00:00
00:00
00:01
Transcript
1/0
vamos a tener un momento de oración Padre alabamos tu nombre tu eres el Dios tres veces santo Padre Hijo Espíritu Santo te alabamos en esta mañana te damos gracias por tu obra aquí en la iglesia bíblica de la Trinidad te damos gracias por los hombres que tu has colocado por los miembros de esta iglesia Por sus ministerios te suplicamos que tú sigas obrando en sus corazones, que Cristo sea glorificado en ellos. Te suplicamos ahora que tú nos capacites nuevamente para Considerar tu Palabra, que tú capacites a tu pueblo y también a tu siervo, ¿quién es suficiente para estas cosas? Tú, tu Palabra nos dice, así hemos conocido en nuestra experiencia, tú eres nuestra suficiencia. Alabado sea tu nombre hoy para siempre. Te suplicamos que nos ayudes a conocer un poco más de cómo debemos nosotros ser miembros que te glorifiquen a ti en medio de la sociedad. Te suplicamos esto en el nombre de tu Hijo, el Señor Jesucristo. Amén. El tema que vamos a tratar esta mañana y esta noche, Dios mediante, es el cristiano y la sociedad, o podríamos decir Daniel y la sociedad. El libro de Daniel enseña tres principios importantes que el creyente debe aplicar para que pueda glorificar a Dios en la sociedad. Los dos primeros principios revelan la naturaleza de la relación entre el creyente y la sociedad. El tercer principio señala las tres cualidades necesarias para glorificar a Dios en esta relación. El primer principio llama al creyente a ser un miembro responsable de la sociedad. El segundo principio indica que el creyente debe guardarse de los elementos mundanos en la sociedad. Y el tercer principio señala las tres cualidades necesarias que el creyente necesita para que pueda glorificar a Dios en la sociedad. El tercer principio señala tres cualidades necesarias para que el creyente pueda glorificar a Dios en la sociedad. Y aquí es donde vamos a quedarnos, nos vamos a concentrar en este último principio esta mañana y en la noche. ¿Cuáles son estas cualidades que el creyente necesita para glorificar a Dios en la sociedad en la que vive? Si estudiamos la vida de Daniel, veremos que él glorificó a Dios y sirvió a su generación porque fue un hombre íntegro, diligente y un hombre de fe. No tenemos que hacer extensa investigación para comprobar que Daniel era un hombre íntegro. Este era el testimonio de aquellos que le conocían. Aún sus enemigos dieron testimonio de su integridad. Daniel capítulo 6 versículo 4 y 5. Un hombre íntegro, es recto, honrado, sano, puro, justo, imparcial, cumplidor, es un hombre sin doblez, hipocresía y falsedad, se adhiere a un código moral o un sistema de valores establecidos y aprobados por Dios. En el Salmo 15, versículos 1 y 2, vemos la importancia de la integridad. Dice, Señor, ¿quién habitará en tu tabernáculo? ¿Quién morará en tu santo monte? El que anda en integridad y obra justicia, que habla verdad en su corazón. El Salmo 78, versículo 72, asevera que David apacentó a Israel conforme a la integridad de su corazón. En Génesis capítulo 17, versículo 1, vemos que Dios le dijo a Abraham, yo soy el Todopoderoso, anda delante de mí y sé perfecto. El pastor noble Bater asevera que la palabra traducida aquí, perfecto, es la misma que a veces se traduce íntegro. Anda en mi presencia y sé íntegro. Dios le dice a Abraham, sé perfecto. Es decir, anda en mi presencia y sé un hombre íntegro. El pastor Bater añade algo bien importante sobre la importancia de la integridad. Esa frase, anda delante de mí o anda en mi presencia, encierra lo que es absolutamente indispensable para una vida íntegra en cualquier persona. Saber que siempre estamos delante del Dios Santísimo, glorioso, incomparable, y que nos ha visitado en y por Jesucristo para rescatarnos. Saber eso y conducirnos de acuerdo con esa realidad es el alma de la piedad bíblica, del verdadero temor a Dios. Por lo tanto, es el alma de la fe por lo tanto es el alma de la fe reformada no son los cinco puntos de el calvinismo el alma de la fe reformada sino esas verdades esas mismas verdades que nos llevan a vivir esta realidad no hay ni puede haber integridad en el que no anda conscientemente en la presencia de Dios como el rumbo básico y fundamental de su vida. Termino la cita. Tal integridad, o no, añado algo más, tal integridad viene por la gracia poderosa de Dios por medio de Cristo Jesús aplicada por su Espíritu Santo, el Pastor Noble Bater. y un amén a esa verdad o verdades. Un hombre íntegro recto se distingue por su sinceridad, su corazón sinceramente late por Dios, le gobierna una regla recta, actúa por un principio recto, una fe sincera que obra por amor, trabaja para un fin recto la gloria de Dios, no abandona los principios rectos ni sus convicciones bíblicas posee un celo santo por Dios no tolera el pecado en su vida como otro dijo toma la daga de la mortificación y hiere sin misericordia al pecado más codiciable Salmo 18 versículo 23 el salmista declaró también fui íntegro para con él y me guardé de la iniquidad. Si hemos de glorificar a Dios y ejercer una influencia positiva sobre otros en la sociedad en la que vivimos, es necesario que seamos hombres y mujeres íntegros. Esto implica que nuestro carácter, lo que somos, es más importante que lo que hacemos. Esto es así porque lo que somos determina lo que hacemos, determina los frutos que producimos, determina nuestra influencia. Jesús dijo, todo árbol bueno da frutos buenos, pero el árbol malo da frutos malos. Un árbol bueno no puede producir frutos malos, ni un árbol malo producir frutos buenos. Dios nos manda a ser íntegros. Dios nos manda a ser íntegros. Nos manda a ser personas rectas, sanas, leales, justas, honradas e imparciales. Este carácter piadoso le honra y manifiesta la presencia de su poder salvador. Este carácter ejerce una influencia positiva y poderosa que promueve y procura el bienestar de la sociedad. Un carácter íntegro no pasará desapercibidamente en una sociedad impía. Como otro dijo, mientras más impía es la sociedad, más luminosa brilla la luz del carácter cristiano. En la oscuridad moral de Babilonia, Daniel fue uno de aquellos que brilló como el resplandor del firmamento. El rey Nabucodonosor reconoció el carácter piadoso de Daniel. Al dirigirse a Daniel dijo, ya sé, ya que sé que en ti está el Espíritu del Dios Santo. Daniel 4, versículo 9. Muchos años después la reina madre dijo a su hijo Belsasar, rey de Babilonia, Hay un hombre en tu reino en quien está el Espíritu del Dios Santo Daniel capítulo 5 versículo 11 Nabucodonosor como la reina madre sabían que el Espíritu del Dios Santo estaba en Daniel no sólo por la sabiduría, inteligencia y competencia de Daniel sino también porque este hombre vivía una vida santa vida que se percibía por la integridad de Daniel otro rey reconoció la integridad de Daniel Daniel capítulo 6 versículos 1 al 4 voy a leer Daniel 6 1 al 4 y leo de la versión de la Biblia de las Américas Le pareció bien a Darío constituir sobre el reino 120 sátrapas que gobernaran en todo el reino, y sobre ellos tres funcionarios, uno de los cuales era Daniel. a quienes estos sátrapas rindieran cuenta para que el rey no fuera perjudicado. Pero este mismo Daniel sobresalía entre los funcionarios y sátrapas porque había en él un espíritu extraordinario, de modo que el rey pensó ponerlo sobre todo el reino. Entonces los funcionarios y sátrapas, gobernantes, buscaron un motivo para acusar a Daniel con respecto a los asuntos del reino, pero no pudieron encontrar ningún motivo de acusación ni evidencia. alguna de corrupción, por cuanto él era fiel, y ninguna negligencia ni corrupción podía hallarse en él. Ahora, ¿cómo siguió siendo Daniel un oficial prominente en el gobierno de aquel reino que dio fin al imperio babilónico? La respuesta es simple. El nuevo gobierno necesitaba personas íntegras debido al ambiente corrupto de aquella sociedad. En Daniel, capítulo 6, versículos 4 al 9, podemos ver cómo la corrupción había afectado a los gobernantes. Estos hombres querían extender y asegurar su poder a expensas de Daniel. Y su preocupación principal no era el bienestar del pueblo, sino promover sus propios intereses personales. La mentalidad de aquellos hombres de hacerse rico lo más pronto posible les llevó a ser hombres sin escrúpulos. Esta mentalidad no cambia simplemente porque haya un cambio de gobierno. El nuevo rey no estaba seguro de que los nuevos gobernantes no se aprovecharían de su posición para obtener ganancias deshonestas. ¿Cómo podría Darío asegurarse de que los nuevos sátrapas o gobernantes no se aprovecharían de su posición para que él y su reino no fueran perjudicados. Que ellos fueran administradores competentes no era suficiente garantía para que el reino fuera perjudicado. Los funcionarios tenían que ser hombres íntegros y dignos de confianza. Daniel fue escogido para servir al rey como funcionario, no sólo por su capacidad administrativa, sino también por su integridad. Daniel capítulo 6 versículo 3 dice, pero este mismo Daniel sobresalía entre los funcionarios y sátrapas porque había en él un espíritu extraordinario de modo que el rey pensó ponerlo sobre todo el reino. Un espíritu extraordinario significa un espíritu de conocimiento en los asuntos civiles, prudencia extraordinaria en la administración de estos asuntos e integridad en toda su conducta. Aún los enemigos de Daniel tuvieron que reconocer la fidelidad, honradez, rectitud y lealtad de Daniel. He aquí un hombre en quien se podía depender, un hombre íntegro, no un ladrón. En el versículo 4 Entonces los funcionarios y sátrapas buscaron motivo para acusar a Daniel con respecto a los asuntos del reino. Vamos a sacar a este hombre de ahí. Si nosotros vamos a poder llegar allí, a esa plataforma que nos va a permitir sacar dinero sin que Daniel se dé cuenta y poder ejercer nuestra influencia, tenemos que sacar a ese hombre de ahí. no pudieron encontrar ningún motivo de acusación, ni evidencia alguna de corrupción, por cuanto Daniel era fiel y ninguna negligencia ni corrupción podía hallarse en él. Era un hombre íntegro. Sobre este asunto, Stuart Elliott declaró, la espiritualidad del hombre garantizaba que él no podía ser ni sobornado ni comprado. Se dice hoy que todo hombre tiene su precio. Pero no era así con Daniel. El temor de Dios gobernaba su corazón y se podía depender de él para que fuese indudablemente leal al rey. Su veracidad era incuestionable. Hubo una excelencia moral en el hombre, un espíritu de integridad inmaculado. oficiales torcidos tendrían que enfrentar el hecho de que había una barrera insuperable entre ellos y el abuso del dinero público y esa barrera era TANIEL. Debemos codiciar la integridad. Debemos esforzarnos por ser íntegros. en toda nuestra conducta, en todos nuestros asuntos, en todos nuestros negocios. Así perdamos el trabajo, lo que perdemos. Debemos ser un hombre, debemos ser hombres íntegros. Dios nos llama a ser íntegros. Vemos esta integridad en el apóstol Pablo cuando él dice en la segunda epístola a los Corintios capítulo 8 versículo 21 pues no procuramos por pues pues pues nos preocupamos por lo que es honrado no sólo ante los ojos del Señor sino también ante los ojos de los hombres. Eres tú un hombre íntegro. ¿Cómo te ven en el trabajo? Se puede confiar en ti, se puede depender en ti. Darío podía confiar y depender en Daniel. Tristemente, el Evangelio ha sufrido mucho por aquellos que profesan ser cristianos, pero que no tienen un testimonio de ser personas íntegras. no cumplen sus compromisos. Se comprometen a hacer algún trabajo cuando no tienen la intención de hacerlo. Otros hacen compromisos pero no los cumplen. Tampoco explican la razón por lo que no cumplieron su compromiso o sus compromisos. No se disculpan. La Biblia declara sea vuestro sí, sí, vuestro no, no. El Salmo 15 pregunta ¿Quién habitará en su tabernáculo? ¿Quién morará en el santo monte del Señor? Toma esto en serio porque es Dios quien lo dice, el Espíritu Santo quien lo escribió. que anda con integridad y obra justicia, que habla verdad en su corazón, el que aún jurando en prejuicio propio no cambia. Hiciste una promesa, te comprometiste a hacer algo, teme a Dios y cumple. Si te das cuenta de que no podrás cumplir tu compromiso porque realmente está fuera de tus manos, o por algún impedimento providencial, ve y habla con aquel que hiciste ese compromiso para explicarle lo que sucedió, hacer otro arreglo, disculparte o librarte de una manera honorable de tu compromiso. Proverbios 6, versículos 2 y 15. Si te has enredado con las palabras de tu boca, haz esto ahora, hijo mío, y líbrate. ya que has caído en la mano de tu prójimo, ve, humíllate, importuna tu prójimo, no des sueño a tus ojos, líbrate como la gacera de la mano del cazador en la casa del Señor que hoy es... En la casa del Señor, que hoy es la iglesia, Primera Timoteo 3.15, cumple con tus compromisos y responsabilidades. Como miembro de esta iglesia y siervo de Cristo, recuerda que tú te comprometiste a apoyar de corazón y según las Escrituras, el ministerio, gobierno, orden y disciplina de esta iglesia local. Esta es una de las razones por las cuales eres miembro en esta iglesia. Y ya que eres miembro, entonces el Señor espera y te manda a cumplir tus compromisos y obligaciones con esta iglesia local. Él dice en Eclesiastes capítulo 5, versículo 1, 2, 4. Guarda tus pasos cuando vas a la casa de Dios. No se apresure tu corazón a proferir palabra delante de Dios. Cuando haces un voto a Dios, no tardes en cumplirlo. ¿Por qué? Porque Él no se deleita en los necios. El voto que haces, cúmplelo. ¿Quién dice eso? ¿Cómo puedes ser una buena influencia en la sociedad impía, secular y humanista en que vives? Cumple tus compromisos. ¡Cumple tus compromisos y comienza en la Iglesia! ¡Cumple tus compromisos con el Señor y la Iglesia! El Día del Señor prepara tu corazón para ir a adorarle en la Iglesia. No sigas el ejemplo de la mayoría de los ciudadanos de nuestro país o del país, ni el de muchos evangélicos que toman este día para hacer lo que les parece, para hablar de sus asuntos, para hablar de sus negocios, y no para centrarse en Dios y en la adoración que se le debe. Vivimos en una sociedad que desprecia al Señor. no honran su día. Tú no sigas sus pasos ni ejemplo. En el día del Señor habla tu alma. Dile, este es el día santo, día que el Señor consagró y apartó para que sus criaturas y su pueblo le adore. Por tanto, yo con grosso y gran anticipación me entregaré a buscar al Señor. a adorar al Señor, a cumplir mis deberes asignados por él en su casa, la iglesia. Quiero ser un testimonio vivo delante de mis hijos, de mis familiares, de mis amigos y de la comunidad en que vivo y de la sociedad y así de aquellos que me conocen de que Hay un Dios, Creador y Sustentador de todas las cosas, a quien yo, de corazón, por compromiso y por su obra que la ha hecho en mí, de salvación, ese Dios adoro y sirvo. Cumple con tus compromisos. El día del Señor es del Señor, no es el día tuyo, chico, se acabó, te da. Te dice, es el día del Señor. Día del Señor. Día para estar en la iglesia con los hermanos, gozándonos con ellos, en comunión con ellos, alabando y adorando al Señor. cumple con tus compromisos y deberes en la iglesia. Y cuando los miembros cumplen de corazón para agradar a Cristo, según su palabra, y cumplen con sus compromisos en la iglesia, por lo menos vamos a tomar uno. La Biblia dice hacer caos a Dios. ¿Y qué pasa cuando el pueblo de Dios se acerca a Dios con aquellos sacrificios espirituales que el Señor le manda a venir y que Él dice que tienen que traer y lo dice en su palabra? Dice hacer caos a mí y yo me acercaré a vosotros. ¿Y qué pasa cuando el Señor se acerca a su pueblo? Él viene a traer perdón, Él viene a traer conocimiento, Él viene a impartir vida, Él viene a llenarnos de aquella verdad que nos va a sostener y de su temor de tal manera que cuando está la oportunidad para tomar algo que no te corresponde, el temor de Dios está en tu corazón. Y Dios te lo permite. No importa la circunstancia, no importa tu pobreza, no importa tu necesidad, Dios está aquí. Y Él prohíbe tal cosa. Acercaos a Dios y Dios dice Él se acercará a vosotros. Y en tu casa como vas a tratar a tu mujer, como Dios dice en su palabra. Cuando pecas contra ella, ¿qué es lo que debes hacer? Reconoce lo que hiciste. Pide verdad. Arregla tus asuntos. No estás peleando con tu mujer. Viviendo en pelea con tu mujer. ¿Qué ejemplo es ese para tus hijos? ¿Qué ejemplo es ese para tus vecinos? ¿Qué ejemplo es ese para la sociedad en que tú vives y después dices que conoces a Dios? Acércate al Señor y el Señor dice, Él se acercará con bendición, con principio, con enseñanza, con todo aquello que tú y yo necesitamos para poder ser fieles y hombres y mujeres eternos. Este comportamiento dará testimonio al cumplir con tus deberes, con tu iglesia, en tu hogar, en tu trabajo. Este comportamiento dará testimonio de tu integridad, que tú andas consciente de la presencia del Señor. En segundo lugar, en lo que respecta a tu trabajo, cumple con tu jefe. No pierdas el tiempo. Cumple con el horario establecido y tus obligaciones laborales. ¡Cumple y haz lo mejor! No, bueno, ya hice el trabajo, ve. Ay, pastor. Hace calor y usted no sabe, pastor, que difícil la cosa se pone aquí. Ay, bueno, ya yo lo hice. Sí, pero no es cuestión de hacerlo. Es que cuando lo mires después de terminar, oye, Eso lo hice para el Señor. ¡Qué bien, Señor, gracias! Cumple con tu Jefe, no pierdas el tiempo. No uses programas, ordenadores, computadoras sin autorización en tu trabajo. Y allí no tomes lo que no te pertenece. No hagas copias para tu uso personal sin autorización. Ni uses el equipo de tu empresa sin autorización. No pierdas el tiempo, no seas perezoso. Cuida el equipo de tu empresa. Sé fiel en las cosas pequeñas. En lo que respecta al gobierno, baja tus impuestos. ¡Ay! Pastor, todo estaba bien hasta que usted llegó ahí. Ustedes pagan impuestos, pero si yo les llego a revelar los impuestos que yo... ¡Ay, ay, ay, ay! ¿Quién dice paga tus impuestos? ¿El presidente de la república? No, Dios. Su palabra paga tus impuestos. Romanos 13, versículos 6 al 8. No estés dando vuelta por aquí y por allá, que esto y lo otro, con cosas sospechosas. No, si un hombre íntegro. El apóstol Pedro dice a los creyentes, mantener entre los gentiles una conducta irreprochable a fin de que en aquello que os calumnean como malhechores, ellos por razón de vuestras buenas obras, al considerarlas, glorifiquen a Dios en el día de su visitación. Daniel fue un hombre íntegro. Daniel también fue un hombre diligente, un hombre diligente. Glorificó a Dios en la sociedad en la que vivió porque fue un hombre diligente. Se preparó bien para servir al Señor en Babilonia. Fue diligente en sus estudios. Cuando los jóvenes vinieron y dijeron, vamos a pasar un buen tiempo ahí, vamos a la playa. Y los otros, pastores, allí en Babilonia no había playa, déjese de eso. Sí, pero lo más seguro es que habían otras cosas. Invitaciones a perder el tiempo. Y no es que uno no pueda ir a la playa, hermanos, por favor. Tengo que dar ese equilibrio porque después se van a llevar una idea incorrecta. Pero cuando sus amigos o algunas personas... Ve, tú siempre estás estudiando ahí y profundizando y esto y lo otro. Vámonos, vámonos de fiesta. No, Daniel se fue de fiesta cuando era el tiempo de irse de fiesta, pero cuando había que estudiar, Daniel estudió y estudió. ¿Para qué? No simplemente para decir que cumplió y pasó esa asignatura. No, él entendía, él comprendía, él sabía realmente lo que eso decía y para qué era. Podía aplicarlo. Lo conocía bien. No perdió el tiempo. Era un hombre diligente. Se preparó bien, aprovechó para servir al Señor en Babilonia. Dios abrió las puertas y no perdió el tiempo. Fue diligente en sus estudios, fue un hombre concienzudo, hizo su trabajo con mucha atención, celo, esmero, detenimiento, diligencia. Cuidado, no fue un estudiante ni un trabajador mediocre. Alguien dijo, y no creo que era cristián, La mediocridad es uno de los problemas humanos que carcome cada día nuestra sociedad. Esta es parte de nuestra vida diaria y tal parece que nos hemos acostumbrado tanto a ella que la vemos como parte esencial de nuestras acciones diarias. Mediocridad es todo aquello que responde a un esfuerzo menor del que la persona está capacitada para ejercer. Ser lo menos bueno pudiendo ser mejor, resultado frecuente de la indiferencia pereza. Voluntad débil, ausencia de una sana ambición de crecimiento, objetivos y metas limitadas, cuando habría potencial para las más altas. Es cumplir con lo escuetamente obligatorio, olvidando dar un paso más allá. Es la rutinaria satisfacción con lo limitado. El desánimo en el camino de la excelencia. Mediocre es quien pudo ir más lejos, pero se contentó. Mediocre es quien pudo ir más lejos, pero se contentó con permanecer en el límite fácil de lo obligatorio. Vivimos en una sociedad en crisis, donde el dinero fácil ha reemplazado la idea del trabajo creador. Con cuánta desgraciada frecuencia sustituimos la exigencia por la excusa, la esencia por la circunstancia, los resultados por la charlatanería y la verdad por la mentira. Daniel escogió lo mejor, no lo mediocre. Señor nos dice en Filipenses capítulo 1 que nosotros debemos escoger lo mejor. Fíjense lo que dice Filipenses capítulo 1 versículo 9 y esto pido en oración que vuestro amor abunde aún más y más en conocimiento verdadero y en todo discernimiento a fin de que escojáis lo mejor para que seáis puros e irreprensibles para el día de Cristo. varios versículos bíblicos hablan de la diligencia y la competencia y la aptitud de Daniel Daniel capítulo 1 versículo 20 dice y en todo asunto de sabiduría y conocimiento que el rey les consultó los encontró diez veces superiores a todos los magos y encantadores que había en su reino Daniel 4 versículo 28 Entonces el rey engrandeció a Daniel, le dio muchos y espléndidos regalos y le hizo gobernador sobre toda la provincia de Babilonia y jefe supremo sobre todos los sabios de Babilonia. Daniel fue un hombre que como fruto de su diligencia fue bendecido por Dios. Pero también Dios dotó a este hombre de dones especiales. ¿Y qué hizo este hombre? Dejó esos dones a un lado. No fue diligente para cultivar esos dones a fin de poder servir al Rey lo mejor que él podía para dar testimonio a Dios y para agradar a su Señor. Daniel fue un gran administrador, se distinguió más que los demás funcionarios y sátrapas porque un espíritu extraordinario de prudencia y administración se encontraba en él. Daniel 6, 3, dice que el rey pensó ponerlo sobre todo el reino. Daniel es un buen ejemplo de lo que enseña Proverbios 22, 29, donde dice, ¿has visto un hombre diestro en su trabajo? Estará delante de los reyes, no estará delante de hombres sin importancia. George Lawson explica, Salomón nos enseña a considerar al hombre industrioso, el hombre diligente, para que al ver los beneficios que obtiene con su tarea, nos sintamos impulsados a ir y a hacer lo mismo. Este tipo de hombres estará delante de reyes. Esto no implica que todos los hombres que merezcan esta reputación puedan esperar el honor de ocupar altos cargos del Estado, sino que indica que los siervos de los reyes necesitan tener gran solicitud y que en el ámbito privado la diligencia es la forma de alcanzar honra y de prosperar. La mano diligente con los dones que Dios nos da, la mano diligente será prosperada. Daniel se distinguió no sólo por ser un trabajador hábil y diligente, sino también por el cultivo y el uso de los dones que Dios le dio para desempeñar su trabajo. Aunque muchos de nosotros no tenemos los mismos dones que Daniel tenía, Dios nos dio dones, nuestra responsabilidad es ser buenos mayordomos de esos dones, cultivándolos, primera Timoteo 4, versículo 14, y usándolos de una manera consecuente con lo que Dios nos enseña en su palabra. Debemos usar estos dones para realizar nuestro trabajo eficazmente y todo lo que hagamos debemos hacerlo principalmente para agradar al Señor. Colosenses 3, 23 y 24 declara Todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor, y no para los hombres. De corazón, es decir, desde dentro del alma. no por mera apariencia. Versículo 24, sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, es a Cristo, al Señor, a quien servís. Desde adentro del alma implica que debes entregarte a trabajar con esmero y diligencia. Rinde todo lo que debes rendir. Hacerlo de una manera concienzuda. Evita las chapucerías. ¿Saben lo que quiere decir la palabra chapucería? Eso mismo. Se explica así misma. Chapucero. Chapucería. Y por si acaso, una chapucería es una obra hecha sin arte ni pulidez. Dios no es chapucero. Todo lo que hace, lo hace bien hecho. Génesis 1, 31. Y vio Dios todo lo que había hecho. Y aquí era bueno. Y en gran manera. Bueno, vamos a hacer este marco para la puerta. Pues allá viene la persona y quieren dinero, pero no quieren trabajar. Y allá vienen y hacen un trabajo mediocre. Entonces, donde se unen las maderas, una está aquí y la otra está aquí abajo. en vez de tener un ángulo correcto. Cuando usted vea eso ahí, pero bien... Ay, pastor, pero no seas tan fastidioso, porque mire, de todas maneras, después que usted le ponga eso... No trabajes así. Los marcos tuyos deben ser de tal calidad porque, primeramente, es para el Señor que exhiban y manifiesten arte e industria que se conozca cuando pase por esa puerta. A mí nadie me diga, yo sí es quien hizo tal cosa. Así debe ser en nuestro trabajo, sea usted abogado, sea usted fontanero o plomero, sea usted un carpintero, sea usted un doctor, el mejor doctor, el mejor abogado, el mejor campintero, el mejor técnico posible según mis dones y oportunidades, la mejor ama de casa. Llegan los niños a la iglesia, esos son los hijos de la hermana Tal, producto del trabajo fiel de esa mujer como una mujer de piedad que inculca el temor de Dios y otros principios bíblicos en la mente y el corazón de estos niños. Evita la chapucería. En tu trabajo sea un hombre, una mujer dispuesto a aceptar esa responsabilidad adicional. Llega tiempo al trabajo. No tomes el tiempo que debes estar trabajando para testificar a otros. El jefe no te paga para que hagas tal cosa. Entonces, no lo hagas. No lo hagas sin su autorización. El pastor Donnelly, que me ha sido de ayuda en estos mensajes de Daniel, relató una experiencia que tuvo con un estudiante en el seminario. Donnelly pagaba sus estudios enseñando griego. Y en una ocasión uno de los estudiantes o uno de sus estudiantes llegó a la clase sin haber hecho su tarea. Cuando el pastor Donnelly le preguntó por qué no había hecho su tarea, el estudiante le respondió que no pudo hacerla porque tomó más tiempo para orar. El pastor le dijo, Cuando es el tiempo para estudiar griego, no es el tiempo para dedicarte a orar. Tu obligación es estudiar, y yo añado, como estudió Daniel. De manera que cuando él habló el lenguaje de Babilonia, sonaba como uno de Babilonia, no con acento. Y si tenía acento, era sorprendente cómo ese hombre podía hablar ese idioma, porque no perdió el tiempo. Y para estar en la corte delante del rey, no cualquiera podía estar en aquel lugar. Cuando es el tiempo de estudiar, tu obligación es estudiar. Tu obligación no es estar llamando a diestrias y nietas a tu noviecita, ni a tu noviecito. No. Eso tiene su tiempo. Pero cuando hay que estudiar, hay que estudiar. Porque hay que aprender y entender bien la materia. Cuando es el tiempo de estudiar el griego, es el tiempo de estudiar griego. En otro tiempo libre o designado para orar puedes dedicarte a orar, pero cuando es el tiempo para estudiar lo que Dios quiere es que tú estudies. Corazón, tú sabes que yo te amo. Tú sabes que mi deseo sería estar hablando aquí horas contigo. Eso es lo que pasa al principio, ¿verdad? Quieren hablar horas y algunos hablan horas. Mantienen la compañía de teléfono. Corazón, tú sabes que yo quisiera estar contigo y anhelo ese día en que podamos unir nuestras vidas delante del Señor y estar juntos. para siempre hasta que el Señor nos llame a tu presencia pero corazón no quiero romperte el corazón este es el tiempo para yo estudiar así es que yo voy a tratar de voy a ejercer dominio propio sobre mis emociones Y si no te quiere hablar más, esa no era para ti. ¡Déjala! Queridos hermanos, se ve que el Pastor Piñero ha estado trabajando mucho, ya está un poquito cansado, perdónenme. Si hemos de dar un buen testimonio en la sociedad y abrir una puerta que nos permita mostrarles el poder salvador de la gracia de Dios y hablarles del Evangelio, debemos esforzarnos por ser trabajadores inteligentes. Tu jefe y tus compañeros de trabajo deben ser testigos de tu industria y diligencia, de que hay en ti un espíritu extraordinario, un espíritu distinto. Es la presencia del Espíritu de Dios en tu vida que se manifiesta por tu integridad, que se manifiesta por tu diligencia. y por tu competencia según la medida del don y de los dones que Cristo te ha dado. Jesús dijo, así brille vuestra luz delante de los hombres para que vean vuestras buenas obras, buenas acciones y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos. Como es que los hombres y mujeres cristianos en esta sociedad van a poder ser hombres de que hagan un impacto sean hombres y mujeres íntegras y diligentes, y como ya veremos esta noche, hombres y mujeres de fe. Oremos. Padre, te damos gracias por la enseñanza de tu palabra. Tú nos dices Que toda la Escritura es útil para enseñar, para corregir, para redarguir, para corregir y para instruir en justicia a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, maduro y esté equipado, preparado para toda buena obra. y te damos gracias por la suficiencia de las Escrituras que nos enseñan cómo podemos glorificarte en esta sociedad. Gracias por el ejemplo de aquel hombre y de esa línea de hombres de Dios que nos han dejado un modelo de integridad y de diligencia y de hacer las cosas para tu gloria. Te suplicamos que nos des la capacidad para imitar su buen ejemplo. Perdónanos cuando no hemos sido diligentes. Perdónanos. Ten misericordia de nosotros. Tú nos has dicho que nuestras armas no son carnales. sino poderosas en Cristo. Ayúdanos a ser fieles. Continúa prosperando esta iglesia en todo conocimiento bíblico, en sabiduría. y en todo aquello que los hombres y las mujeres, los miembros de esta iglesia necesitan para que sean un testimonio del poder del Evangelio en sus corazones y en sus vidas en esta sociedad. Esto te lo pedimos en el nombre de Cristo. Amén. Amén.
El Cristiano y la Sociedad I
Series Conferencia pastoral 2013
El Cristiano y la Sociedad I
Sermon ID | 41525194933331 |
Duration | 52:32 |
Date | |
Category | Conference |
Bible Text | Daniel 1 |
Language | Spanish |
Documents
Add a Comment
Comments
No Comments
© Copyright
2025 SermonAudio.