de la fe en el Señor Jesucristo. O sea, si tú vives en África y el Evangelio nunca llega a ti, pero en alguna forma tú crees que hay un Dios, tú vas a ser justificado y estarás con Dios. Esa es una vieja historia. Tiene que ver con el universalismo, que al final todo el mundo va a ser salvo. Cuando la Escritura es tan clara donde dice que la justificación no es por las obras, La justificación es por la fe en el Señor Jesucristo. Y nadie se puede justificar aparte de la fe, porque la justificación no es por obras. Es un texto muy claro. Sin embargo, este predicador bautista, que nadie lo denuncia, estudió en el Seminario Teológico de Dallas, donde se enseña buena doctrina, y le preguntaron, oye, en una ocasión, en una entrevista, Pero tus compañeros del seminario de Dallas y tus profesores no piensan lo mismo que tú. Dijo, a mí que me importa lo que ellos piensen. Hermanos y 48 años en un ministerio con programa de televisión, programa de radio y tiene una enseñanza así y nadie lo denuncia. ¿Qué pasó? ¿Qué es lo que pasó? Ahora que salió del ministerio, le preguntaron a un pastor muy conocido. Le dijeron, oye, ¿sabías que X persona acaba de dejar el ministerio después de 48 años porque dice que pecó en el pasado? Él no da ninguna razón de descripción de su pecado. Él simplemente dice que pecó hace muchos años y que lo descalifica del ministerio y que por eso sale. Y le preguntan a un pastor conocido, ¿qué piensas de la descalificación de fulano de tal? Dice, ese quedó hace muchísimos años descalificado, es un hereje. Enseña una doctrina contra la justificación por la fe en Jesucristo solamente. Pero el punto es, ¿cuánto tiempo nos debe de tardar identificar a un falso maestro o decir alguien enseña una falsa doctrina y no hablar? ¿Por qué el pueblo de Dios tiene que ser así? No, hermanos. Entonces, lo más importante que nosotros debemos hacer es permanecer fieles, dedicados a Dios, incluso frente a la persecución, frente a la tentación. El Señor Jesucristo predijo esta abominación desoladora advirtiendo que esto sería cuando todo el fin de las cosas estuviera cercano. Y esto es un llamado aún a nosotros para que nos preparemos espiritualmente, para que nos aferremos a la palabra de Dios. Para que hagamos frente a cualquier tribulación presente en nuestras vidas, a cualquier ataque de Satanás, a cualquier ataque del pecado sobre nuestras vidas. Para que guardemos las palabras del Señor Jesucristo, guardarlas en nuestros corazones. Y cuando leemos en el versículo, aquí en este versículo, todas las ocasiones que hemos mirado, que nadie os engañe. Versículo número 9. Y mirad por vosotros mismos. Cuando veamos estas cosas, nosotros leamos y digamos, tenemos que mirar por nosotros, tenemos que tener cuidado, tenemos que estar constantemente vigilando. ¿Sabe cuál es el trabajo de un vigía, hermanos? Vigilar. No se duerme en la noche. Vigila. Vigila constantemente. Y ese es un trabajo que cada uno de ustedes y yo, hermanos, nadie lo puede hacer por nosotros. Tú y yo lo tenemos que hacer por nosotros mismos. Vigilarnos. ¿Cómo andamos nosotros? Vigilarnos, observarnos. Y esa es una necesidad, hermanos. Y si en algún momento sueno duro, créanme que no tengo ninguna intención. Yo prefiero su amistad muchas veces, pero me gana la responsabilidad de la palabra de Dios. Yo los amo y siempre quisiera verles la cara sonriente. Pero algunas veces no los veo tan sonrientes, se enojan conmigo. Pero luego se les pasa. Y luego vuelven a enojarse otra vez. Porque la predicación de la palabra de Dios es constante. Pero así es el trabajo, hermanos. Así es el trabajo. Y no solamente es exhortación por ustedes, es para mí de la misma manera igual que ustedes. Vamos a orar, hermanos. Padre, te damos gracias por tu Palabra y por las advertencias que encontramos acerca de los últimos tiempos. Señor, queremos pedirte que nos llenes de tu Santo Espíritu, que nos llenes de sabiduría y de entendimiento en tu Palabra para estar preparados para cuando los falsos maestros, los falsos cristos Que tratan de engañar a los creyentes. Vengan cerca de nuestra vida, nosotros podemos distinguirlos. Queremos rogarte que nos ayudes a estar arraigados en la verdad de tu palabra. Que nos des crecimiento en la fe para que no seamos engañados por las falsas enseñanzas. Te rogamos que nos des la fuerza para permanecer fieles a ti, sin importar los desafíos y las tribulaciones que podamos enfrentar. Todas estas cosas te las pedimos, Padre, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén.