
00:00
00:00
00:01
Transcript
1/0
Hermanos, pido que abran sus Biblias nuevamente conmigo, Libro de Isaías, capítulo cuarenta y cinco. En este capítulo de Isaías tenemos la profecía que Dios dio acerca de Ciro, que era un Rey allá en Babilonia, que sería usado por Dios para librar a su pueblo de la esclavitud en Babilonia. Entonces, en el capítulo 45, versículo 1 al 3, dice así dice Jehová sungido a Siro. Dios lo preparó a Siro para esta tarea, al cual tomé por Yo por su mano derecha para sujetar naciones delante de él y desatar lomos de reyes para abrir delante él puertas y las puertas no se cerrarán. Yo iré delante de ti y endesearé los lugares torcidos y quebrantaré puertas de bronce, cerrojos de hierro haré pedazos. Y te daré los tesoros escondidos, los secretos muy guardados para que sepas que yo soy Jehová, el Dios de Israel, que te pongo nombre y la razón por la cual Dios, la razón por la cual Dios hace esto a Ciro, la razón por la cual Dios hace esta liberación por medio de Ciro y la razón por la cual Dios hace todas las cosas para su pueblo está en versículo cuatro, por amor de mi siervo Jacob. Ahí tenemos la respuesta del por qué Dios hace lo que está haciendo, por su gran amor que Él ha tenido a su pueblo. Todas las cosas que están ocurriendo en el mundo son por amor a su siervo Jacob. son por amor aquellos que le fueron dados al Señor Jesucristo ellos son el siervo de Dios el Israel de Dios y para que todos sepan dice versículo 5 dice yo soy Jehová ninguno hay más ninguno más hay no hay Dios fuera de mí para que se manifieste para que se dé a conocer y Dios Las ideas de los hombres tienen hombres dioses falsos. Pero Dios va a mostrar que Él es el único Dios soberano, potente. Para que se sepa, dice, que no hay ninguno más. Yo te enseñaré aunque tú no me conociste para que se sepa desde el nacimiento del sol. desde el este hasta el oeste, que no hay más que yo, yo Jehová, y ninguno más que yo. Hay un solo Dios. Hay un solo Dios. No hay muchos Dios. Hay Dioses falsos, es decir, que no son Dioses, imaginación de hombres. Y versículo nueve nos habla, perdón, versículo ocho nos habla de Cristo por quien Dios iba a traer esta justicia. Rociad cielos de arriba y las nubes destilen la justicia vendría de arriba. Vendría de los cielos la justicia que vendría. La justicia que nos salva es la justicia que viene de arriba. Es el Señor Jesucristo que fue dado. rociad cielos de arriba, las nubes destilen la justicia, ábrese la tierra y prodúzcase la salvación y la justicia. Hágase brotar juntamente, yo Jehová lo he creado. Es la obra de Dios. La justicia de Dios, la salvación de Dios es obra de Dios. Él lo ha creado. Y luego versículos 9 y 10 nos habla de los judíos, hombres, hombres religiosos, que no creían a Dios pero que estaban pleiteando con Dios y ahí porque dice versículo 9 hay del que pleitea hay del que hace pleito con su hacedor el tiesto con los tiestos de la tierra saben que es un tiesto verdad es una vasija de barro quebrado y quedan los tiestos y Dios está diciendo ni siquiera eres barro completo eres tiesto Si te vas a pelear con alguien, peleate con alguien de tu propia estatura. Los diestos con los diestos de la tierra. Dirá el barro al que lo labra, que haces o tu obra no tiene mal. Dios es soberano. Él hace lo que Él quiere. Hay del que dice al padre, ¿por qué me engendraste? La mujer, ¿por qué diste a luz? En versículo 11 al 13 dice Jehová, el santo de Israel, tu formador, pregúntame por las cosas por venir, mándame acerca de mis hijos y acerca de la obra de mis manos. Yo hice la tierra y creé sobre ella al hombre. Yo mis manos extendieron los cielos y a todo ejército mandé. Yo lo desperté en justicia y enderezaré todos sus caminos. Él edificará mi ciudad y soltará mis cautivos, no por precios ni por dones, dice Jehová de los ejércitos. Aquí en estos versículos 11 al 13, Ciro es un tipo, es un tipo de Cristo por quien Dios iba a librar a su pueblo, pero Cristo, la realidad o el antitipo, Él es el que Todas las cosas que fueron determinadas por Dios fueron determinadas antes de la fundación del mundo. Y Él va a edificar la ciudad. Cristo dijo, yo edificaré mi iglesia. Sobre esta roca edificaré mi iglesia y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella. Versículo 14 habla de los gentiles que vendrían, así dice Jehová, el trabajo de Egipto y las mercaderías de Etiopía y los sabios hombres de elevada estatura se pasarán a ti, serán tuyos, irán en pos de ti, pasarán con grillos, te harán reverencia y te suplicarán diciendo ciertamente en ti está Dios y no hay otro fuera de Dios. los gentiles serían llamados los gentiles serían nombrados entre la iglesia del señor Jesucristo versículo 15 Dios es soberano verdaderamente tú eres Dios que te encubres Dios se encubre y al que quiere revelar se revela algunos se encubre y no se revela pero él tiene Él tiene el derecho de hacer lo que Él quiere, Él es Dios. Tú eres Dios que te encubres, Dios de Israel que salvas. Versículo 16 nos dice, confusos y avergonzados serán todos ellos, todos ellos que van tras dioses falsos. Confusos y avergonzados serán todos ellos, irán con afrenta todos los fabricadores de imágenes. Van a ser confundidos, van a ser avergonzados un día. Solamente hay un Dios, el Dios vivo y verdadero. Y todos los que fabrican un Dios, y recuerden, no se tiene que fabricar un Dios de yeso o de oro o de plata. Cualquier imaginación que el hombre tenga de Dios, que Dios no haya dicho primero de sí mismo en su palabra, la Biblia que tienes en tus manos, es una imagen, es un ídolo. Sólo podemos nosotros conocer a Dios como Dios se ha revelado en su palabra. Sólo podemos conocer a Dios en aquel en el cual se ha revelado en el Señor Jesucristo. El Señor Jesucristo dijo, yo y el Padre uno somos. El invisible Dios es manifestado en Cristo Jesús. Solamente así podemos. Y todas aquellas personas que se fabrican un Dios, que no es el dios de la biblia están confiando aunque le llamen jesús aunque le llamen jesús si no es el jesús que se revela en las sagradas escrituras es una imagen es un ídolo y no puede salvarlos no puede salvarlos más adelante dice lo mismo quiero que lo veamos en un momento los que adoran dioses falsos Los ídolos de su imaginación serán confundidos y avergonzados. Pero, versículo 17, Israel será salvo. Israel será salvo. Ahí quiero que nos detengamos un momento. Israel será salvo. No es un tal vez. Cristo no vino a salvar a su pueblo, a intentar salvar a su pueblo. No vino a intentar. Él vino a salvar. Llamará su nombre Jesús porque Él salvará a su pueblo de sus pecados. Israel será salvo. ¿Con qué clase de salvación? Con salvación eterna. Con salvación eterna. La salvación, si tú crees en el Señor Jesucristo, ha sido salvo desde la eternidad. y serás salvo en la eternidad. ¿Por qué? Porque es Dios quien te salvó. ¿Entiendes eso? Es verdad que llegó un día. Es verdad que llegó un día cuando oíste el evangelio. Lo oíste como el evangelio de tu salvación. Dios te abrió los oídos para que oigas las buenas nuevas. y habiendo creído en él, fuiste sellado con el Espíritu Santo. Es decir, el Espíritu Santo vino y tomó posesión de tu cuerpo, de ti, entró en ti. Cristo en ti es la esperanza de gloria. Pero la realidad es que Dios no hace nada en el tiempo. Todo lo que Dios ha hecho lo hace desde la eternidad. Desde la eternidad. Israel será salvo en Jehová con salvación eterna. Podríamos pensarlo de esa manera, ¿verdad? Porque Cristo es el Cordero, nos dice Apocalipsis, inmolado desde la fundación del mundo, ¿verdad? Si Cristo fue inmolado desde la fundación del mundo, fue inmolado por un pueblo. desde la fundación del mundo. Es decir, antes de que haya un pecador, ya había un representante, ya había un sustituto, el Señor Jesucristo, en la mente y el propósito de Dios. Tuvo que venir el cumplimiento del tiempo, así como tuvo que salir el sol en esta mañana. Tuvo que salir el sol en esta mañana porque el propósito de Dios se está cumpliendo en la salvación de su pueblo. Todo Israel será salvo. Israel será salvo. El Señor Jesucristo llama a este Israel sus ovejas. Ninguna de sus ovejas se perderá. Es un salvador exitoso. El verdadero Israel, ¿quiénes son? No son aquellas personas que están allá en Medio Oriente. Están allá en Palestina. Esos no son el Israel de Dios. Tal vez hay personas en ese lugar que son Israel, pero el verdadero Israel eres tú, si tú crees en el Señor Jesucristo. Eres un judío. Vean lo que dice en Romanos capítulo 2. El verdadero Israel son aquellas personas a quien Dios Dios los hace nacer. En Romanos capítulo 2 versículo 28 dice, pues no es judío, no es judío el que lo es exteriormente. Si tú ves a una persona judía en lo exterior, visten de cierta manera y puedes decir es un judío. Pero no es un judío el que lo es exteriormente. ni es la circuncisión la que se hace exteriormente en la carne. No es la circuncisión la que se hace en la carne, sino que es judío el que lo es en lo interior. ¿Dónde? Y la circuncisión es la del corazón. Es decir, Dios corta el corazón. Dios quita ese corazón de piedra, ese corazón duro, ese corazón obstinado, ese corazón que no se somete a la palabra de Dios ni tampoco puede, ese corazón que no cree y no puede creer a Dios. Dios quita ese corazón de piedra y pone un corazón de carne, un corazón sensible, un corazón que responde a la palabra de Dios. esa es la circuncisión no hecha de manos y la alabanza no es del hombre si tu puedes meter mano si tu puedes meter mano en la salvación del hombre la alabanza es tuya la salvación de un hombre o la salvación de ti mismo si tu puedes tocarlo y decir yo hice esto tienes alabanza El hombre se va a lavar. Yo soy salvo porque yo fui bautizado. Esa persona se está lavando a sí misma. Yo soy salvo porque yo hice mi profesión de fe. Yo soy salvo porque yo soy miembro de esta iglesia. Yo soy salvo porque asisto. Yo soy salvo porque esto, esto y otro. Pero si tú dices, yo soy salvo porque Dios me ha dado fe, entonces no tienes nada que gloriarte. no tienes nada que gloriarte la gloria es todo de Dios la alabanza dice dice ya no el judío es el que lo es interior y la circuncisión es la del corazón en espíritu no en letra la alabanza del cual no viene de los hombres sino de Dios la alabanza es de Dios a romanos capítulo siete nueve Ni por ser descendientes de Abraham son todos hijos. No por ser descendientes de Abraham son todos hijos. Sino en Isaac te será llamada descendencia. ¿Qué tenía Isaac? Isaac fue el hijo de promesa. Isaac fue un hijo milagroso. Cuando Abraham no podía tener hijos. Cuando Sara no podía tener hijos, Dios le dio a Isaac, hijo de promesa. ¿Quién tiene la alabanza? Dios. ¿Sí? Abraham tuvo a Ismael, pero ese fue producto de su carne. Y Dios dice, ¿lo que es producto tuyo? No. Abraham tuvo otros hijos también. Pero dice, en Isaac te será llamada descendencia. Esto es, no los que son hijos según la carne son los hijos de Dios, sino los que son hijos según la promesa son contados como descendencia. Porque la palabra de promesa es esta, por este tiempo vendré y Sara tendrá un hijo. Y no solo eso, sino también cuando Rebeca concibió de uno de Isaac, nuestro padre, pues no habían aún nacido ni habían hecho aún el bien y el mal para que el propósito de Dios conforme a la elección permanecese, no por obras, sino por el que llama. Entonces, los verdaderos hijos de Israel, los verdaderos de Israel son los hijos de Abraham en Cristo. Es decir, así como Abraham creyó a Dios, todos los hijos de Dios creen a Dios. Creen a Dios. Abraham creyó a Dios y le fue contado por justicia. Y los que son hijos de Abraham, es decir, son hijos de Dios, también creen a Dios. Bueno, en Israel. Israel será salvo en Jehová. En Jehová. No hay otro, ¿verdad? No en la iglesia. No en la doctrina. No en el sistema teológico. En Jehová. ¿De quién está hablando? Está hablando Jehová manifestado en la carne. Está hablando de Cristo Jesús. Él es Jehová. Israel será salvo en Jehová con salvación eterna. Otra cosa que nos dice aquí es que no, no pueden perecer. No pueden perecer. Nadie las puede arrebatar de la mano de mi padre. Esto te da mucho consuelo a ti. Me da mucho consuelo a mí. Que Cristo que hizo la obra de salvación eterna. No importa cual sea la circunstancia en que nos encontramos. Muchas veces nosotros estamos decaídos. Yo estoy decaído porque estoy mirando adentro. Estoy mirando algo aquí, buscando razón en mí. No hay razón en mí. No hay razón en mí. La razón está únicamente en Cristo Jesús. Bueno. no os avergonzareis ni os afrentareis por todos los siglos la persona que en el cree no sera avergonzado ni ahora es decir la persona que cree en el Señor Jesucristo no esta avergonzado de confesar al Señor Jesucristo es su vida no esta avergonzado y no va a estar avergonzado cuando llegue el dia del juicio ese es el dia que el refugio de uno va a ser mostrado, ¿verdad? Ahí es cuando Dios va a sacudir, va a sacudir todo este universo. Todo quien esté fundado sobre Cristo Jesús va a estar avergonzado de su refugio. Y si hizo su refugio en mentiras, dice Dios, Él va a arrasar con esa persona. Porque así dijo Jehová que creó los cielos, versículo 18. esto no es una promesa hueca Dios dijo así el que creó los cielos él es Dios y la formó y formó la tierra el que la hizo y la compuso no la creó en vano es decir este tiempo este universo este mundo no es vano no es vano con un propósito él va a sacar a su pueblo y Dios el cielo, el cielo nuevo y la tierra nueva que Dios va a formar, no la está creando en vano para que esté habitada por todo su pueblo. Yo soy Jehová y no hay otro. La creación de este mundo no es en vano. y la creación del nuevo cielo y la nueva tierra no se va. Dios va a sacar a su pueblo de este mundo y los va a poner en su nuevo cielo y nueva tierra. Creó los cielos y la tierra y de ellas va a salir un cielo nuevo y una tierra nueva que creó para ser habitada por un pueblo que está transformado a la imagen de su hijo, a la imagen de Cristo Jesús. Dios amó a su Hijo y Él va a transformar a todos aquellos que son de Cristo a la imagen de Cristo para habitar con el Señor Jesucristo en la gloria. Vean Romanos capítulo 8. Romanos capítulo 8, versículo 19. Aquí está hablando de esta creación, es decir, este cielo, esta tierra, el universo. Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. Porque la creación, todo lo que puedas ver, la creación, fue sujetada a vanidad. No por su propia voluntad, sino por la causa de la que la sujetó en esperanza. Porque también la creación misma será libertada. La creación va a ser libertada. de la esclavitud, de la corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios. Porque sabemos que toda la creación gime a una y a una está en dolores de parto hasta ahora. Y no solo ella, sino también nosotros mismos que tenemos las primicias del espíritu. Nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo. Brinca el versículo 29. Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conforme a la imagen de su hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos. Y a los que predestinó a estos también llamó, y a los que llamó a estos también justificó, y a los que justificó a estos también glorificó. En el propósito de la mente de Dios, él va a tener un pueblo en la gloria semejante a su hijo. Todo esto fue decretado y determinado por Dios desde antes de la fundación del mundo. Nosotros no podemos entender todas estas cosas, pero dice en Isaías 46, acordaos de las cosas pasadas, versículo 9. Desde los tiempos antiguos porque yo soy Dios y no hay otro Dios y nada hay semejante a mí. Que anuncio lo porvenir desde el principio y desde la antigüedad lo que aún no era hecho y que digo, mi consejo permanecerá. Y haré todo lo que quiero. Que llamo desde el oriente al ave y de la tierra lejana al varón de mi consejo. Yo hablé y lo haré venir, lo he pensado y también lo haré. Ahora, regresando al texto, el versículo 19. Dios está diciendo esto a todos en el mundo. Cuando Dios te dice, cuando Dios te dice a ti, cuando Dios me dice a mí, cree en el Señor Jesucristo. No es en vano. No es en vano. Es decir, Dios no se está burlando de los hombres. Pero dice primeramente en versículo 19, no hablé en secreto en un lugar oscuro de la tierra, no dije a la descendencia de Jacob en vano me buscáis. Yo soy Jehová que hablo en justicia, que anuncio rectitud. No habló este evangelio, este mensaje de Cristo, no es un secreto. No es un secreto. Dios se ha dado a conocer. No es un secreto. Este evangelio no lo sucerró en un secreto, en un rincón de la tierra. Este evangelio ha salido por todo el mundo. No lo escondí en un lugar oscuro, ni tampoco he dicho a los hijos de Jacob, búscame. Y esto que sea una vanidad para nada. El pueblo de Dios, cuando Dios te dice, búscame, su pueblo le va a buscar. Dios no habla en vano a su pueblo. Lázaro, ven fuera. No habló a Lázaro en vano. Dios no habla a su pueblo en vano. Mateo, Levít, sígueme. Se levantó del sillo. Dios no habla a su pueblo en vano. Cuando Dios llama a su pueblo, lo llama con llamamiento eficaz, llamamiento de poder. Saqueo, date prisa, desciende. Saqueo bajo. Así también cuando el Espíritu Santo, por medio de la palabra, habla a su pueblo, no es en vano. No es en vano. Y cuando Dios dice, ven a mí todo lo que está trabajado y cargado, yo os haré descansar, esto no es una promesa hueca. Es decir, el Señor Jesucristo no está diciendo, ven a mí y yo haré descansar. Y luego que la persona viene, podemos pensar de una persona que por su pecado, por la convicción de su pecado. Puede decir, yo soy gran pecador. Así como dijo este hombre leproso, Señor, si quieres, puedes limpiarme. Él tenía plena convicción de que él podía salvarle, pero tenía dudas de que si quería salvarle, que si quería limpiarlo. Y tal vez una persona pueda preguntarse, bueno, Yo no sé si es a mí y tal vez pueda tener temor de venir al Señor Jesucristo. Pero escuchen, el Señor Jesucristo va a recibir todo aquel que viene a Él. Todo aquel que viene a Él es traído por Dios el Padre. Estoy hablando de que es traído por el Espíritu Santo, que es traído por Dios el Padre. Hay personas que vienen a un Cristo falso. Oyen las mismas palabras y vienen a un Cristo falso. Pero todas aquellas personas que son traídas vienen a Cristo Jesús. Recuerden lo que dijo el Señor Jesucristo, nadie puede venir a mí si el Padre que me envió no lo trajere. Si el Padre, pero si tú vienes, Si vienes a Cristo Jesús, quieres ser salvo. Él no te está llamando en vano. Imagínate ese pobre hombre ciego, bartimeo. ¿Qué le dijeron los hombres? Trataron de desanimarlo, pero, cállate. Cállate. Por fin el Señor Jesucristo lo llamó a este hombre. ¿Y qué le dijeron? Ten ánimo. El Señor te llama. Ten ánimo. El Señor te llama. Ten ánimo. Este hombre vino al Señor Jesucristo, dejó su capa, vino al Señor Jesucristo. Y el Señor Jesucristo le dijo, ya regrésate. No. Era para salvarlo. Era para darle su vista. Bueno. Yo soy Jehová que hablo justicia, que anuncio rectitud. Él dio a conocer su palabra. Él dio a conocer su misericordia a pecadores por medio de Cristo Jesús. Él habla en justicia. Es verdad lo que dice. Esta es la verdad de Dios. Dios que no miente ha dicho, todo aquel que viene a mí no le echo fuera. Ahora versículo 20, aquí dice Dios esto. Reuníos, venid, juntados todos los sobrevivientes de entre las naciones. No tienen conocimiento aquellos que erigen el madero de su ida y los que ruegan un Dios que nos salva. Junten, Dios está diciendo a todos, júntense a su pueblo, júntense. Júntense. Vengan, escuchen. Si una persona adora, si una persona sirve a un Dios que no tiene poder, ¿Ese Dios puede salvarle? Si una persona es muy devota a un Dios falso, ¿Ese Dios lo puede salvar? Las personas dicen, piensan que todos vamos a ir al cielo, hay todos estos diferentes caminos, lo único que importa es si eres sincero. Pero una persona puede ser muy sincero y sinceramente equivocado, sinceramente en el error. Y Dios dice así, no tienen conocimiento aquellos que erigen el madero de su vida y los que ruegan a un Dios que no puede salvar. Aquellas personas que oyen de un Cristo falso, ¿ese Cristo falso puede salvarles? No. Si no están oyendo del Cristo de la Biblia. Si están oyendo de un pobrecito Cristo que quiere salvar, pero no puede si tú no le das permiso. Ese es el Cristo de la Biblia. No. El Cristo de la Biblia, Jesús, Él es soberano. Él está en control de todas las cosas. Él reina. Él ha sido exaltado para dar arrepentimiento. Él es sombrero. Y cuando las personas predican un Cristo, que es un Cristo falso, estas personas no tienen conocimiento. ¿Cuál es la diferencia, entonces, entre el pueblo de Dios? Dios les da conocimiento. Porque ninguno de nosotros tiene conocimiento por naturaleza. 1 Juan 5 dice, y sabemos que el Hijo de Dios ha venido y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero. y estamos en el verdadero, en su Hijo. Este es el verdadero Dios y la vida eterna. Esta es la vida eterna que te conozcan a ti, al único Dios verdadero y a Jesucristo a quien has enviado. No tienen conocimiento, erigen el madero de su ídolo, su imaginación y ruegan a un Dios que nos salva. Dice el versículo 21, proclamar y hacerlos acercarse y enten todos en consulta ¿Quién hizo esto? ¿Quién hizo oír esto desde el principio y lo tiene dicho desde entonces sino yo Jehová? Y no hay más Dios que yo. El evangelio que nosotros predicamos, el evangelio que nosotros creemos, el Dios que nos... es el mismo ayer, hoy y para siempre. El evangelio no cambia. Los hombres, el tiempo cambia, pero Dios no cambia. ¿Sí? Y cuando una persona predica un evangelio moderno, un evangelio que le agrada a los hombres o quieren modificarlo para que la gente lo reciba, es un evangelio falso. Más vale que el evangelio que tú creas y que yo crea sea el evangelio que Dios dijo desde el principio. El evangelio que se encuentra en Génesis. El Evangelio que creyó Abraham, Enoch, Moisés. Ese mismo Evangelio. Hacerlos acercarse y junten todos en consulta. ¿Quién hizo oír esto desde el principio? ¿Quién hizo oír este Evangelio desde el principio? Yo, Jehová. Él es el predicador. Cristo Jesús, el predicador. sino yo Jehová, y no hay más Dios que yo, Dios justo y salvador. Dios va a salvar a su pueblo, pero antes que salve a su pueblo, tiene que hacer algo por sí mismo. Dios es salvador, pero Dios no es salvador a expensas de su justicia. Es decir, Dios no va a salvar al hombre, ignorando o poniendo a un lado su justicia. Su justicia tiene que ser vindicada. La justicia de Dios que demanda la muerte de todo aquel que comete pecado. La justicia de Dios demanda el alma que pecara esa alma morirá. Hay que entender que Dios es el único que ha dado el camino. Cristo Jesús es el camino. Y en Cristo Jesús Dios puede ser justo y también salvar a su pueblo, su pueblo que es pecador. Pero únicamente en Cristo Jesús, porque es únicamente en Cristo Jesús donde se revela la justicia de Dios. La justicia testificada por la ley y los profetas. La justicia que es descrita desde el principio. Cómo Dios salvaría a su pueblo por la obra del Señor Jesucristo. Cristo Jesús, el hombre, el Dios hombre, vino a este mundo y estableció justicia, rectitud aquí en la tierra. Es lo que dice, prodúzcase la salvación y la justicia, ábrase la tierra, prodúzcase, versículo ocho, la salvación y la justicia, hágase brotar juntamente, yo Jehová lo he creado. La salvación y la justicia, no aparte de la justicia. La salvación y la justicia. Él es Dios justo y salvador. ¿Cómo? En la persona y la obra del Señor Jesucristo. Él estableció todo lo que Dios requiere de ti y de mí. Ahora y por toda la eternidad. El Señor Jesucristo, Él lo cumplió. Él lo cumplió aquí en la tierra. Él es Jehová, justicia nuestra. En Jehová tengo justicia. Y cuando Él murió en la cruz del Calvario, Dios satisfizo las demandas de esa ley quebrantada. La ley que demanda muerte, Él murió mi muerte. Es decir, cuando Él murió, yo morí. Cuando Él murió, tú moriste. Si tú crees en el Señor Jesucristo, esa es tu muerte. Y ahora la muerte ya no tiene nada que ver contigo. Son buenas nuevas, ¿verdad? Ya moriste. Y ahora estás viviendo. Si crees en el Señor Jesucristo, nunca vas a morir. Es lo que dijo el Señor Jesucristo. Marta, nunca vas a morir. Tú crees esto, Marta. Sabemos que este cuerpo va a llegar a la tierra. Pero estamos hablando de vida eterna. Vida eterna en Cristo. Dios justo y salvador. Ningún otro fuera de mí. No hay otro camino. No hay otra manera que Dios salve. No hay otro camino. Él es el único camino, Cristo Jesús. Ahora, si Él es el único camino, si Él es el Dios justo y salvador, ¿Qué es lo que nosotros debemos hacer? ¿Qué es lo que debemos nosotros hacer? Bueno, ¿qué debemos nosotros buscar o hacer? ¿Qué debemos hacer si vamos a ser salvos? Temo al decir la palabra hacer porque la persona piensa, voy a hacer algo. Pero noten aquí, ¿qué dice Dios? Mirad a mí. Mirad a mí. ¿A quién debemos ver si queremos ser salvos? A Él. Mirad al Señor Jesucristo. ¿Cómo lo miramos? No en un nicho. No en una imagen. Lo miramos con el ojo de fe. Miramos a este hombre, el Señor Jesucristo, allá en la cruz del Calvario, y vemos allá a Dios manifestado en la carne. Vemos allá que Dios puso todo mi pecado en el cuerpo del Señor Jesucristo. Y vemos como la ira de Dios cayó sobre Él. Vemos al Señor Jesucristo, la justicia del Señor Jesucristo es nuestra justicia. mirar a él y ser salvos. No dice, no dice trabaja, no dice hagas. Yo dije que debemos hacer. No dice hagas. Vamos a creer en el Señor Jesucristo, pero el creer no es una obra. Creer es don de Dios. Dios te da la fe, tú crees. Pero la fe con que crees, Dios te la da. No dice trabaja. No dice ni siquiera sirve al Señor y serás salvo. Cuando una persona es salvo, esa persona va a trabajar. Cuando una persona es salvo, esa persona va a hacer. Cuando una persona es salvo, esa persona va a servir. Pero esos son resultados de la salvación y no la causa de la salvación. Cré en el Señor Jesucristo y serás salvo. Mirad a mí y sed salvo. Dijo el Señor Jesucristo. Así como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado, para que todo aquel que en él creyere. Para que todo aquel que en él creyere. Cuando Moisés levantó esa serpiente allá en el desierto, los pueblos de Israel que se había murmurado y revelado en contra de Dios, las serpientes los habían mordido. Tenían el veneno de las serpientes corriendo en sus venas. Y Moisés, Dios le dijo a Moisés, Moisés no se le ocurrió, Dios le dijo a Moisés, hazte una serpiente de bronce en la semejante de esas serpientes. y ponla sobre un asta y levanta esa asta y le dices al pueblo que está muriendo por el veneno que mire esa serpiente no te parece locura parece locura verdad saben que dice la palabra el evangelio es locura para los que se pierden pero para los que se salvan es el poder de Dios Dios dice mira Hay personas que estaban allá, imagínate, más de dos millones de personas allá en el pueblo de Israel. Si tú levantas un asta, aunque sea de 20 metros, simplemente la distancia de esa última persona no lo puede mirar. ¿Cómo lo tenía que mirar? Lo tenía que mirar como la persona que estuviera más cerca, lo tenía que mirar creyendo a Dios. Personas vieron al Señor Jesucristo crucificado y no fueron salvos. Pero personas que están dos mil años lejos de ese día lo miran, lo miran con fe y son salvos. Mirad a mí, sed salvos. ¿Quiénes todos los términos de la tierra? Judíos y gentiles, ricos y pobres, ancianos y niños, porque yo soy Dios y no hay más. luego dice versículo 23 dice por mí mismo hice juramento Dios está haciendo juramento por sí mismo Dios no puede jurar por alguien más grande dice por mí mismo hice juramento de mi boca salió palabra en justicia y no será revocado no va a ser cambiado que a mí se doblará toda rodilla y jurará toda la vida. Todos van a confesar que el Señor Jesús es el Señor para la gloria de Dios el Padre. La salvación es doblar la rodilla hoy, es venir a Él hoy, suplicar a Él hoy, mirarlo a Él hoy, creer hoy. Pero de todas maneras todos van a doblar la rodilla, ya sea ahora que es salvación o en el día del juicio cuando será condenación eterna. Y se dirá de mí, dice el Señor. Ciertamente en Jehová está la justicia y la fuerza. Y a Él vendrán todos los que contra Él se... A Él vendrán y todos los que contra Él se enardecen, se harán avergonzados. Todos los que rehusan creer, todos los que se burlan, se enardecen contra este Evangelio, van a ser avergonzados. Pero en Jehová, dice el versículo veinticinco, será justificada y se gloriará toda la descendencia del rey. Mas por él estáis vosotros en Cristo Jesús, quien por Dios nos ha sido hecho sabiduría, justificación y santificación para aquel que se gloríe, gloríese en el Señor. En Jehová será justificado. Él es justicia nuestra y somos justificados en Cristo Jesús. Bueno, mira a Cristo Jesús. Lo estamos mirando ahora y lo vamos a seguir mirando hasta que un día lo miremos con nuestros ojos. Dije que fuimos salvos en la eternidad. Yo no estaba allá. Eso es el propósito de Dios. Cristo Jesús murió. Fui salvo entonces. Yo no estaba allá. Vino un día que Él se reveló a mí y lo estoy mirando. Estoy confiando en Él. Pero voy a seguir confiando hasta que un día yo abra los ojos y lo pueda ver. Dijo el salmista, yo voy a estar satisfecho cuando yo abra mis ojos en su presencia, cuando yo lo vea. Entonces, seremos completamente salvos. Que el Señor bendiga su palabra.
De su boca salio Palabra de Justicia
Sermon ID | 23171112247 |
Duration | 46:05 |
Date | |
Category | Midweek Service |
Bible Text | Isaiah 45 |
Language | Spanish |
© Copyright
2025 SermonAudio.