Por favor, vuelvan conmigo en sus Biblias al capítulo 1 de Romanos. Esta tarde, vamos a considerar un tema que parece estar de moda en nuestra sociedad actual. No se puede encender la televisión o navegar por las redes sociales o incluso leer el periódico sin que haya algún tipo de referencia al tema de la homosexualidad. ya sea promoviéndola o hablando en contra de ella. Lo queramos o no, todos debemos ser conscientes del hecho de que la sociedad en la que vivimos hoy en día siente fascinación por este tema. y debemos ser capaces de darle una respuesta. Así que con esto en mente, escuchemos ahora la palabra de nuestro Señor en el capítulo uno de Romanos, comenzando en el reciclo 20. Oh Señor, esta palabra que hemos leído es difícil. Es una palabra que condena. Oh Señor, que recibimos esta palabra y no tratar de manipular que significa algo que no debe significar. Que aceptemos el hecho de que a veces tu palabra es duro o dura. No podemos tomarlo ligeramente. este tema que es algo muy grande en nuestra cultura. Te pedimos que podamos dar testimonio contra esas perversiones que paramos públicamente contra el liberalismo y esta agenda homosexual que está tomando el control de la sociedad. o Señor, que paramos en Tu Palabra, porque Tu Palabra es verdad. Que recibamos esta Palabra que es predicada con gozo y que nos equipa a poder desfiar la sociedad dentro de nosotros, desfiar la cultura que vivimos. Y Señor, te pedimos que aún nosotros estemos usados convencer hombres y mujeres a correr de sus maneras pecaminosas y a sus deseos de la homosexualidad y correr al Cristo. Oh Señor, te pedimos que Cristo sea aceptado este día. Darnos de comer de tu palabra. Que las palabras de mi boca y las meditaciones de mi corazón sean aceptables en tu vista. Oh Señor, mi fuerza y mi redentor. Te pedimos esas cosas en el nombre de Cristo. Amén. Desgraciadamente, vivimos en una época en la que hay que predicar un sermón como este. Hace apenas una generación, este sermón habría sido impensable, porque la homosexualidad y otras perversiones sexuales relacionadas con ella estaban tan al margen de la sociedad que nadie habría soñado que habríamos caído tan bajo como para aceptar esas perversiones como parte de la vida dominante. Pero aquí estamos, con más y más personas que cada año se declaran homosexuales. Y ahora, después de años de aceptar la homosexualidad como parte de la vida dominante, cada vez más gente niega incluso la verdad fundamental de que solo hay dos géneros. Y la gente afirma ser de un género que no es el que nacieron. O afirman ser de un género inventado porque no se sientan como si encajaran en el binario de hombre y mujer. Sé que estoy predicando al coro, pero esto es absolutamente absurdo. Pero mires donde mires, esta locura se está apoderando de nuestra cultura. Hollywood lo está impulsando a través del entretenimiento. Los músicos lo están impulsando a través de sus canciones. Nuestro gobierno lo está impulsando a través de las leyes que aprueba. Los maestros lo están impulsando a través del sistema educativo. Donde quiera que mires, la agenda homosexual está siendo empujada por tu garganta. Desafortunadamente, la iglesia ha fallado en evitar que esta maldad se filtre dentro y corrompa lo que debe ser santo. Casi todas las principales denominaciones históricas han llegado a abrazar esta agenda homosexual. Pretendo que es lo mejor que se puede hacer. Incluso las denominaciones más conservadoras están convirtiendo esto en un problema. Como hemos visto recientemente en el PCA con Revoice y Side B Christianity, Tal vez no hay nada en nuestra cultura que se promueva tan fuertemente como la homosexualidad y perversiones similares. Por lo que esta es tal vez el área en la que se necesita la mayor postura contracultural de la iglesia hoy en día. Así que consideraremos este tema y lo haremos examinando cuatro cabezas. Primero, la raíz de la homosexualidad. Después, lo antinatural de la homosexualidad. Luego, el resultado de la homosexualidad. Y finalmente, la salvación de la homosexualidad. Consideremos primero la raíz de la homosexualidad. La cultura actual nos quiere hacer creer que la homosexualidad o la transexualidad o cualquier otro tipo de perversión es simplemente una cuestión de biología. Que la gente nace así. Pero este no es el caso. Las Escrituras nos enseñan explícitamente de dónde vienen estas abominaciones, porque las cosas invisibles de Él, Su eterno poder y divinidad, se ven claramente desde la creación del mundo, siendo entendidas por las cosas que son hechas, de modo que son inexcusables, porque habiendo conocido a Dios, no lo glorificaron como a Dios ni le dieron gracias, sino que nacieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entembrecido. Afirmando ser sabios, se hicieron necios y cambiaron la gloria del Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible. y de aves, y de cuardúpedos, y de reptiles, por lo cual también Dios les entregó a la inmundicia en las concupiscencias de sus corazones, de modo que les honraron sus cuerpos entre sí, los cuales cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y sirviendo a las criaturas antes que el Creador, quien es bendito por los siglos. Amén. Amigos, la homosexualidad no está agregada en la biología, está agregada en la idolatría. Pablo dice que es porque suprimieron la verdad con injusticia, porque cambiaron la verdad de Dios por la mentira, porque cambiaron la gloria del Dios incorruptible por la imagen de las cosas corruptibles. La idolatría del hombre es la razón por la que Dios los entregó a la inmundicia por las concupiscencias de sus corazones. Matthew Henry escribe, Dios los entregó en una forma de justo juicio, como el justo castigo de su idolatría, quitándoles la brida de la gracia restrictiva, dejándolos a sí mismos, dejándolos solos, porque su gracia es suya, no es deudor de nadie, puede dar o negar su gracia a su antojo. Esta es la espiral descendiente del pecado compuesto. La idolatría conduce a un comportamiento aún más depravado. Y en última instancia, conduce a que el Señor quite su mano de restricción de los malvados para que se entreguen a todo tipo de pecados. Escucho a los cristianos todo el tiempo decir que el Señor nos juzgará por permitir que la homosexualidad corra desenfrenada en nuestra sociedad. Amigos, escúchame muy cuidadosamente. El Señor ya nos está juzgando por nuestra idolatría e infidelidad a Él. Y es por eso que Él ha entregado a nuestra sociedad la bendicia a través de las conciencias de sus corazones. Es el juicio. No es que seremos juzgados. Estamos siendo juzgados. Y mientras no haya arrepentimiento que tome lugar a gran escala a nivel nacional, entonces continuaremos viendo la mano restrictiva del Señor siendo removida y las lujurias de los corazones de los hombres siendo perseguidas. No es una pendiente resbaladiza decir que la aceptación social de la homosexualidad condicirá a todo tipo de otras perversiones. Amigos, la evidencia está ante nuestros propios ojos. Es un hecho. Primero fue la homosexualidad. Ahora es el transgenerismo. Las relaciones poliamorosas ya han comenzado a ser más corrientes y ya hay conversaciones en las etapas iniciales sobre la normalización de la pedofilia y otras perversiones. Y si no vemos arrepentimiento, entonces podemos esperar ver esas cosas normalizadas e incluso aceptadas en nuestra cultura mientras el Señor continúa quitando su mano restrictiva y dramando mayor y mayor juicio. Si quieres ver a nuestra cultura detener su descenso al libertinaje, debes buscar la remoción de los ídolos que son la raíz de ello. Pero la sociedad se sentará ahí y te dirá que no hay nada malo en ello, que es natural. Ellos apelarán a la actividad homosexual que se encuentra en el reino animal y dirán que es algo que todos los animales hacen. Y puesto que en sus mentes somos solo otro tipo de animal, está bien que la gente lo haga también. Pero nada más lejos de la realidad. Consideraremos ahora lo antinatural de la homosexualidad. Pablo escribe, por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas, pues aún sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza. Y del mismo modo también los hombres, dejando el uso natural de las mujeres, se encendieron en sus consupiscencias los unos con los otros, cometiendo cosas vergonzosas hombres con hombres y recibiendo en sí mismos la recompensa que convino a su error. El argumento de Pablo contra la homosexualidad es la naturaleza misma. En la mente de Pablo, la intimidad sexual entre personas del mismo sexo es una ilustración especialmente clara del impulso humano idólatra de apartarse del orden y el diseño de Dios. Los que suprimen la verdad sobre Dios revelada en la naturaleza, suprimen la verdad sobre sí mismos escrita en la naturaleza. El pastor Kevin Young dice, la práctica homosexual es pecaminosa porque viola el diseño divino en la creación. De acuerdo con la lógica de Pablo, los hombres y mujeres que se involucran en conductas sexuales entre personas del mismo sexo, incluso si se están siendo fieles a sus propios sentimientos y deseos, han suprimido la verdad de Dios en injusticia. han cambiado la idoneidad de las relaciones hombre-mujer por las que son contrarias a la naturaleza. Para ver esto, considera a lo que Cristo apela en Mateo 19. Y Él respondiendo les dijo, ¿no habéis leído que Él que los hizo al principio varón y hembra los hizo? Y dijo, por esta causa el hombre dejará padre y madre y se unirá a su mujer, y serán los dos una sola carne. Así que ya no son más dos, sino una sola carne. Apela al relato de la creación, que en el principio dos los hizo varón y hembra. fue la unión del hombre y la mujer, lo que el Señor bendijo en el jardín. Y solo en esa unión del hombre y la mujer puede exhibirse la bendición. Sé que hay un cliché que dice que Dios hizo Adán y Eva y no Adán y Steve. Pero cuanto más leo la palabra de Dios y veo a Cristo y a los apóstoles apelar a la naturaleza, más llego a apreciar realmente ese dicho. El propósito para el que Dios diseñó los dos sexos se destruye en la homosexualidad. Una mujer acostada con una mujer o un hombre con un hombre no puede ser visto de ninguna manera como la unión bendita que el Señor instituyó en el jardín. De hecho, no es llamada bendita en absoluto, sino una abominación, como en Levítico 18, 22. No te acostarás con varón como con mujer, es abominación. El Señor ordenó a Adán y Eva que fructificarán y se multiplicarán, algo que la naturaleza atestigua que es imposible que ocurra en las relaciones homosexuales. es importante decir aquí, y es importante que lo sepas para que no te dejes llevar por la astucia de los malvados, que lo que se condena en las escrituras es toda la homosexualidad. No solo la pederastía, que es la actividad sexual entre adultos, o la violación homosexual. La cultura tratará de decirte que esto es lo que se condena en las escrituras y que entonces no existía el concepto de relaciones homosexuales monógamas amorosas, pero eso es totalmente falso. Levítico 23 de aclaro que ambos que se involucran en esta abominación son compatibles de ella. Y el hombre que se acostara con varón como con mujer, abominación hicieron. Lo mismo no es cierto de situaciones en las que hay una Ciertamente ambos han de ser muertos. Su sangre será sobre ellos. No ocurre lo mismo con las situaciones en las que se supera a alguien en un acto sexual. En ese caso, uno es víctima y el otro culpable. Amigos, debéis tener claro que cualquier relación homosexual es contraria a la naturaleza. Esto se ve claramente en el hecho de que en todo el mundo, incluso en tierras paganas donde el Señor los ha entregado las lujurías de sus corazones, la mayoría de los lugares todavía reconocen que la homosexualidad es contraria a la naturaleza y tienen leyes en contra de ella. Así que hemos visto que la homosexualidad tiene sus raíces en la idolatría y que es contraria a la naturaleza. consideraremos ahora el resultado de la homosexualidad. Esto es algo que me hará ser cancelado a los ojos de la sociedad por decirlo, e incluso puede irritar a algunos dentro de la iglesia, pero es algo que debe decirse. El resultado de la homosexualidad es la muerte. Y como a ellos no les pareció bien reconocer a Dios, Dios los entregó a una mente reprobada para hacer lo que no conviene, estando llenos de toda injusticia, de fornicación, de malicia, de avaricia. averecía, de maldad, repletos de envidia, de homicidios, de contiendas, de engaños, de malignidades, murmuradores, aborrecedores de Dios, detractores, injuriosos, soberbios, altivos, inventores de males, desobedientes a los padres, necios, desleales, sin efecto natural, implacables, sin misericordia, los cuales, habiendo entendido el juicio de Dios que los que hacen tales cosas son dignos de muerte, no solo las hacen, sino que aún se complacen con los que las hacen. El abrazar la idolatría lleva a la gente a abrazar todo tipo de maldades, no solo la homosexualidad, pero todo tipo de maldad resulta en la muerte. Y todas y cada una de estas cosas que se nombran son dignas de muerte. Miren de nuevo a Levítico 23. El hombre que se acostó con varón como con mujer, abominación hicieron. Ciertamente, ambos han de ser muertos. Su sangre será sobre ellos. El Señor vio conveniente que el castigo para la homosexualidad fuera la muerte. Y si hubiera un magistrado piadoso, este sería el castigo para tal abominación. Pero además de la pena civil de muerte, que no es algo que una sociedad como la nuestra vaya a adoptar pronto, está la pena física natural. La homosexualidad causa estragos en una sociedad al sembrar la muerte y la destrucción. Más del 80% de los hombres con enfermedades de transmisión sexual son homosexuales. Más del 60% de las mujeres con enfermedades de transmisión sexual son homosexuales. Esta es la recompensa de su error que reciben en sí mismos. Y luego está la destrucción que causa también con la destrucción de hogares y familias e incluso la mutilación de sus cuerpos como lo que se ve en el movimiento transgénero. Amigos, hay niños que están cortando sus genitales porque la cultura dice que eso está bien. Eso es perverso. Y si ellos permanecen firmes en su pecado, entonces ellos verán el resultado de la muerte espiritualmente también. Considera 1 Corintios 6, 9. No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios. No seréis ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adulteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, ni los ladrones, ni los ábaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores. Herederán el reino de Dios. Fíjense en las dos personas distintas que se enumeran en este pasaje. El afeminado, que es la palabra griega malakoi, son aquellos que son la pareja pasiva en una relación homosexual. Sí, esta palabra se extiende más allá de la mera participación en la actividad homosexual, llegando incluso a la apariencia y maneras de una persona, pero apunta hacia el que asume el papel de la mujer en el acto homosexual. y abusadores de sí mismos con la humanidad, que es la palabra griega arsenicoita. Son los que se acuestan con hombres los que asumen la parte activa en la actividad homosexual. ¿Y qué dice Pablo de ellos? Que no heredarán el reino de Dios. Amigos, no existen los cristianos homosexuales, por mucho que Greg Johnson quiera utilizar este término. Aquellos que son afeminados, aquellos que se acuestan con hombres homosexuales, lesbianas, gays, bisexuales, transgéneros y cualquiera que sea parte de la mafia del alfabeto están fuera del reino de Dios. No experimentarán nada más que la muerte eterna y la condenación si permanecen en sus pecados. No habrá entrada de la cultura queer en la Nueva Jerusalén, como un orador en la conferencia Revoice afirmó que habría. No, la maldad y la perversión quedarán fuera de la puerta, donde solo habría llanto y crujir de dientes. ¿Qué dice Cristo en Apocalipsis 22, 14 a 15? Bienaventurados los que practiquen sus mandamientos, para que tengan derecho al árbol de la vida y entren por las puertas de la ciudad. Mas los perros están afuera, y los hechiceros, y los fornicarios, y los homicidios, y los idólatras, y todo aquel que ama y practica la mentira. Estos fornicarios se quedarán fuera, y no serán de aquellos a los que se les da el derecho a comer del árbol de la vida. Amigos, el resultado de la homosexualidad es la muerte. Pero no debemos terminar ahí la discusión, porque si ese fuera el final, Entonces no habría esperanza. Pero alabado sea Dios porque hay esperanza. Hay salvación de la homosexualidad. Consideremos de nuevo 1 Corintios capítulo 6, pero esta vez continuamos leyendo hasta el versículo 11. No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios. No eréis ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan los comarones, ni los ladrones, ni los ávaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores heredarán el reino de Dios. Ni esto eráis algunos. pero ya estáis lavados, pero ya estáis santificados, pero ya estáis justificados en el nombre del Señor Jesús y por el Espíritu de nuestro Dios. El versículo 11 es un cambio de juego, no solo en la discusión sobre la homosexualidad, sino al considerar cualquier pecado. Y esto, eráis algunos, Pero ya estáis lavados, pero ya estáis santificados, pero ya estáis justificados en el nombre del Señor Jesús y por el Espíritu de nuestro Dios. Amigos, la homosexualidad no es el pecado imperdonable. Hay redención que se puede encontrar incluso de esa abominación en Cristo Jesús. Tanto si has vivido sin conocer la ley de Dios, como si te han enseñado desde tu juventud lo que está bien y lo que está mal, esta gran noticia del Evangelio de Dios es para ti. Todo tu sentido de vergüenza y culpa puede ser totalmente eliminado. Pueden ser completamente libres de una conciencia condenatoria. Amigos, esas son buenas noticias. Y hay varias personas que han experimentado esta libertad en Cristo de su desviación sexual. Hay un querido... La cultura dice que así es, que tú no puedes cambiar. Hay un querido hermano en la ciudad que fue cautivado por las mentiras del maligno y abrazando un estilo de vida homosexual que ha sido redimido y ahora tiene una esposa e hijos y sale todos los días a predicar el Evangelio de Jesucristo en las calles en Chicago. Puede que algunos de vosotros conozcáis o al menos hayas oído hablar de Rosaria Butterfield, la antigua profesora universitaria lesbiana que vino a Cristo y ahora está casada con el pastor Kent Butterfield de la congregación de Durham. Esta gente ha sido transformada por el poder de Cristo. y librado de sus pecados sexuales. No hay pecado que sea demasiado grande para que el Señor Jesucristo lo lave. No sé si alguno de ustedes aquí ha luchado alguna vez con este pecado, o si alguno de ustedes puede estar luchando con él ahora. Ahora que hay salvación, que se encuentran en Cristo, libertándote de la esclavitud y de la homosexualidad. Si quieres ser liberado de este pecado, entonces clama al Señor en arrepentimiento y Él te liberará. Y si ya estás en Cristo, Y aún así eres tentado hacia este pecado. Debes saber que como una nueva creación en Cristo, tienes una voluntad renovada. Así como Jesús resucitó de entre los muertos por el poder del Espíritu Santo, tú puedes resucitar a una vida nueva en Cristo. Más y más puedes morir al pecado y vivir a la justicia. Abandona el camino que conduce a la destrucción. Aléjate de los deseos pecaminosos que solo conducen a la muerte. Vuelve a Cristo. Camina por las sandades de la justicia por amor de su nombre. Y a ti también se te concederá la entrada en la ciudad celestial y el derecho a comer del árbol de la vida. Hermanos y hermanas, sé que este es uno de los temas más pendientes en nuestra cultura hoy en día, y no vamos a ganar puntos de favor con el mundo sosteniendo este punto de vista, pero ustedes deben ser fieles a la Palabra de Dios. A medida que la sociedad se vuelve más y más depravada, será más y más imperativo que usted se afere a la verdad de las Escrituras sobre este asunto. Muchas iglesias ya han caído en gran apostasía sobre este tema. Dios nos libre de convertirnos en una de ellas. Y si usted conoce a alguien que está en la trampa de este gran pecado, muéstrele la maldad de él y muéstrele que hay libertad que se encuentra en Cristo. No mostréis odio hacia ellos, sino mostradles el mayor amor y cuidado que podáis, señalándoles la cruz de Cristo. Es el odio aceptar sus pecados y decirles que sus perversiones están bien. Es amor a mostrarles su pecado y su necesidad a un Salvador. Y si hay alguien que escucha este sermón, y lo ve como otra tangente llena de odio de un cristiano intolerante, le digo lo que el pastor de Young dice en la introducción de su libro. No descartes al mensajero como un intolerante si tu verdadero problema es con la Biblia. Presta atención a la palabra de Dios. Huye de la ira venidera y encuentra la salvación de la homosexualidad. Oremos. Oh Señor, lamentemos por Jerusalén. Muchos son ciegos. del este pecado, lamentemos por la ciudad, por la cultura que vivimos, especialmente aquí en la área de Chicago, donde mucha de la identidad de esta área tiene raíz en esta maldad. Lamentemos. Señor, remueve la idolatría de nuestra tierra. Si no se saca la raíz, nunca resuelve. Señor, confiamos que remueverás la inequidad de esta tierra en tu tiempo. Señor, dar el arrepentimiento. Dar el arrepentimiento a nosotros como una nación y a nosotros aquí en esta área. Y preservarnos del mal juicio. para que no veamos la destrucción total de nuestra sociedad y últimamente veremos el mano de tu juicio sobre nosotros en una manera tan grande Oh Señor, que encontraremos salvación en Cristo, que confiamos en Él solamente porque Él es nuestro Dios, Él es nuestro Rey, Él es nuestro Salvador. Limpianos de nuestros pecados. Señor, que confiamos en Ti, que paramos firme en la cara de oposición de nuestra cultura, ya no importa el costo, aun si los cínicos deciden actuar violentamente a nosotros que paramos en la verdad. Oh Señor que seremos fuerte para tu nombre, por la causa de tu nombre. Bendice el resto de nuestro tiempo juntos. Oramos en el nombre de Cristo. Amén.