Muy buenos días, mis amados hermanos, que la paz y la gracia de nuestro Señor Jesucristo esté con cada uno de vosotros. Si tienen la bondad, abran sus Biblias en la carta de los hebreos. Hebreos capítulo 8, estaremos cubriendo algunos versículos en la mañana de hoy. Hebreos capítulo 8, continuamos nuestro estudio expositivo después de un tiempo estar fuera de él, pero regresamos nuevamente a esta preciosa y poderosa carta Hebreos. Hebreos capítulo 8, vamos a estar leyendo los versículos 1 al 13 para tener contexto de lo que vamos a estar estudiando en esta mañana y he titulado este mensaje la superioridad del nuevo pacto, la superioridad del nuevo pacto. Hebreos capítulo 8 versículo 1 al 13, así dice la perfecta inerrante palabra de Dios, Hebreos 8 versículo 1. Ahora bien, el punto principal de lo que se ha dicho es este, tenemos tal sumo sacerdote que se ha sentado a la diestra del trono de la majestad en los cielos como ministro del santuario del tabernáculo verdadero que el señor erigió y no el hombre porque todo sumo sacerdote está constituido para presentar ofrendas y sacrificios por lo cual es necesario que este sumo sacerdote también tenga algo que ofrecer Así que si él estuviera sobre la tierra ni siquiera sería sacerdote, habiendo sacerdotes que presentan las ofrendas según la ley. Hebreos 8, versículo 5, los cuales sirven a los que es copia y sombra de las cosas celestiales, tal como Moisés fue advertido por Dios cuando estaba a punto de erigir el tabernáculo. Pues dice él, haz todas las cosas conforme al modelo que te fue mostrado en el monte. Versículo 6 de capítulo 8 de Hebreos, pero ahora Jesús ha obtenido un ministerio tanto mejor, por cuanto Él es también el mediador de un pacto establecido sobre mejores promesas, pues si aquel primer pacto hubiera sido sin defecto no se hubiera buscado lugar para el segundo. porque reprochándolos dijo, él dice miren que vienen días dice el señor en que estableceré un nuevo pacto con la casa de Israel y con la casa de Judá no como el pacto que hice con sus padres el día que los tomé de la mano para sacarlos de la tierra de Egipto porque no permanecieron en mi pacto Y yo me desentendí de ellos, dice el Señor. Porque este es el pacto que yo haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice el Señor. Pondré mis leyes en la mente de ellos y las escribiré sobre sus corazones. Y yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo. Y ninguno de ellos enseñará a su conciudadano, de ninguno a su hermano, diciendo, Conoce al Señor porque todos me conocerán desde el menor hasta el mayor de ellos. Versículo 12 Pues tendré misericordia de sus iniquidades y nunca más me acordaré de sus pecados. Versículo 13 Cuando Dios dijo un nuevo pacto hizo anticuado el primero y lo que se hace anticuado y envejece está próximo a desaparecer. Hermanos, nos encontramos aquí en el corazón del autor de Los Hebreos y le recordamos a todos aquellos que han estado con nosotros, que no han estado con nosotros, que el tema principal de esta poderosa carta es uno y es ese, la superioridad de Jesucristo. Jesucristo es preeminente, ese es el tema central de esta crístola. y por lo tanto nosotros como creyentes respondemos a esta carta ¿Cómo? Con fe, con fe. Si Jesucristo es superior a todo y sobre todo confía en Jesucristo, pon tu fe en Cristo Jesús y si no eres creyente esta carta te invita a que, a que te arrepientas y ponga toda tu fe en Cristo Jesús. No hay nada más importante mis amados hermanos en esta vida y tampoco por la que está por venir, no hay nada más importante de que tú tengas una relación íntima personal con nuestro amado Salvador y Señor Jesucristo. No hay nada más importante. ¿Usted cree que lo hay? No lo hay. De hecho la pregunta de las preguntas la hizo el mismo Señor Jesucristo a sus discípulos, se recuerdan allá en Marcos 8.36 donde dice ¿De qué le sirve al hombre ganar todo el mundo entero y al final qué? perder su alma. Esa es la pregunta de las preguntas que hizo el gran maestro Jesús. ¿De qué te vale a ti en tu vida cumplir todos tus sueños, todos tus deseos, hacer la mayor cantidad de dinero posible, ser rico, lograr todas tus metas y al final de tu vida mueres sin Cristo? ¿De qué te sirve? vivir sin Cristo es una vida perdida. No importa cuán rico seas, no importa la carrera que tengas, vivir sin Cristo es una vida perdida. No importa si alimentas a todos los huérfanos o atiendes a todas las viudas del mundo, por más buenas que sean tus obras, si mueres sin Cristo es una vida desperdiciada. y eso es lo que el autor de los hebreos está aquí tratando de comunicar a su audiencia, de que Cristo es preeminente, es superior y por lo tanto amados hermanos pongan toda su fe, toda su confianza en él. El Evangelio de Jesucristo no sólo provee perdón de pecados y vida eterna, sino que también te sostiene en esta vida presente. estás pasando por un momento muy difícil en tu vida, en este momento, confía en Cristo, confía en el Señor Jesucristo. No importa por lo que estés pasando ahora en tu vida, pon toda tu fe en Dios y Cristo es suficiente para tu vida y para tus circunstancias, por lo tanto confía en Él. y como parte de la superioridad de Jesucristo, aquí en los capítulos 8 y 9 de la carta de los hebreos, el autor nos muestra la superioridad de Jesucristo a través de un mejor pacto. Vieron que su Biblia tiene dos partes, Antiguo Testamento, Nuevo Testamento, Antiguo Pacto, Nuevo Pacto y eso es lo que vamos a estar estudiando en el día de hoy. aquí en el capítulo 8 veremos 8 características de la superioridad del nuevo pacto que te ayudará a ser más fieles al Señor, 8 características de la superioridad del nuevo pacto que nos ayudará a ser más fieles al Señor y la primera característica la vamos a ver en los versículos 1 al 5. ¿Cuál es esa? Es que este nuevo pacto posee un santuario celestial, este nuevo pacto posee un santuario celestial. Observen el versículo dice ahora bien, el punto principal de lo que se ha dicho es este, tenemos tal sumo sacerdote que se ha sentado a la diestra del trono de la majestad en los cielos y vamos a ir despacio, tal vez hoy vamos a cubrir unas pocas características, porque es muy importante que entendamos este nuevo pacto. yo quiero que usted esté completamente seguro de lo que es el Evangelio de Jesucristo y el nuevo pacto. El antiguo pacto poseía ¿Qué? Un santuario terrenal, pero este nuevo pacto ahora posee un santuario celestial. Ahora este nuevo sacerdote Jesucristo opera desde un santuario celestial ministrando por cada uno de nosotros y ya mismo lo vamos a ver. Observen esa frase ahí en el versículo 1, el punto principal, esto es el punto central, o sea ¿Qué es lo más importante que el autor viene hablando en estos primeros 7 capítulos?, ¿se recuerda? El sumo sacerdocio de Jesucristo, este es el punto principal de lo que se está hablando ahora dice el autor. en Hebreos capítulo 3 versículo 1 ¿Se recuerdan? Donde nos habló, por tanto hermanos santos participantes del llamamiento celestial, consideren a Jesús el apóstol y sumo sacerdote de nuestra fe. en hebreos capítulo 4 versículo 14 dice el autor teniendo pues un gran sumo sacerdote que trascendió los cielos Jesús el hijo de Dios porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas sino uno que ha sido tentado en todo como nosotros pero sin pecado, versículo 16, por tanto acerquémonos con confianza al trono de la gracia para que recibamos misericordia y hallemos gracia para la ayuna oportuna. Hebreo 5, versículo 5 dice de la misma manera Cristo no se glorificó el mismo para hacerse sumo sacerdote. Hebreo 6, 20 Jesucristo dice dice Jesucristo es el sumo sacerdote según el orden de Melquisedec, o sea del sumo sacerdote para siempre, eternal y Hebreo 7.26 la última que estudiamos Hebreo lo vimos también donde dice porque convenía que tuviéramos tal sumo sacerdote santo, inocente, inmaculado, apartado de los pecadores y exaltado más allá de los cielos. Entonces, ¿Cuál ha sido el punto principal hasta el capítulo 8 de los Hebreos? La superioridad de Jesucristo como el sumo sacerdote, no hay otro tema, de hecho ese es el tema de los temas. No necesitamos otros sacerdotes en esta tierra ¿verdad?, ¿Por qué?, porque en Cristo Jesús tenemos el único sumo sacerdote y él solo es suficiente y su santuario es un santuario celestial en la segunda parte del versículo 1 que se ha sentado a la diestra del trono de la majestad en los cielos ¿Ustedes escucharon bien esa frase lo que acabamos de leer? ha sentado a la diestra del trono de la majestad en los cielos. Esto es fascinante hermanos, podemos terminar la clase en esta mañana, cerrar nuestras Biblias y irnos para nuestras casas con esta oración, pero no lo vamos a hacer. dice primero observen que se ha sentado y usted dirá pero hermano ¿Qué importancia tiene que haberse sentado en este texto? Bueno tiene todo el sentido, hermanos recuerden que en el antiguo pacto el sumo sacerdote continuaba constantemente haciendo ¿Qué? Haciendo sacrificios día y noche, día tras día por los pecados del pueblo ¿Verdad? Constantemente ese templo en el área donde se presentaban los sacrificios, aquello era una carnicería, estaban todos bañados en sangre constantemente, no habían sillas, tanto en el tabernáculo cuando estudiamos en Éxodo, también como en el templo no había sillas, porque el sumo sacerdote no tenía tiempo, ni había sillas, ni podía sentarse porque estaba constantemente ofreciendo todos estos sacrificios que no eran eficaces, que no eran eficaces. esos sacrificios sólo apuntaban a que al sacrificio perfecto de Cristo Jesús como se iba a revelar en el Nuevo Pacto, en el Nuevo Testamento. No habían sillas en el tabernáculo o en el templo, pero no con nuestro gran sumo sacerdote Jesucristo. Dice el texto que Él se sentó, ¿Por qué Él se sentó? Número porque el sacrificio fue perfecto, un solo sacrificio, un solo acto, un solo sacrificio una vez y para siempre. ¿Se recuerdan en la cruz? Cuando el Señor Jesucristo estaba en la cruz a punto de morir ¿Qué fue lo último, una de las cosas últimas que dijo? Consumado es, consumado es, finalizado Hermanos y esto debe traer paz a nuestros corazones, saber que el sacrificio de Cristo fue aceptado por Dios el Padre y es completamente suficiente para perdonar todos nuestros pecados, pasado, presente y futuro. Descansamos en la obra de Cristo, no hay no solo Cristo se sentó, pero vean donde se sentó, se ha sentado a la diestra del trono de la majestad de los cielos. ¿Qué significa esto? Este, para que usted sepa, este lugar donde está Cristo actualmente sentado ahora mismo, presente, es el lugar más preeminente que existe en toda la creación, en todo el universo. No hay un sitio más alto, de más alto honor que la diestra del Padre y Cristo está sentado sentado ahí. Este es el lugar de más prestigio en el cielo, ese es el único lugar donde el Rey de Reyes y Señor de Señores puede sentarse, nadie más y es ahí que está nuestro amado Salvador y Señor Jesucristo. y ¿Por qué está ahí? Por su muerte en la cruz, por su muerte en la cruz, por su sacrificio perfecto que apacivó toda la ira de Dios el Padre para el perdón de pecados y vida eterna de sus escogidos y Dios se les ocupa ese lugar majestuoso que existe. Esto es maravilloso hermanos, ¿Por qué?, porque esto demuestra que la suficiencia, la supremacía y la soberanía absoluta de Cristo, ¿Escuchó bien? Entonces esto lo hace hacer ¿Quién? Dios mismo, Jesucristo es Dios, fue 100% hombre y es 100% Dios, suficiente, supremo y soberano sentado a la diestra del Padre. Ahora, la pregunta que nos hacemos ¿Y qué hace el Señor Jesucristo sentado a la diestra del Padre, aparte de ser Dios suficiente, Dios supremo y Dios soberano? ¿Qué hace? Romanos 8.34, el apóstol Pablo nos lo recuerda muy bien y esto, escuchen bien esto hermanos, porque esto es precioso, dice Pablo en Romanos 8.34. Cristo está sentado a la diesta del Padre intercediendo por nosotros en el presente, ahora mismo. ahora mismo que está haciendo el Señor Jesucristo intercediendo por usted y por mí. ¿Qué quiere decir esto? Ahora en tu peor momento de tu vida, donde todo es negro en tu vida, donde todo es una decepción en tu vida, ¿Quién está intercediendo por ti? Jesucristo, ahora cuando te va todo bien en tu vida, cuando te va todo bonito, ¿Quién está intercidiendo por ti en este momento al lado del Padre? Jesucristo, Jesucristo observa en el versículo 2 ahí en Hebreos, como ministro del santuario y del tabernáculo verdadero que el Señor erigió, no el hombre. el Señor está que ministrando en ese santuario celestial. El santuario en el cual Cristo es ministro es superior a los demás santuarios que existieron en el antiguo pacto. Vamos a darle un poco de contexto, en el antiguo pacto el tabernáculo estaba hecho con piel de animales ¿se recuerdan? Mientras que en el templo, los materiales del templo eran hechos con cedro, oro y mármol blanco, pero por más bello que fue ese templo en cedro, oro y mármol, ¿Qué pasó con ese templo? Fue destruido en el año 70 por los romanos, era temporero fueron santuarios temporeros, pero no así el santuario celestial de Jesucristo, ese no se pone viejo, ese nadie lo puede destruir y ese es el que siempre está ministrando por usted. El sacerdocio terrenal del antiguo pacto era sólo una que una sombra del sacerdocio celestial de Cristo que podemos ver en el nuevo pacto, y el Señor se encuentra actualmente ministrando en ese santuario celestial como lo vemos ahí en el versículo 3, vean el versículo 3 dice, porque todos somos sacerdote está constituido para presentar ofrendas y sacrificios por lo cual es necesario que este sumo sacerdote también tenga algo que ofrecer. No se crea bajo ninguna circunstancia que el Señor Jesucristo se encuentra en el cielo haciendo nada. Ese es otro de los ministerios de la segunda persona de la Trinidad del Cristo glorificado como sumo sacerdote está intercediendo constantemente por usted y por mí. el antiguo pacto, vimos que las ofrendas y los sacrificios de una manera en el capítulo 5 de Hebreo, en el antiguo pacto el sumo sacerdote tenía que administrar presentando ofrendas y los sacrificios y les recuerdo que son dos cosas diferentes, las ofrendas eran una cosa y las ofrendas y los sacrificios eran otra cosa. Las ofrendas se refieren a las ofrendas de comida y los sacrificios a las ofrendas de sangre. Las ofrendas de comida se entregaban ¿para qué? Para representar la dedicación y el compromiso y la acción de gracias personales con el Señor. Las ofrendas de sangre o los sacrificios eran ¿para qué? Para limpiar el pecado. y los sacerdotes tenían la responsabilidad de ofrecer estas dos ofrendas constantemente. Ninguna persona común en el antiguo pacto podía hacer esto, solamente el sumo sacerdote y sólo ellos podían hacer estas ofrendas. Bueno ya vimos que Cristo cumplió con la ofrenda del sacrificio de sangre ¿verdad? Una vez y para siempre Cristo murió una sola vez y ofreció esa ofrenda de sangre. Pero todavía actualmente, Jesucristo continúa presentando las ofrendas de compromiso y de acción de gracias personales ante Dios el Padre. Jesucristo ahora en el presente se encuentra ministrando estos dones de acción de gracia por nosotros delante de su padre. Así como los israelitas, escuchen bien, así como los israelitas necesitaban al sumo sacerdote para presentar sus ofrendas y sacrificios a Dios, hermanos así también la iglesia, nosotros necesitamos a Jesucristo ¿para qué? para que presente estas ofrendas de acción de gracia en nuestro lugar. En primer lugar necesitamos confesar nuestro pecado ¿verdad? Hasta el sumo sacerdote y poner toda nuestra fe en Cristo para ser sano. La única forma que nos podemos acercar a Dios y escuche bien, la única forma que nos podemos acercar a Dios es únicamente por la gracia soberana de Dios, únicamente sólo por el sacrificio de Jesucristo, únicamente por el sumo sacerdote que se encuentra a la diestra del Padre el Señor Jesucristo. Y en segundo lugar, como cristianos, escuchen bien hermanos, todo lo que nosotros hacemos día a día debemos hacerlo por medio de nuestro Señor Jesucristo, como nos dice Pablo en Colosenses 3, 17. Y todo lo que hagan de palabra o de hecho, hágalo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias por medio de Él, a Dios el Padre. Entonces, ¿Cómo se aplica esto en nuestra vida?, escuchen bien porque esta es la parte interesante. necesitamos un sumo sacerdote ¿verdad? Y lo tenemos en Cristo Jesús, actualmente Él está ministrando por cada uno de nosotros. Toda, escuche bien esta parte, toda nuestra obediencia imperfecta, toda nuestra adoración manchada por el pecado, toda nuestra alabanza contaminada y corrupta con nuestro pecado, vieron que a veces queremos adorar a Dios de una manera perfecta y no podemos por la contaminación del pecado en nuestra vida, todo eso, toda la dedicación, todas las acciones de gracia que venimos darle a Dios deficientemente, Cristo y sólo Cristo nuestro gran sumo sacerdote las presenta perfectas ante Dios el Padre en su ministerio como el sumo sacerdote. Reflexionen en eso en un momento hermanos, reflexionen en eso. Un sumo sacerdote terrenal no podía hacer eso, porque él mismo estaba contaminado con el pecado. pero no Cristo Jesús, debido que el Señor es tres veces santo y está sentado en el lugar más alto de honor, sólo Él puede interceder con esa perfección ante Dios el Padre en el trono celestial por ti y por mí. Esto debe traernos paz en nuestras vidas ¿verdad? Cuando pecamos aún como cristianos que le fallamos al Señor, no le agradamos al Señor cuando queremos somos infieles aún como cristianos ¿verdad? Y nos sentimos mal porque el Espíritu Santo nos convence, pero ¿Qué está haciendo el Señor Jesucristo ante el trono celestial? Intercediendo de una manera perfecta por usted y por mí. ¡Gloria a Dios por Jesucristo por los siglos de los siglos! ¿Verdad hermanos? Este es nuestro sumo sacerdote que constantemente está ministrando por usted en el trono, en el santuario celestial y todo lo hace desde su santuario celestial, no de un santuario ternal, vean los versículos 4 y 5. Así que si él estuviera sobre la tierra ni siquiera sería sacerdote, habiendo sacerdotes que presentan las ofrendas según la ley, los cuales sirven a lo que es copia y sombra de las cosas celestiales tal como Moisés fue advertido por Dios cuando estaba a punto de erigir el tabernáculo, pues dice él haz todas las cosas conforme al modelo que te fue mostrado en el monte. qué pasaría si el templo judío estuviera hoy ¿verdad?, construido, si siguiera en pie. Cristo ni siquiera fuera sacerdote, ¿Por qué?, porque no podría ministrar a nuestro favor bajo los términos del antiguo pacto. Recuerden que el templo fue destruido por los romanos en el año 70 antes de Cristo, y tanto el tabernáculo como el templo eran solamente, esta es la clave, una figura, un modelo, una sombra, una copia del verdadero santuario donde iba a estar ministrando nuestro amado Señor Jesucristo. Una sombra no tiene sustancia, una sombra no tiene existencia en sí misma. Cuando los rayos del sol caen sobre un árbol, tú puedes ver la sombra del árbol, pero la sombra del árbol no es el árbol, es simplemente su sombra. Exactamente así era este antiguo pacto, mostrando la sombra de lo que había de venir. Entonces, nos podemos preguntar en esta mañana ¿Qué es mejor?, el antiguo pacto o el nuevo pacto? Es la pregunta que nos hacemos y la respuesta es obvia ¿verdad? Sin lugar a dudas el nuevo pacto es mucho mejor ¿Por qué? Porque en este nuevo pacto ahora tenemos a un gran sumo sacerdote que es eterno, que es perfecto, que está sentado como un rey de reyes y señor de señores a la diestra de Dios el Padre. ¡Amén! ¡Gloria a Dios por eso! ¡Gloria a Dios por Jesucristo! Este es el nuevo pacto que tenemos gracias por medio de su muerte y resurrección. Es un mejor pacto y así que el nuevo pacto es superior porque es un pacto que posee un santuario celestial. Veamos una segunda característica y lo vamos a dar aquí en el día de hoy, una segunda característica, después seguimos con las otras. Y una segunda característica de la superioridad del nuevo pacto que nos motiva a ser más fieles al Señor, la vemos en los versículos 6 y 7, versículos 6 y 7, simplemente el nuevo pacto es mucho mejor. es un mejor pacto, vean observen el versículo 6, el nuevo pacto es mucho mejor, observen el versículo 6. Pero ahora Jesús ha obtenido un ministerio tanto mejor, cuanto él es también el mediador de un mejor pacto establecido sobre mejores promesas, mejores promesas. Ya vimos que el asiento y el santuario son superiores porque Jesús está ahí y son evidencia de un ministerio superior, por lo tanto su ministerio superior muestra un pacto superior, un pacto mejor. y entonces esto lo lleva a ser un mejor mediador del pacto. Esa palabra mediador, ¿Qué significa esa palabra mediador? En el original quiere decir alguien que está entre dos personas para unirlas ¿verdad? Alguien así como un intermediario en medio de un conflicto, cuando hay un conflicto de ambas partes hay un intermediario, eso es un mediador. Muchas religiones falsas tienen sacerdotes que tratan ser mediadores entre Dios o Diosos y el hombre ¿verdad? Ningún sacerdote terrenal puede llevar a un hombre contaminado y sucio por su pecado ante un Dios que es tres veces santo y puro. y usted dirá pero hermano Andrés, entonces ¿Qué hacen todos esos sacerdotes católicos romanos o esos sacerdotes de otras religiones? Bueno esos son sacerdotes falsos, sacerdotes falsos perdiendo el tiempo ellos y haciéndole perder el tiempo a los demás. ciego, guía de ciegos, sepulcros blanqueados que por fuera lucen hermosos pero por dentro están llenos de huesos muertos tratando de guiar a otros muertos ¿a dónde?, hacia su sepulcro. Ninguna religión, déjeme escucharla bien, ninguna religión te puede unir con Dios el ninguna y usted dirá pero y todas esas religiones que existen, musulmanes, judaísmo, te estoy diciendo en esta mañana que ninguna de ellas te pueden unir a Dios al creador, ninguna de ellas. ¿Por qué?, porque todas esas religiones están contaminadas. y no pueden salvar de este gran conflicto que tiene el hombre. Usted y yo tenemos un problema muy grande y ese problema ¿Cómo se llama? Pecado, pecado. Todos, dice Romanos 3.23 por cuanto todos pecaron, todos están destituidos de la gloria de Dios, el estándar es la gloria de Dios, la perfección absoluta de Dios y todos nosotros hemos fallado. Dice la Biblia que no hay justo ni a un uno, no hay nadie quien entienda, no hay nadie quien busque a Dios. Usted dice no yo estoy buscando a Dios. Usted no está buscando a Dios, porque la Biblia dice nadie busca a Dios, es Dios el que tiene que buscar a uno. no, pero es que yo soy bueno. La Biblia dice que no hay nadie quien haga lo bueno, no hay tan siquiera uno, somos por naturaleza malos y la paga ese pecado que es según la Biblia muerte, muerte, muerte física, muerte espiritual y muerte eternal. y la Biblia dice en el Salmo 111 que Dios es un juez justo y que está indignado cada día contra el impío. Déjame decirte una cosa bien clara en esta mañana, si tú estás sin Cristo en esta mañana, tú estás en guerra con Dios y no sólo eso, Dios está en guerra contigo, de acuerdo al Salmo 111. Hay un conflicto, hay un conflicto ¿Qué necesita para resolverse el conflicto entre Dios y el hombre? Un mediador, un mediador y eso es exactamente lo que está haciendo el autor aquí presentando a este divino mediador, a un mediador verdadero que te acerca a Dios y ese único mediador se llama ¿Quién? Jesucristo, el único mediador del mejor pacto, del nuevo pacto, no hay otro mediador aparte de Jesucristo, no hay un sacerdote que te pueda acercar a Dios, no existe, no lo hay, pero hermano Andrés que usted me dice el judaísmo, del budismo, de todas esas religiones, ninguna te sirve para nada, porque ninguna de ellas tienen un mediador perfecto, verdadero. como es Cristo Jesús. Dice I Timoteo 2.5, porque hay un solo Dios y también un solo mediador entre Dios y los hombres, Cristo Jesús hombre. Y déjeme decirle que tú no puedes venir bajo tus términos a este mediador, tú tienes que venir en los términos del mediador. debes reconocer que eres un pecador, debes reconocer de que amas tu pecado, debes reconocer que amas más a este mundo y debes entender también de que Cristo murió por tus pecados conforme a las escrituras, fue sepultado y resucitó al tercer día conforme a las escrituras. y que si confiesas con tu boca que Jesús por Señor y crees en tu corazón que Dios lo resucitó entre los muertos, entonces serás ¿Qué? Salvo. No hay otro medio. Cuando tú haces esto en tu corazón y abandonas totalmente tu pecado y te vuelves totalmente a Cristo y vives para Cristo y obereces a Cristo, entonces este gran mediador te acerca a Dios el Padre. Ahora, yendo terminando, en el antiguo pacto vemos que de cierta manera los israelitas fueron mediadores de Dios, los sacerdotes también fueron de alguna manera mediadores de Dios, incluso los profetas del antiguo testamento fueron en alguna manera mediadores de Dios, pero todos ellos eran sólo copias, sombras, figuras de lo verdadero que estaba por venir, todo esto eran una copia de Jesucristo y observen que el nuevo pacto no sólo tenía un mejor mediador, sino que también tenía al final del versículo 6 ¿Qué? Mejores promesas, se pone mejor esto, mejores promesas. Siempre que estudiamos los pactos en las escrituras hermanos, siempre estemos buscando las promesas, porque las promesas son la base de estos pactos. A veces esas promesas son condicionales, ¿me explico? Cuando vemos el pacto moisaico, el pacto moisaico era un pacto condicional, si el pueblo de Dios obedecía, si Israel obedecía a Dios ellos eran ¿Qué? Bendecidos, pero a la misma vez si el pueblo de Dios desobedecía a Dios eran ¿Qué? Venía disciplina y juicio, era con esa condición de obediencia. Ahora hay otros pactos que son incondicionales como el pacto abrahámico, que significa este, independientemente de lo que hiciera Abraham, ya Dios le había prometido que le iba a dar ¿Qué?, unas tierras, una gran nación y que iban a ser de gran bendición a otras naciones. Otra palabra para la palabra pacto es testamento, vieron en su Biblia que tienen el antiguo testamento y el nuevo testamento, el antiguo pacto y el nuevo pacto. Esa palabra en el original significa que es un es como un contrato entre ambas personas, un contrato entre ambas personas, una alianza entre dos o más personas y cada pacto viene con sus promesas y cada pacto viene con sus promesas. Ahora debemos entender de que estas promesas, de que son estas promesas que está hablando aquí el autor en el versículo 6. Primero déjeme explicarle lo que no significa estas promesas como mucha gente en la iglesia cree. ¿Ok? Algunos creen que estas promesas del nuevo pacto son bendiciones materiales, bienestar y salud. se creen que son bendiciones materiales y bienestar y salud y aunque si Dios te puede bendecir con bendiciones materiales, bienestar y salud según su gracia común, las promesas del nuevo pacto son mucho mejores que estas, son trascendentales, son en otras palabras bendiciones espirituales y déjeme mostrarle una rápido para ir concluyendo. en Ezequiel capítulo 36, Ezequiel capítulo 36 vamos a ver una muestra con claridad de estas promesas, en Ezequiel 36 específicamente los versículos 26 y 27. estas promesas de Dios que él llama mejores y hermanos vean, escuchen, vean la perfección en la palabra de Dios. El Espíritu Santo por medio del profeta Ezequiel 593 años antes del nuevo pacto de Cristo, escuche bien lo que dice el Espíritu Santo por medio de Ezequiel, Ezequiel 36, 26, 27. Además les daré un corazón nuevo, ¡bum!, ahí está la primera, un corazón nuevo y pondré un espíritu nuevo dentro de ustedes. La segunda, quitaré de su carne el corazón de piedra y les daré un corazón de carne, pondré dentro de ustedes mi espíritu y haré que andan en mis estatutos y que cumplan cuidadosamente mis ordenanzas. este es el nuevo pacto hermanos y esto es maravilloso ¿Por qué?, ¿Por qué es maravilloso este nuevo pacto?, ¿Por qué?, porque no depende de nosotros, no depende nada de nosotros, es totalmente depende de Dios, es un pacto, es un pacto incondicional, no depende de nuestra obediencia, no depende nuestra desobediencia y gloria a Dios por eso ¿verdad?, porque ¿cuánto le desobedecemos al Señor constantemente? Ese nuevo pacto no tiene, no depende de nuestra desobediencia, claro esta promesa aquí está en el contexto del pueblo de Israel, pero también aplica a la iglesia. Dios en su gracia soberana por medio del Espíritu Santo a través de su palabra regenera a pecadores muertos e independientemente si ellos quieren o no y ahora en el nuevo pacto Dios hace una completa renovación espiritual, en primer lugar ¿Qué hace? Te limpia del pecado, en segundo lugar te quita el corazón duro de piedra y te pone uno de carne Número 3 su espíritu viene a residir en ese nuevo corazón de carne y ahora está dispuesto a adorarle y no solo eso, en cuarto lugar ahora el espíritu santo que mora en el interior de un corazón regenerado le permite ahora andar en obediencia. ¿Vieron eso en el nuevo pacto? a un verdadero creyente usted no tiene que empujarlo, usted no tiene que empujarlo a obedecer o que vaya a la iglesia ¿Por qué? Porque el Espíritu Santo se encarga de eso. Dios, muchachos míos, a veces estoy yo arrastrándolos para que vengan para la iglesia y no quieren venir. Un creyente verdadero, el Espíritu Santo lo convence. Regenerado, viene corriendo a escuchar la palabra de Dios. Y así funciona la regeneración en el nuevo pacto. El nuevo pacto es un pacto superior al antiguo pacto. Y por eso Dios nos ha dado este mejor pacto, regresando a Hebreos capítulo 8, versículo 7, terminando. Observen, dice, pues si aquel primer pacto hubiera sido sin defecto, no se hubiera buscado lugar para el segundo. No era, terminando, que el antiguo pacto era falso, el antiguo pacto era verdadero, ¿verdad? ¿Pero qué pasa? El problema con el antiguo pacto que tenía defectos, como vemos en el versículo 7. El antiguo pacto tenía sus defectos y limitaciones. Ya el profeta Jeremías lo había profetizado en 580 años antes de Cristo, lo leímos en la lectura pública de la palabra en Jeremías 31, de esto que tenía limitaciones y defectos y que entonces le habían prometido un nuevo pacto. Lo que el autor está diciendo aquí es lo siguiente, sus mismas escrituras afirman los defectos y limitaciones del antiguo pacto, por eso necesitan un mejor pacto y deberían estar esperando un nuevo pacto y no aferrarse al antiguo pacto y es triste hermanos ¿verdad? ¿Por qué?, porque hoy día vemos muchos judíos en los últimos 2000 años, los judíos aferrados a qué?, a ese antiguo pacto. Cuando ya Jeremías en las escrituras había dicho, ese pacto tiene defectos y va a ser cambiado, incluso hoy día, muchos judíos continúan aferrados al antiguo pacto. Usted va a predicarle el nuevo pacto y ¿Qué hacen con usted?, ¡Uh!, sale corriendo, ¿verdad? Están aferrados a ese antiguo pacto. No solamente eso, hoy muchos evangélicos, muchos evangélicos hoy días, lo he visto en muchas iglesias, todavía siguen aferrados a leyes, a rituales, a ceremonias del antiguo pacto. Y eso me preocupa a mí porque cuando yo veo eso, yo creo que la persona no ha entendido la seriedad del nuevo pacto. que todo eso era simplemente ¿Qué? Una copia, una sombra, una figura del nuevo pacto que había de venir. Hermanos, déjame preguntarte en esta mañana, ¿Tú eres parte de este nuevo pacto?, ¿Tú eres participante de este nuevo pacto? No te estoy preguntando que si vienes a la iglesia un domingo a la mañana, o si eres miembro de esta iglesia local, o si das tus ofrendas, o si haces tus obras maravillosas, o si te portas bien con papá y mamá. No te estoy preguntando eso. Te estoy preguntando, tú eres parte de este pacto, del nuevo pacto de Jesucristo. Porque venir a la iglesia no te hace parte de este pacto. Saberte toda la Biblia de memoria no te hace participante de este nuevo pacto. Tus buenas obras no te hacen partícipe de este nuevo pacto. Entonces, ¿qué te hace partícipe de este nuevo pacto? Bueno, ya Ezequiel nos dijo, ¿verdad? Parte en Ezequiel capítulo 36. Dios, escúchame bien, tiene que hacer una cirugía espiritual en tu corazón. Dios y solamente Dios tiene que hacer, y según su gracia soberana, hacer una cirugía espiritual donde tiene que sacarte tu corazón duro y ponerte un corazón de carne, un corazón receptivo al Evangelio de Cristo. Tal vez tú estás aquí en esta mañana y nada de esto te hace sentido, nada. posiblemente tienes un corazón de piedra que rechaza estas verdades que está hablando el profeta aquí. O como dice Juan en su evangelio en el capítulo 3, tú quieres entrar al reino de Dios, tú tienes que nacer de nuevo, tú tienes que nacer de nuevo para entrar al reino de Dios, nacer de arriba. Y eso solamente es un milagro sobrenatural que Dios puede hacer en la vida de un pecador muerto. Solamente Dios lo puede hacer. Y cuando eso ocurre, cuando reconoces que eres un pecador, cuando reconoces que tú te mereces un infierno eterno, todo el juicio, el castigo de Dios, tú te lo mereces. Cuando tú entiendas esto, cuando tú entiendas que tú no te mereces la gracia de Dios y que necesitas depender completamente de la misericordia del Dios justo y te arrepientes de todo tu pecado, lo que amas, porque si estás en Cristo es porque odias a Cristo, amas este mundo, amas las cosas de este mundo, amas tu pecado y rechazas al Señor. Pero cuando reconozca y vengas en arrepentimiento, te arrepientas de eso y vengas en fe en Cristo Jesús, ahora es que podrás disfrutar de las ricas bendiciones de este majestuoso pacto. No hay otra forma de entrar a este pacto, sino es solamente a través de la sangre del Cordero que quita el pecado de todo el mundo en la cruz del Calvario. Perdona que no te pueda dar otra opción, pero hay un solo mediador y ese es Cristo Jesús. Oremos.