Usted está escuchando una traducción de una prédica de Richard Cadwell, pastor y maestro de Founders Baptist Church en Spring, Texas. Esta traducción fue realizada en vivo y sin edición. Nuestro mayor interés es avanzar la verdad de Dios para la gloria de Dios. Usted puede colaborar con nosotros compartiendo esta prédica con sus amigos a través de las redes sociales como Facebook, Twitter, Google Plus y Pinterest. en sus oraciones. Y Joshua estará yendo hacia el funeral y todo eso mañana. Así que acuérdese de él y de su familia. Está en fin de semana. Efesios capítulo 1 es donde estamos esta noche y vamos a leer el verso 1 y 2 juntos de nuevo. Efesios 1 verso 1. Pablo apóstol de Cristo Jesús por la voluntad de Dios. a los santos que están en Efeso y que son fieles en Cristo Jesús. Gracias a vosotros y paz de Dios nuestro Padre y el Señor Jesucristo. Vamos al Señor juntos en oración esta noche. Padre, te doy gracias por la manera en que mi corazón ya ha sido edificado mientras que hemos sido capaces de cantarte a ti. aún como cantamos justo ahora acerca de tu grandeza. Y mientras que abrimos esta tu palabra, el libro de Efesios, se nos recuerda de la realidad de la salvación y la grandeza de la salvación. Le damos adoración, porque Señor, la salvación es tu obra y solamente tuya. Gracias por la misericordia, gracias por la bondad, el amor, la gracia con la que nos hemos encontrado en Jesús. Gracias de que has tenido lástima de nosotros. Merecíamos tu furia y tu juicio, pero en vez, Señor, tú nos has dado vida. Y ahora, no solamente estamos agradecidos esta noche, estaremos agradecidos por el resto de la eternidad. Señor, mientras que estoy delante de tu pueblo cada semana y tengo el privilegio de enseñar tu palabra, estoy muy consciente de mi propia debilidad y mi inhabilidad, y con gozo confieso que yo no soy capaz Pero Señor, también confieso que tú eres capaz. Y oro de que tú tomes esta vasija débil y tomes este tiempo de la predicación y lo hagas una bendición para tu pueblo. Edifica tu iglesia. Lávanos con el agua pura y limpia de tu palabra. Recuérdanos de quién somos en Cristo. Recuérdanos lo que has hecho en Él, por nosotros en Él. Y si hay alguno en este lugar que no te conoce nuestra oración, por ellos es para que reciban salvación. Oramos estas cosas en el nombre de Jesús. Amén. El miércoles pasado empezamos nuestro estudio de este libro, y pasamos nuestro tiempo en el saludo de Pablo. Pasamos nuestro tiempo en su saludo, y vamos a hacer eso de nuevo esta noche. Y solo quiero decir desde el principio, no tema, no vamos a estudiar el libro de Efesio una palabra a la vez. Yo sé que así es como se siente, a lo mejor ahorita. Pero la razón por la que yo quiero pasar un tiempo en este saludo, Es que aunque esto no es un saludo único, usted encontrará algo muy similar a esto en casi todas las cartas de Pablo. En esta particular, en esta carta en particular, la carta a los Efesios, este saludo. sirve casi como una prevista y un resumen de lo que se trata este libro en su raíz. Martin Lloyd-Jones llamó el libro de Efesios, la esencia destilada de la religión cristiana. Lo que es decir, nos dice qué significa ser un cristiano. nos da a nosotros realmente lo que es el cristianismo básico. Esta carta es profundamente, muy profunda en muchos lugares, pero también es simple en términos de su presentación. Así que debemos de hacer la pregunta, ¿qué significa el ser un cristiano? Y Pablo, en la misma manera en que él introduce esta carta, en la manera en que él describe a las personas que están recibiendo la carta, nos da una definición, una descripción de lo que significa el ser un cristiano. Él dice en el verso 1 a los santos que están en Efe y que son fieles en Cristo Jesús. Y le dije el miércoles pasado que realmente tiene una descripción de tres partes de los creyentes en esa declaración. Los cristianos son santos, los cristianos son fieles y somos un pueblo que estamos en Cristo Jesús. Y el miércoles pasado hablamos acerca de lo que significa ser un santo. Todos los cristianos son santos. Si usted es un santo, usted es un cristiano. Si usted es un cristiano, usted es un santo. Y lo que significa es que Dios nos ha separado para sí. Él nos salvó del mundo, nos sacó del dominio de la oscuridad, nos transferió al reino de su propio Hijo amado, nos dio vida, nos dio luz, nos ha hecho nuevas creaciones, nos ha separado para sí. Ahora somos santos para el Señor. Él ha removido nuestra corrupción desde un punto de vista forénsico y legal. Somos un pueblo perdonado. Pero Él también nos ha cambiado. Leímos la semana pasada donde la Biblia dice que nuestros corazones han sido limpiados por la fe. Nuestros corazones han sido limpiados por la fe. Dios ha hecho una obra de limpieza, una vida que cambió nuestras vidas en nosotros. La carne todavía está en nosotros, pero nosotros ya no estamos en la carne. Y hablamos de eso la semana pasada, esta noche. Lo que quiero que hagamos es que meditamos, meditemos acerca de esta segunda descripción del verso uno. Él le habla a estas personas no solamente como santos, se dirige a ellos no solo como santos, pero también dice que son fieles. Los cristianos son personas fieles. Y antes de hablar de esto, quiero hacer un hincapié en la importancia de todo esto. Usted se puede decir a usted mismo. Bueno, esto es simple. Aunque estamos pasando nuestro tiempo, nuestro principio del estudio de fresio, hablando acerca de lo que significa ser un cristiano, a lo mejor todos somos cristianos en este lugar esta noche, y a lo mejor usted piensa para usted mismo, ¿por qué estamos pasando este tiempo pensando en lo que significa ser un cristiano? Yo le digo, yo creo que es uno de los temas más importantes de todos, no solamente para la iglesia de nuestros tiempos, sino que para la iglesia de todos los tiempos. De hecho, no creo que es una exageración decir. que la mayoría de lo que está pasando mal en las iglesias hoy, y la mayoría de lo que está saliendo mal en las iglesias a través de todas las edades, todas las épocas, está atado a este mismo tema. Cuando la iglesia ya no entiende y se acuerda de que su membresía debe de ser regenerativa, y aún más cuando no entiende lo que Dios hace en la regeneración y cómo Él salva. Entonces, no va a pasar mucho tiempo antes de que encontremos un montón de cosas que están sucediendo en las iglesias, que no van de acuerdo con la palabra de Dios y no agradan a Cristo. De hecho, hoy estaba investigando en la internet una historia en una página secular de una iglesia en particular, y esta historia ha salido acerca de esta iglesia bautista del sur, en términos de cómo ellos están manipulando a las personas a bautizarse. Y usted observe ese tipo de cosas y el tipo de cosas donde ellos tienen personas sentadas en la audiencia y cuando la invitación se da, hay personas que están plantadas, que empiezan a moverse hacia el frente de diferentes maneras de que ellos están psicológicamente jugando con las personas para hacerlas confesar fe en Jesús y seguir eso con un bautismo. Cuando usted ve ese tipo de cosas, Lo que nos habla y nos deja saber eso de una manera clara es que estas personas ya sea no entienden cómo Dios salva a los pecadores o aún peor, no les importa. A lo mejor ellos entienden cómo Dios salva, pero por sacar buenos números o por tener una satisfacción de tener más personas que se unan a la iglesia o tener más dinero, cualquiera que sea el caso, cualquiera que sea su motivación. Ellos saben. que esto no puede ser algo real y simplemente no les importa. De cualquier modo, asusta. Así que esto es muy importante. ¿Qué significa el ser un cristiano? Y Pablo dice aquí en el verso 1 que un cristiano es fiel, y en este contexto, quiero que reconozca que él está dirigiéndose al mismo grupo de personas. Así que si usted es un santo, Entonces usted es fiel. Si usted es fiel, entonces usted es un santo. Y si usted es un santo y si usted es fiel, significa que usted le pertenece a la iglesia. Esta carta está dirigida a la iglesia, a toda la iglesia. Todo verdadero miembro de la iglesia es un santo y es fiel. en este contexto. Y compartí con usted la semana pasada que hay alguna evidencia de que esta carta pudo haber sido un ciclo, primero dada en Efesos y luego leída en Efesos y luego dada en la Odisea y luego en Colosenses. Y si ese es el caso, no solamente estamos hablando acerca de una iglesia local en particular y también deteniéndonos para darnos cuentas de que el Espíritu Santo dirigió esto a todas las iglesias a través de todos los tiempos. Así que esta es una carta para todos nosotros. Así que esto es algo que aplica a todos los creyentes. Todos los cristianos, todos los creyentes pueden ser descritos como fieles en algún sentido. Bueno, ¿cómo entendemos eso? Porque para la mayoría de nosotros, cuando pensamos acerca de la palabra fiel, si yo le pregunto a ustedes del principio, es usted un creyente fiel? ¿Cuál hubiera sido lo primero que viene a su mente? O si lo hubiera dicho de esta manera, si hubiera dicho todos los cristianos esta noche en este lugar es fiel. ¿Es acaso todo cristiano fiel en el mundo? ¿Cómo hubiera sido tentado usted en responder eso? Y sin embargo, Pablo se dirige a todos nosotros como fieles. Cuando pensamos acerca de fidelidad, pensamos acerca de obediencia, pensamos en confiabilidad, en alguien que está sirviendo a Cristo bien en el momento. Y la palabra puede tener ese significado. Y en ese sentido, todos nosotros a lo mejor no somos fieles, aun si somos salvos. Pero esta palabra, la palabra despistos, una forma de la palabra pistos, también puede significar el creer. Alguien que es un creyente, que el ser fiel es ser un creyente. El ser fiel es ser alguien quien está lleno de fe hacia Jesús, fe en Cristo, fe en Dios, el ser fiel. es el ser un creyente. Así que hay un elemento de confiabilidad ahí cuando usted empieza a entender el tipo de fe de la que vamos a hablar esta noche. Entonces usted entenderá que esta fe es verdadera. Siempre, la fe que es verdadera siempre continúa. Así que son fieles en el sentido de que su fe es verdadera y que es una que continúa, que persevera, continúa a seguir a Cristo. Esto es lo que significa el ser un cristiano. Si esta noche nosotros pudiéramos retirar el velo y el domingo cuando nos reunamos aquí, el domingo en la mañana, si el Señor se tarda y todos vivimos, cuando nos reunimos aquí el domingo, si podemos apartar el velo y tener un vistazo de lo que Dios ve, y si pudiéramos ver a todos los que de hecho van a estar en el cielo en este auditorio algún día. y aquellos que no van a estar en el cielo algún día. Lo que descubriríamos es que todas las personas en este cuarto, en este auditorio, que de hecho van a estar en el cielo, es alguien que tiene una fe genuina, una fe genuina en Jesucristo. Esto es lo que significa ser un cristiano. Alguien que ha venido a creer cosas muy específicas. Martin Lloyd-Jones dijo esto. Usted no puede ser un cristiano si no es por una cierta creencia. Lo que nos hace cristianos es que creemos en ciertas cosas. Un cristiano no es tan solo un hombre amable, un hombre bueno, un hombre al cual Le gusta ser un miembro de una iglesia cristiana, un hombre que está interesado vagamente en una moral alta e idealismo. Un cristiano es aquel que cree en ciertas verdades específicas, y la esencia de su creencia está centrada en la persona del Señor Jesucristo. Y por supuesto eso es exactamente correcto. En el libro de Santiago, en el libro de Santiago, Dios nos dice que tan importante esto es. Esta es la línea que divide entre alguien que tiene una forma de piedad o religión y alguien que realmente conoce al Señor. Hay una fe de amor de demoníaca. Hay una fe que no conoce obras en el sentido de lo que el Espíritu Santo produce. Y luego hay fe genuina y todo cristiano verdadero está al lado de la fe genuina. Y hay un montón de personas que dicen ser cristianos, que de hecho tienen esta fe demoníaca, muerta, sin frutos, sin obra. Así que la pregunta es si es que esta introducción, si este saludo realmente se aplica a usted. ¿Está usted? ¿Es usted un santo? ¿Está usted entre los fieles en Cristo Jesús? Hay dos puntos principales que quiero compartir con usted esta noche. El primero, acabamos de hablar de esto, y eso que un cristiano es fiel. Y el segundo es que la fe cristiana tiene ciertas características. Así que si el cristiano es fiel, ahora voy a preguntar, ¿soy yo? ¿Soy yo un cristiano? ¿Tengo esa fe? Esta fe de la que estamos hablando tiene ciertas características. Mientras que nos encontramos con esta fe en las escrituras, como dije la semana pasada, eso es lo que queremos hacer. No queremos definir a un cristiano de una manera personal. No queremos definir a un cristiano de una manera cultural. Tenemos que ver la palabra de Dios. Si sacamos nuestra definición y la descripción de un cristiano de la Biblia, y entendemos de que ellos son fieles, ¿cómo se va a ver eso? ¿Cuáles son las características de una fe genuina? Brevemente, déjame mencionar tres cosas acerca de este tipo de fe. Número uno viene de Dios. La fe que salva viene de Dios. Es un regalo de Dios. Si usted es un creyente esta noche, es porque Dios le ha dado gracia a usted. Dios le ha dado a usted este regalo de la fe. ¿Cómo lo hace Dios? Lo hace a través de la regeneración. La fe es el resultado del nuevo nacimiento. La fe es el resultado. Así que la fe que salva viene de Dios. La fe que salva es verdadera en la persona. No quiero que nos confundamos cuando decimos que la fe es un regalo de Dios. No estamos diciendo que Dios creyó por usted. Tampoco estamos diciendo que Dios le forzó a usted a creer. Más bien, lo que la Biblia enseña es que a través de esta obra de Dios en el alma, a través del nuevo nacimiento, lo que sucede es que a usted se le dio vida. La luz de Dios brilló en su alma de tal modo que usted puede ver lo que no podía ver antes. Ahora hay un deseo por Cristo. ¿Usted realmente creyó en él? Es su fe. Usted es el que creyó. Usted creyó en el Señor Jesucristo, pero debido a la obra de Dios en su alma, esa fe fue y es un regalo de Dios. Así que es un regalo de Dios, pero es verdadero en usted. Y esa fe que salva, que viene de Dios y es verdadera en la persona, siempre está siendo expresada en la vida. Encuentra su expresión ahora en este mundo. donde hay verdadera fe va a haber fruto, donde hay verdadera fe va a haber obras. El verdadero cristiano no está caracterizado por esa fe demoníaca y muerta, sino que por una fe viviente que es sobrenatural en términos de su fuente y su explicación. Así que hablamos de esa fe que viene de Dios como real en el cristiano y está expresada en la vida de en este mundo, en este momento. ¿Cómo podemos describir a esta fe desde la Palabra de Dios? Aquí está la primera manera en que lo describiremos. Donde hay fe genuina, el contenido es correcto. No malentienda, no estamos diciendo que los cristianos genuinos no pueden estar equivocados en doctrina. No estamos diciendo que cualquier persona que ahora se le está enseñando incorrectamente y creen ciertas cosas que no están exactamente correctas de acuerdo a las escrituras, que esa persona no puede ser un cristiano. Que para ser un cristiano, usted tiene que tener todas sus posiciones doctrinales correctas en todo lo que usted cree, si ese es el caso. Entonces, no tenemos ni un solo cristiano en este auditorio. Y eso incluye a su predicador esta noche. Me gusta lo que John MacArthur dijo hace años. Él dijo, yo sé que hay algo de lo que no estoy pensando correctamente, pero no sé qué es, porque si yo supiera de lo que es, me arrepentiría y cambiaría mi punto de vista. Así que es el tipo de humildad que más nos vale a nosotros tener. No hay nadie aquí que es infalible. Así que no estamos diciendo que cada cristiano tiene todo correcto. Pero lo que estamos diciendo es, y lo que la Biblia enseña, es que cualquier persona que es un cristiano es una persona a la que se le ha enseñado acerca de Cristo por Dios mismo. ¿Cómo usted vino a creer en el Señor Jesucristo? Dios, el Padre, le enseñó a usted acerca de su Hijo. Él lo hizo a través de la palabra de Dios. Lo hizo a través de la exposición que usted tuvo al evangelio. Pero es el padre a través de la obra del espíritu quien le iluminó, quien le dio entendimiento y comprensión con respecto a su plan de salvación y a su obra de salvación a través de la persona que le salva, quien es nuestro Señor Jesús. El padre nos enseñó acerca de su padre, de su hijo. Juan 6.44 dice, nadie puede venir a mí si no solo lo trae el Padre que me envió, y yo lo resucitaré en el día final. Escrito está en los profetas, y todos serán enseñados por Dios. Y en caso de que usted piensa que es alguna referencia futura, a lo mejor pensando acerca del reino y que algún día veremos a Jesús y Él va a ser el maestro de todos nosotros, escucha la siguiente declaración. Todo el que ha oído y aprendido del Padre viene a mí, dice Jesús. Esta es la explicación para lo que significa cuando el Padre dice que los atrae, como el padre atrae a alguien a su hijo, lo hace a través del conocimiento. lo hace a través de un entendimiento del evangelio, a través de la iluminación de la mente, a través de la palabra de Dios, lo que Dios ha revelado acerca de su hijo al mensaje que fue predicado. Y ahora tenemos escrito en la palabra de Dios para nosotros. Dios trae un entendimiento de la verdad que él ha revelado acerca de su hijo. Así que vinimos a Cristo cuando el Padre nos enseñó y porque el Padre nos enseñó. Tenemos un entendimiento claro y algunas cosas muy básicas que son necesarias conocer y creer para poder ser salvos. Hay algunas cosas básicas que usted tiene que saber para ser salvo. Bueno, ¿cuál es lo mínimo que uno tiene que creer para poder ser salvo? Bueno, uno tiene que creer la verdad acerca de Jesús. Tienen que creer la verdad acerca de su persona. ¿Quién era Jesús de Nazaret? ¿Quién es Él hoy, esta noche? Ellos creyeron la verdad acerca de su relación a la Trinidad. Han venido a conocer y a entender que hay un verdadero Dios y que Jesús es Dios. Él no solamente es una cara de Dios. No solamente es Dios más o menos manifestándose a sí mismo en una de tres caras, de tres modos, o tres formas. En este Dios hay tres personas distintas, y Jesús es el Hijo Eterno de Dios, y un cristiano es alguien que ha venido a entender eso, y a lo mejor de un nivel muy básico. No quiero que malentendamos de que antes de que sea salvo, son capaces de dar una teología sistemática acerca de la cristología. No, pero ellos entienden que Jesús es Dios y que Dios ha venido en la carne. Ellos creen que Jesús es Dios en la carne humana y que Él es el único salvador del mundo y que Él es el Señor. y que uno debe de someterse a él y uno debe de seguirle. Bueno, ellos no le hacen, señor. Mencionamos esto muchas veces. Un cristiano no es alguien que ha hecho a Jesús, señor, sino que es alguien que ha reconocido el señorío de Jesús y no están confiando en su sumisión para salvarles. No están confiando en el que le sigan a Jesús para salvarle. Ellos están confiando en aquel a quien se someten y siguen. Están confiando en Cristo. Dios le ha enseñado a ellos acerca de su hijo. A propósito, ¿acaso es esencial para ser cristiano que una persona crea de que Cristo es Dios en la carne humana? ¿Es eso absolutamente necesario para ser salvo? 1 Juan 2.22 dice, ¿Quién es el mentiroso sino el que niega que Jesús es el Cristo? Este es el anticristo, el que niega al Padre y al Hijo. Jesús, el hombre Jesús, es el Mesías. Esto es necesario para la salvación. La Biblia continúa diciendo que el que niega que Jesús ha venido a la carne, niega al Padre y al Hijo. Así que esto es necesario para la salvación. Así que ellos creyeron la verdad acerca de Jesús. Segundo, ellos creyeron la verdad acerca de la obra de Cristo, que fue lo que Jesús vino a hacer, que vino Él a lograr. somos aquellos que Él murió como un sustituto por nosotros en la cruz, lo que significa que nosotros conocemos y entendemos que somos pecadores y merecemos la penalidad del pecado, la cual es la muerte. Pero a nosotros se nos ha enseñado por Dios que Cristo derramó su sangre por nosotros y tiene suficiente valor y poder para lavar todos nuestros pecados y pagar por todos nuestros pecados. Y nosotros conocemos y creemos de que Él fue levantado de entre los muertos físicamente, corporalmente, y esa creencia en la resurrección es esencial. Mientras que Pablo le escribía a los corintios, si Cristo no fue levantado de entre los muertos, Todos somos de todas las personas. Somos dignos de lástima. Creímos una mentira. Si no fue levantado de entre los muertos, entonces todavía estamos en nuestros pecados. No hay perdón por los pecados y Cristo no fue levantado de entre los muertos. Así que entendemos la obra de la cruz y en su resurrección y que él ascendió al cielo y sabemos de que él va a regresar así como él se fue. Creemos en un regreso físico y corporal de Jesucristo a la tierra. Creemos en quien él es. Creemos en lo que él ha hecho. Tercero, un cristiano es alguien que ha creído la verdad acerca del amor de Cristo por ellos. En algún punto, para ser convertido, este conocimiento se vuelve personal. No solamente verlo más o menos como un estudiante que está sentado en una clase de historia y decimos yo creo estas diferentes declaraciones que se hicieron acerca de Jesús. No a algún punto no es Jesús es un salvador. Jesús murió por los pecados. Más bien es yo necesito a Jesús para que sea mi salvador. Y al decir que Él murió por los pecados, significa que Él murió por mí, si yo confío en Él, si yo confío en el Hijo de Dios. Ahí está la evidencia de que Cristo, de hecho, murió por mí. Él se dio a sí mismo por mí, escribe Pablo. Él se dio a sí mismo por mí. Así es como alguien es salvo. Esta es una cosa fabulosa en la que se puede pensar de que la obra de Cristo, su obra, todavía está continuando. Él todavía está obrando en el mundo. Me gusta cómo el libro de Hechos empieza. Hechos capítulo uno, verso uno. El primer relato que escribí, Teófilo trató de todo lo que Jesús comenzó a hacer y a enseñar. hasta el día en que fue recibido arriba después de que por el Espíritu Santo había dado instrucciones a los apóstoles que había escogido. Lucas dice que él está dando un relato de lo que Jesús empezó a hacer y enseñar. Él todavía está haciendo, todavía está enseñando. Él está trabajando a través de su iglesia, trabajando a través de su pueblo. Pero mientras que el Evangelio sale a través de los seres humanos, el Espíritu Santo está obrando en el mundo a través de la predicación del Evangelio y de esa manera que es lo que Cristo está haciendo. Él está alcanzando a los pecadores él mismo. Él está llamando a los hombres y a las mujeres a sí mismo. Así que no solamente como un creyente, yo vine a creer en quién Jesús es y lo que Jesús hizo para salvarme. Pero en algún punto, cuando yo escuché que el evangelio salvaba, yo vine a entender de que Jesús me ama a mí y se está ofreciendo a sí mismo a mí. Y Él está ofreciendo vida y perdón a mí. Así que un cristiano es alguien que ha venido a creer en el amor de Cristo por ellos. Hay otra manera en que podemos declararlo de las escrituras. Un cristiano hablando se acuerda acerca del contexto de lo que el contenido de lo que alguien cree cuando es salvo. A medida que esto está ahora relacionado a su propia vida, hay una cuarta manera en que podemos describirlo. Ellos creen. En qué erróneo cualquier otro camino es. No solamente están convencidos de su necesidad por gracia, pero un cristiano es alguien que entiende que Jesús es el único Salvador que se le ha dado a los hombres. Solamente hay un camino para llegar al Padre. Y es lo que Jesús dijo. Él es. Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie viene al Padre, sino por mí. Y un cristiano es alguien que está absolutamente convencido de eso. Y si usted toma todas estas cosas juntas, creer la verdad acerca de Cristo, acerca de su obra en la cruz, acerca de mí y mi necesidad por Dios y acerca de qué incorrecta y qué Y que incorrecto es otro camino que no sea el de Jesús. Así que yo confío en él. De lo que estamos hablando es arrepentimiento. Estamos hablando acerca de un cambio radical de mente y corazón que ha sido obrado en el pecador por el Espíritu Santo a través de la obra de la regeneración. Eso es lo que la salvación, la fe de salvación es. Así es como puede ser descrita. Así que donde hay fe genuina, existe este contenido que está presente. Segundo, hablando acerca de las características ahora de estos fieles, de cómo se ve la fe de ellos. Segundo, podemos decir esto donde hay fe genuina. El objeto es Cristo. La fe genuina no solamente tiene el contenido correcto, también tiene el objeto correcto. El objeto de la fe genuina no es un credo. no es fe en una declaración doctrinal, el objeto de la fe que salvan seguramente no somos nosotros. A propósito, nos advierto, este es un verdadero peligro que yo creo que los puritanos a veces tienen problemas con esto, lo cual es tanta examinación propia que si no tenemos cuidado, no estamos viendo a Jesús como empezamos a vernos a nosotros mismos. Está mi entendimiento correcto. Está mi arrepentimiento genuino. Es mi entendimiento claro. Es mi fe verdadera. Podemos empezar a examinarnos hasta el punto en que el objeto de nuestra fe casi se puede devolver a nosotros. El objeto de nuestra fe no somos nosotros. El objeto de nuestra fe no es una institución. No es una sea la iglesia y vaya al cielo. Cree usted en la iglesia? Esa no es. Ahí no es donde está la fe salvadora. Tampoco está estacionada en nuestro entendimiento de el contenido. He entendido yo realmente el evangelio. Lo tengo yo correcto. Se lo puedo explicar a alguien más. Ahí está. No es ahí donde se gana nuestra seguranza al decir que yo tengo la información correcta. No, el objeto de la fe genuina es una persona. y su nombre es Jesús. Somos salvos cuando creemos en Jesús, cuando ponemos nuestra fe en Él de una manera personal, de una manera relacional. Nosotros confiamos en el Hijo de Dios. No lo hemos visto, pero le amamos. No lo hemos visto, pero sabemos de qué Él es y confiamos en Él. Le damos nuestra vida a Él. Primera de Juan 5.2, el que tiene al Hijo tiene la vida. Y el que no, el que tiene al hijo. Hemos recibido al hijo. Usted tiene el hijo. Él tiene la vida. Siguiente declaración. El que no tiene al hijo de Dios no tiene la vida. Ahora usted no puede tener al hijo, si no es por querer el contenido correcto. Pero aún después de que usted haya recibido el contenido del evangelio, usted no puede ser salvo por simplemente decir ahí está el contenido. Usted tiene que ver lejos de usted a aquel. de quien el contenido ha hablado. Usted tiene que ver a Jesús mismo y confiar en Él. Spurgeon lo dijo muy bien. Dijo, un hombre puede decir, yo tengo fe, pero otra pregunta surge, ¿en qué tiene usted fe? Bueno, yo tengo fe en lo que he sentido. Entonces deshágase de ello, porque lo que usted ha sentido no es un objeto de fe, ni tampoco es digno de confianza. Yo tengo fe, dice otro, en las doctrinas que se me han enseñado. Me alegra que usted crea en ellas, pero recuerde, las doctrinas no son el salvador. Un creador no puede salvarle. Entonces, ¿cuál es el objeto de la fe? Es una persona que está viva, que es divina, que ha sido designada. ¿Y quién es esta persona? Es únicamente Jesús. Así que donde usted tiene personas fieras. Su fe puede ser descrita en términos del contenido de su fe. La fe genuina tiene el contenido correcto. Su fe puede ser descrita en términos de su objeto. La fe tiene el objeto correcto. Y su fe es en Cristo mismo. Tercero, donde hay fe genuina, hay afección. Hay afección. Bueno, yo no estoy tratando de deshacer lo que el Sr. Spurgeon acaba de decir. Yo estoy de acuerdo con lo que él dijo. Nuestra fe no está en lo que sentimos. Pero lo que estoy tratando de expresar aquí, que yo creo que las Escrituras enseñan claramente, es que cuando venimos a Cristo, es porque nosotros amamos a Cristo. Dios se ha trabajado en nuestros corazones a través del Evangelio de tal modo que nosotros deseamos a Jesús. le deseamos a él, lo queremos, lo amamos, y el amor en la Biblia no se trata acerca de lo que usted siente como en lo que usted escoge. Yo le prefiero a él sobre todas las demás cosas, como vimos el domingo en la mañana en la historia del joven rico. Y vimos que eso es imposible para los hombres. Solo es hecho posible por Dios. Dios es el que obra en el corazón de tal modo que nosotros decimos Jesús es el tesoro escondido en el campo. Jesús es la perla de gran precio. Jesús vale más para mí que relaciones familiares o lo que yo pueda poseer en este mundo en términos de cosas materiales. Jesús es mi vida. Yo le amo. Esto es cierto de los cristianos genuinos, de personas fieles. 1 Pedro 1.8 dice que, sin haberle visto, le amáis, y a quien ahora no veis, pero creéis en él, y os regocijáis grandemente con gozo inefable y lleno de gloria. Se da cuenta, es un gozo lleno del conocimiento de Dios. Y de hecho, 2 Corintios 4, este conocimiento ha brillado en su corazón por Dios, de tal modo que usted ve ahora esta gloria de Dios en el rostro de Jesús mismo. Usted no le ha visto con sus ojos, pero usted lo ha visto con los ojos de la fe. Usted sabe quién Jesús es por las páginas de la palabra de Dios, y usted creyó en Él, y usted le ama, y usted se regocija en Él. Efesios 6, 23 dice, paz sea a los hermanos y amor con fe. De Dios el Padre y del Señor Jesucristo, la gracia sea con todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo con amor incorruptible. ¿No es una manera asombrosa de referirse a los cristianos? Él empieza diciendo, paz sea a los hermanos. Esos somos todos nosotros si realmente creemos en Jesús. Y él termina diciendo que la gracia sea con todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo, con amor incorruptible. Es un amor que ha sido puesto en nuestros corazones por el Espíritu Santo. Es el mismo amor de Dios que se nos ha dado a nosotros como un regalo. Él nos amó a nosotros primero, pero aún nosotros le amamos a Él. Amamos a Jesús. Así que es donde sea que está esta fe de salvación. Tiene el contenido correcto, el objeto correcto y hay una afección que Dios ha producido a través del nuevo nacimiento. De tal modo que nosotros queríamos a Jesús, le deseábamos y ahora podemos decir que amamos a Jesús. Finalmente, la última cosa esta noche donde hay fe genuina. Hay voluntad, hay una decisión que se ha hecho. Hay un sentido en el que. Es absolutamente vital que entendemos, que entendamos lo que Jesús quiso decir cuando le dijo a sus discípulos Ustedes no me escogieron a mí, pero yo los escogí a ustedes. Necesitamos saber. Vamos a hablar acerca de esto el domingo a la mañana en el Evangelio de Lucas, la soberanía de Dios en la salvación. Tenemos que saber y entender que nuestra salvación viene toda de gracia. La historia aquí no es de que yo amo a Jesús. La historia es de que él me amó a mí. Él me amó, primero, Él me amó cuando yo no tenía ningún amor por Él. Pero cuando Dios trabaja en un alma para salvar a alguien, así como lo hace, Él no cree por ellos. En la misma manera, cuando Jesús da el mandamiento, sígame, Dios no sigue por nosotros, pero trabaja en nosotros de tal modo que nosotros sí seguimos a Jesús. Nosotros lo hacemos. Creemos en Él de tal modo que nosotros confiamos en Él. Creemos en Él de tal modo que nosotros le seguimos a Él. Todos los creyentes son fieles en que siguen a Jesús. Todos los creyentes son fieles en que ellos continúan siguiendo a Jesús a través de todos los problemas y todas las pruebas y las vicisitudes de la vida todavía siguen a Jesús. No tienen ningún otro lugar a donde ir. No tenemos ningún otro lugar a donde ir. El Señor nos ha iluminado de tal modo, nos ha enseñado de tal modo que ahora no tenemos ningún otro lugar a donde ir. ¿Conoce usted eso en su vida? ¿Sabe usted lo que se siente saber que Dios está aferrando a usted? que Él ha trabajado en su corazón de tal modo que usted no tiene ningún otro lugar a donde ir. Juan 6.66, Cristo ha estado enseñando algunas cosas difíciles y hay personas que se están apartando de Él en grandes números y se da la vuelta a sus discípulos y les pregunta a ellos si ellos también se quieren ir. Juan 6.66 dice esto, como resultado de esto, muchos de sus discípulos se apartaron y ya no andaban con Él. Entonces Jesús dijo a los doce, ¿Acaso queréis vosotros iros también? Simón Pedro le respondió, Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna. Me gusta eso. ¿Acaso no? Porque esa es su confesión ahora también. Si usted realmente conoce a Jesús, usted no tiene ningún otro lugar a donde ir. Colosians 1.22 dice, Y ahora él, sin embargo, él os ha reconciliado en su cuerpo de carne mediante su muerte a fin de presentaros santos sin mancha e irreprensibles delante de él, si en verdad permanecéis en la fe. bien cimentados y constantes, sin moveros de la esperanza del Evangelio que habéis oído que fue proclamado a toda la creación debajo del cielo, y del cual yo, Pablo, fui hecho ministro. da cuenta de la evidencia de que usted realmente se ha reconciliado con Dios a través de la muerte del Hijo de Dios. La evidencia de que usted va a ser presentado delante del Santo sin culpa y sin reproche. La evidencia es de que usted continúa en la fe establecida firmemente y no se aparta de la esperanza del Evangelio que usted escuchó, usted recibió y creyó. Así que padre, así que Pablo, en su saludo, nos está diciendo lo que veremos que se va a desarrollar a través de esta carta. ¿Qué significa el ser un cristiano? Significa que usted es un santo, que usted es alguien que ha sido sacado del mundo y ahora ha sido dedicado por Dios, ha sido santificado en ese sentido, santificado para Dios. Pero usted no solamente es un santo, también puede ser descrito como alguien que es fiel. Y cuando usted dice que todos los cristianos son fieles, lo que usted está diciendo es que todos los creyentes, todos son creyentes. y todos son lo mismo. El contenido es el mismo, el objeto es el mismo. El hecho de que ha sido trabajado en su vida individual de tal modo que ellos aman a Jesús, ese es lo mismo. Ellos siguen a Cristo y le seguirán todos los días de su vida, porque no tienen ningún otro lado a donde ir. Solamente Él tiene las palabras de vida eterna. Le pregunto a usted esta noche, ¿ese es usted? ¿Esa es su historia? inclinemos juntos para orar. Padre, oro por cualquier persona en este cuarto, mientras que escuchan estas cosas, reconocen que este no es el caso de ellos. Oro de que ellos se den cuenta aún esta noche, mientras que la verdad de tu hijo sale hacia adelante. de que ellos están siendo invitados a la predicación del evangelio. Pero aún más que eso, ellos están siendo. Se les da una orden de poner su fe y su confianza en tu hijo. Y señor, tú declaras de que el día para hacer esto es hoy. Este es el día para la salvación, este es el día. para confiar en Cristo y ser perdonado. Este es el día para confiar en Cristo y vivir. Y oro por cualquiera que no conoce verdaderamente a tu Hijo en este cuarto, que ellos reconozcan su verdadera condición esta noche y confíen en Jesús. Y oro por todos nosotros, Señor, que por tu gracia hemos confiado en tu Hijo. Señor, que podamos ser recordados esta noche de que tú hiciste esto. de que nuestra historia es la historia de tu gracia. Nuestra historia es la historia de tu misericordia y amor. Nuestra historia es la historia de el buen pastor, el buen pastor de las ovejas, quien vino a este mundo para buscar y salvar a los perdidos, que vino a este mundo para entregar su vida para sus ovejas. Podemos ver 2000 años atrás y decir que ahí es cuando Jesús vino al mundo para salvarme a mí. Yo oro Señor de que escuchemos estas cosas en ese tipo de manera personal y reconozcamos lo que tú has hecho en nuestro propio caso. Y nos demos cuenta de que esto nos llama a tener un celo. Lo hizo para que podamos ser un pueblo de tu propia posesión que somos celosos para las buenas obras. Señor, por favor, ayúdanos a no deshonrarte con una respuesta mediocre a las cosas gloriosas que tú has hecho por nosotros. Señor, donde sea que nos encontremos espiritualmente adormentados y perezosos, oh, avive en nosotros un conocimiento del Evangelio. Pedimos estas cosas en el nombre de Jesús. Amén. Pongámonos de pie juntos.