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al estudio de la palabra. Quiero que se ponga de pie, vamos a encomendar al Señor el estudio de las escrituras y a pedirle que el Señor abra nuestro corazón y nuestro entendimiento. Padre Santo, estás en el cielo, Señor, en esta mañana, venimos apelando a tu misericordia, Señor, que seas propicio ante nosotros, pecadores, Dios. Señor sabemos que los oídos no pueden escuchar lo que el corazón no quiere y yo te pido ahora Señor que por el poder de tu Espíritu Santo tú puedas abrir los corazones tú puedas ablandar nuestros corazones Señor que muchas veces están cargados con el peso del pecado con los afanes de la vida Señor y con las distracciones del mundo Te pido, Señor, que abras nuestros corazones en esta mañana, que los sensibilices a la necesidad que tenemos de Tu Palabra, Señor. Y que nuestros oídos y nuestro entendimiento puedan ser abiertos para que Tu Palabra pueda producir en nosotros, Señor, los frutos de justicia que Tú demandas de Tus hijos. En el nombre de Cristo Jesús te damos gracias. Amén y Amén. Puedes tomar asiento. hemos venido hablando todos estos días acerca de lo que es la doctrina de santificación progresiva y este es un tema muy importante para todos los cristianos porque la única manera en que nosotros podemos tener un crecimiento espiritual verdadero es que nos ocupemos de mortificar las obras de nuestra carne, de crucificar el pecado que diariamente nos alcanza y que podamos acercarnos más a la estatura del varón perfecto no solamente en lo externo no solamente en las obras que las demás personas pueden ver en nosotros sino también en lo interno en aquello que nosotros sabemos con lo que batallamos en nuestra soledad cuando nadie nos mira lo que somos cuando estamos a solas con Dios cuando nosotros batallamos contra eso y hacemos nuestra práctica diaria crucificar ese pecado, crucificar esas sobras de la carne, nosotros vamos avanzando en nuestro crecimiento espiritual y nos vamos pareciendo más a Cristo. Entonces, hablar de este tema, de la santificación progresiva, es de vital importancia para la vida del cristiano. Y vimos cinco razones, seis razones anteriormente, por las que era importante para la vida del cristiano. si usted no pudo estar y si usted no escuchó este mensaje lo invito a que pueda visitar nuestra página web ahí están todos los temas que se dan domingo tras domingo y pues que se pueda poner al día para que sepa de lo que estamos hablando en esta ocasión quisiera conducirlo a ubicar el tema de la santificación progresiva en el panorama divino de Dios y donde entra este proceso en el que nosotros estamos entonces quiero que me acompañe a filipenses 1.6 filipenses 1.6 ahí lo tenemos en nuestra presentación y si pueden leerlo conmigo dice estando convencido precisamente de esto que el que comenzó en vosotros la buena obra la perfeccionará hasta el día de cristo jesús quiero que note que dios en su infinita sabiduría y misericordia tiene para nosotros trazado un itinerario para tratar con nuestra vida, para poder llevarnos de una naturaleza de pecado hacia una naturaleza de glorificación, hacia un estado de gloria y esta iniciativa de Dios se confirma una y otra vez en la escritura, hemos venido viendo varios versículos donde Dios habla acerca de este proceso al que quiere someter a todos los creyentes lo vemos en filipenses en este versículo lo vemos en efesios lo vemos en romanos lo vimos en primera de pedro en el estudio anterior lo vimos en primera de juan cuando hablamos acerca de caminar en la luz Y lo vemos incluso hasta en el Salmo 23, porque usted mira a un David que comienza hablando acerca de sus carencias, de la obra de pastoreo del Señor, y cómo el Señor lo lleva por el Valle de Sombra, y el final de Salmo 23 termina en la morada de Dios. y el bien y la misericordia, siguiéndolo continuamente. Entonces, de principio a fin, la escritura trata de este itinerario de Dios con la vida del creyente, para llevarlo de un estado de carencia, para llevarlo de un estado de pecado, hacia un estado de bendición, hacia un estado de glorificación. Hoy quisiera que profundizáramos un poco más en ese contexto teológico de esta santificación progresiva. Y quiero que se dé cuenta ustedes por qué es importante y necesario entender dónde se ubica la santificación progresiva en el panorama divino para que nosotros comprendamos y podamos ubicarnos dónde estamos en el proceso de Dios con nosotros específicamente. Porque de lo contrario, si nosotros no nos sabemos ubicar a dónde está nuestro proceso de santificación, vamos a estar alejados de nuestra realidad pecaminosa. Vamos a estar pensando que ya hemos sido glorificados y que poseemos elementos que son propios de este estado. Y esto es incorrecto. ¿Por qué es incorrecto no saber cuál es nuestro estado en el proceso de Dios? porque aún estamos en un cuerpo corruptible y aún vivimos en un mundo caído que está a la espera de un juicio y a la espera de redención cuando el señor venga en gloria y el resultado de no conocer este contexto es que la gente comienza a implementar un montón de prácticas místicas y espirituales que tienen forma de declaraciones, decretos, profecías y demás familiares y tienden a espiritualizar todo el cristianismo y no solamente a espiritualizarlo sino que a volverlo un cristianismo supersticioso, un cristianismo supersticioso sin darse cuenta el creyente de estas prácticas equívocas iniciadas puede convertirse en el reemplazo de la disciplina convencional de la santificación que encontramos en Romanos 8.13 se acuerda Romanos 8.13 lo vimos en el estudio anterior si por el espíritu hacéis morir las obras de la carne entonces viviréis reemplazan con prácticas místicas, con declaraciones, con decretos, con profecías, con el apóstol me dijo, el profeta me dijo, el hecho de que necesitamos tener una disciplina convencional de santificación en la que estamos constantemente trayendo a muerte nuestras obras de la carne. Ahora, más que eso este tipo de prácticas místicas pueden convertirse en una excusa mediocre para no querer esforzarse con diligencia en perseguir la santidad para su vida y ahí es donde está el verdadero peligro entonces nosotros necesitamos entender tres cosas muy importantes para poder ubicar la santificación progresiva en un contexto teológico apropiado y por consiguiente ser más efectivo en nuestro caminar cristiano o en nuestro crecimiento espiritual o en la mortificación de las obras de nuestra carne como usted quiera llamarlo para no caer en estos errores de misticismo supersticioso que han sido en la iglesia latinoamericana un sustituto del verdadero cristianismo y que por eso la gente no cree en el cristianismo actual porque tenemos un montón de prácticas y confesiones que están en contra del verdadero proceso bíblico más adelante le voy a hablar un poco más acerca de eso pero el primer punto que quisiera recalcar en su corazón es que en primer lugar la santificación progresiva está precedida por la justificación si usted ha estado viniendo a nuestras clases de escuela bíblica usted recuerda que hablamos de todos los procesos de justificación de adopción de santificación y quiero refrescarlo un poquito para que se recuerde de ello primera de corintios 1.30 dice lo siguiente dice mas por obra suya estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual se hizo para nosotros sabiduría de Dios, y justificación, y santificación, y redención. Cuando hablamos de este proceso de santificación, tenemos que saber que hay dos tipos de santificación. Está la santificación posicional, que es lo mismo que la justificación, ¿Eso qué significa? Que a través de la obra de Cristo en la cruz del Calvario, que nos declaró a nosotros como justos delante de Dios, producto de esa obra de Cristo, nosotros tenemos una santidad delante de Dios, tenemos la santidad de Cristo. Pero en nuestra vida diaria, nosotros tenemos que ocuparnos de mortificar el pecado que fácilmente nos alcanza. ese es otro tipo de santificación que es la santificación progresiva lo que diariamente nosotros estamos haciendo para crucificar nuestras obras de la carne para hacer morir el pecado que hay en nosotros ahora cuando hablamos de justificación que es lo mismo de que santificación posicional la justificación quiero que me acompañe aquí Necesita absorber lo más que pueda acerca de este tema. Yo sé que es un poco enredoso, pero es necesario para establecer el fundamento de nuestra fe. La justificación es un acto legal donde el pecador es declarado justo y donde se le imputa la justicia de Cristo a su favor. cuando yo leí esto igual estaba en la luna como me imagino que alguno de ustedes está ahorita pero entendiendo el proceso legal vamos a poder entender mejor a qué se refiere con todos estos términos de justificación de imputación de justicia y de santificación y me fui a hablar con un abogado al respecto y le pregunté si alguien fuera encontrado culpable de un delito como por ejemplo el sonado caso de este muchacho Kevin Solorza en perjuicio del exfiscal Edwin Egigure puede otra persona pagar por la pena del delito que se le imputa a este muchacho o sea, puede otra persona cumplir la condena o pagar esa pena que a él le imputan los tribunales y la respuesta del abogado fue categórica me dijo definitivamente no pues en derecho la pena se aplica al que es declarado culpable no existe en la historia del derecho algo que se haya aplicado de esta misma manera ni siquiera está tipificado en el marco del derecho penal la única manera en que una persona puede pagar por la pena de otro es que el que es inocente se declare culpable y el que es culpable sea declarado inocente entonces así entendí mejor las cosas porque lo que sucede con el sacrificio de cristo es y quiero que usted lo entienda también que si nosotros fuimos justificados no fue por algo que nosotros no merecíamos No fue porque, que bueno el hermano, como crucifica las horas de la carne, como hace morir el pecado, como está aquí, todos los días en la iglesia. No, es decir, él no es una mala persona. Él paga los impuestos, es un buen esposo, es un buen trabajador, es un buen ciudadano, modelo de vecino, servicial, todo eso. Nada de eso, nada de eso nos calificaba a nosotros para hacernos justos delante de Dios. sino que al contrario fue porque Cristo asumió la culpa de nosotros que nosotros fuimos justificados lo que esto significa es que se intercambiaron los papeles a nosotros nos imputaron la justicia de Cristo y a Cristo le imputaron la culpabilidad de nosotros la culpabilidad que era nuestro delito le fue traspasada a Cristo entonces nosotros fuimos declarados justos y Cristo fue el declarado culpable entonces porque Él fue declarado culpable Él fue el que murió en la cruz Él fue el que llevó el peso de la condena que nos tocaba a nosotros Bueno, ¿y dónde en la Biblia dice eso? En muchos lados, en muchos lados. Pero esto me lleva a entender algunas figuras que existían en el Antiguo Testamento para ayudarle a las personas a comprender cómo iba a ser ese proceso de justificación. Y si usted ha leído la ley en el Antiguo Testamento, usted se recordará que había un sacrificio especial que el pueblo de Israel ofrecía para el perdón de los pecados una vez al año. Y era el sacrificio del Cordero de Azazel. En el Cordero de Azazel, los sacerdotes le imponían manos al Cordero. y era trasladado el pecado del pueblo a ese cordero y ese cordero se mandaba a que fuera al desierto y que se perdiera. En otras palabras, el pecado del pueblo era trasladado a ese cordero y ese cordero era sacrificado para expulsar del pueblo ese pecado. Es lo mismo que sucede con la justificación delante de Dios. Esa es una figura antiguo-testamentaria de la justicia de Dios tomando efecto. Los pecados que eran de nosotros se le trasladaron al Cordero de Dios sin mancha, perfecto, sin culpabilidad y esa justicia que Él tenía se nos imputó a nosotros. No por algo que nosotros hayamos hecho, porque nosotros no éramos buenos, éramos culpables de nuestros delitos. Y producto de que ahora tenemos esa santidad imputada a nosotros, el Padre nos mira como santos. El Padre nos mira como Cristo. Tenemos esa santidad posicional delante de Él. Ahora, producto de que hemos sido justificados por la justicia de Cristo imputada a nosotros, nuestro corazón rebosa en agradecimiento por el sacrificio de Cristo. Sólo una persona que ha recibido la nueva naturaleza por parte del Espíritu Santo puede reconocer, número uno, que necesita un Salvador perfecto. para que su pecado les sea imputado y la justicia de ese salvador les sea imputada a él cuando nosotros recibimos por medio de la fe el sacrificio de Cristo Jesús recibimos esa justicia pero no lo podemos hacer a menos de que el Espíritu Santo haga la obra en nosotros Una persona pecadora, una persona impía, una persona que vive de acuerdo a los parámetros del mundo, de acuerdo a la forma de vivir del mundo, no puede reconocer la necesidad que tiene de un salvador y no puede reconocer la necesidad que tiene de ese proceso de justicia. Por lo tanto, es incapaz, incapaz de hacer morir las sobras de su carne. y tampoco es... también es incapaz de sentir ese agradecimiento y de consagrar su vida al amor de Dios porque reconoce la grandeza del sacrificio de Cristo. ¿Sí está conmigo? Se lo pongo de una manera bien práctica. ¿Cómo viviría usted su vida si usted ha sido acusado por un delito y alguien más ha ofrecido pagar la pena por usted. Digamos que su delito era condenable por 30 años y alguien más vino y dijo, ¿sabes qué? Yo voy a pagar esa condena por vos. ¿Cómo viviría usted su vida, o como sería su agradecimiento por esa persona. ¿Qué haría usted por esa persona? Hermano, yo no encontraría qué hacer con esa persona, cómo servirle a él, cómo servirle a su familia, qué hago, cómo lo trato, qué puedo hacer para hacerlo sentir bien, para agradarlo, para agradecerle el sacrificio que está haciendo por mí. O no, ahí lo dejaría que se pudre en el tambo. ¿Verdad que nuestro corazón estaría agradecido con alguien que se ofreciera a pagar una pena así por nosotros? Más si fuera una pena capital. Que hayamos sido sentenciados a una así eléctrica o una inyección letal y alguien se ofreciera a tomar el lugar por nosotros. Nosotros viviríamos nuestra vida en un deportante agradecimiento por esa persona. Es lo mismo que ocurre con la santificación. La santificación es el resultado de vivir agradecido por el sacrificio de Cristo. Hablamos anteriormente de que la santificación verdadera no se enfocaba en nuestras obras personales, sino que se enfocaba en la obra de Cristo. Y si constantemente nuestra mirada está en la obra de Cristo, nuestra santificación va a ser verdadera porque va a brotar de un corazón agradecido. ¿Pero por qué no podemos reconocer eso tan fácilmente en nuestra vida diaria como cristianos, como creyentes? porque pensamos que somos justos por nuestra propia cuenta porque la gente piensa que el pecado no es tan grave como cualquier otra falta en la carne el pecado cualquiera que sea soberbia, orgullo, vanidad, vanagloria, etc. no es tan grave como matar a una persona y entonces por eso no sienten que sea tan trascendente la necesidad de un salvador por eso no sienten que es trascendente la necesidad de que haya un cordero puro y sin mancha que sea capaz de expiar nuestros pecados y de presentarnos justos delante del padre. ¿Por qué razón? Porque lo estamos viendo inmediatamente. Inmediatamente, ahorita, no importa. No importa si soy feliz, si tengo trabajo, si mis hijos están bien. No estoy necesitando nada. No necesito de un salvador. Tengo todas las distracciones que necesito y soy feliz. pero esa es una visión muy de corto plazo nuestros ojos y nuestra mirada tiene que estar en la eternidad y tenemos que saber que nuestro pecado no importa qué tan grande o qué tan pequeño nos va a llevar al final a una condenación eterna yo le aseguro que si la condenación si el juicio fuera mañana esta iglesia estaría llena de personas buscando perdón y arrepentimiento de pecado. ¿Por qué es? Porque solamente creemos y accionamos en base a lo que podemos ver, no en base a lo que no vemos. Y como no vemos el juicio que viene, Entonces no sentimos una necesidad imperiosa de buscar un salvador, de buscar perdón por nuestros pecados. ¿Y sabe cómo se llama eso? A no reconocer esa necesidad de un salvador y no estar viendo el juicio que viene. Eso se llama vivir conforme a las obras de la carne. vivir sabiendo y conscientes de la necesidad que tenemos a diario de perdón de nuestros pecados porque ese día puede ser nuestro último en vivir conforme a la fe y si vivimos conforme a la fe entonces nosotros nos estamos ocupando diariamente de hacer morir nuestro pecado pero eso no puede pasar en nuestra vida hasta que nosotros hasta que el Espíritu haya hecho la obra en nosotros y hayamos sido justificados por la fe y nos miremos en la necesidad de ocuparnos de nuestra santificación progresiva la segunda cosa que tenemos que saber es que la santificación progresiva depende de nuestra unión con Cristo y de la morada del Espíritu Santo en cada creyente. ¿Qué significa esto? Y póngame bastante atención. Significa de que Cristo no justifica a toda la humanidad. Y antes de que me tire las piedras, escúcheme todo lo que tengo que decirle. Cristo no justifica a toda la humanidad. Cristo no justifica a todo el mundo, sino que sólo aquellos que han confiado en su sacrificio para salvación, sólo aquellos que han depositado su confianza para vida eterna en Él. Esos, los nacidos de nuevo, son justificados delante de Dios. No todas las personas, porque el Estado, el Estado por defecto, de todas las personas en un estado de pecado los que hemos respondido al llamamiento eficaz de la gracia eso somos justificados delante de Dios y por supuesto su sacrificio abre la puerta para que todo el mundo sea salvo porque su deseo según segunda de Pedro 3.9 es que nadie se pierda sino que todos se salven Dios no quiere que todo se pierda, Dios quiere que todo se salve. Pero Él va a justificar delante de Dios únicamente aquellos que han tomado su decisión de creer en su sacrificio para darle vida eterna delante de Dios. En este momento le decía, el estado por defecto de la humanidad es el pecado. De manera que el destino por defecto de un pecador cual es, el infierno, la muerte eterna, la condenación. No así nosotros, los que hemos confiado en su obra para nuestra salvación, nos encontramos en un camino de glorificación. Estamos aquí en la tierra esperando nuestra redención. Estamos en el proceso para ser glorificados cuando Él venga de nuevo por los suyos. Por tanto, no podemos pretender que un pecador busque la santificación es imposible que un pecador busque ser santificado porque un pecador no puede buscar la santificación y porque nosotros si porque nosotros hemos sido ya justificados porque confiamos en la obra de cristo entonces como confiamos en la obra de cristo y el Espíritu Santo vive adentro de nosotros nosotros tenemos el impulso por parte del Espíritu de sentirnos mal cuando pecamos nosotros tenemos el impulso por el Espíritu de sentirnos mal cuando decimos una mala palabra nosotros sentimos el impulso del Espíritu de pedirle perdón a Dios cuando obramos de una mala manera Eso implica o eso muestra que tenemos al Espíritu Santo adentro y que el Espíritu Santo nos redargüe, nos instruye y nos guía hacia toda verdad y a toda justicia. Pero como hablamos anteriormente, si un pecador no es movido hacia eso, aún diciendo que ha sido creyente, significa que el Espíritu Santo no vive en él. significa que él no ha sido justificado por el sacrificio de Cristo significa que él no ha confiado en Cristo como su salvador un pecador no puede pretender buscar la salvación si aún no sabe por qué tiene que buscarla o sea, él no sabe por qué tiene que buscar el arrepentimiento si él se siente cómodo en sus pecados si él se siente cómodo en su vana manera de vivir porque todavía no ha sido convicto de sus pecados todavía el Espíritu Santo no ha hecho esa labor de hacerlo darse cuenta de que tan grande es su ofensa delante de Dios aún no ha encontrado esa necesidad de tener un salvador eficiente como Jesucristo el Hijo de Dios el creyente que está unido a Cristo es un creyente que tiene una relación íntima con Dios y si usted encuentra que usted no puede tener esa relación íntima con Dios cuando usted se enfrenta a las escrituras cuando usted se enfrenta a ese momento de oración en su cámara secreta entonces hermano usted necesita reevaluar su vida necesita reevaluar su llamamiento necesita reevaluar su confesión de fe miren lo que dice Juan 15.5 dice yo soy la vida vosotros los armientos el que permanece en mí y yo en él ese da mucho fruto ese da mucho fruto Entonces el resultado de permanecer en Dios es que nosotros estamos llevando, hermanos, abundancia de fruto ¿Qué significa eso? ¿Qué significa abundancia de fruto? Que traemos todo el mercado a la iglesia, ¿no? significa que nosotros estamos perseverando en nuestro caminar significa que nosotros estamos sirviendo a los santos con nuestros dones significa que nosotros estamos predicando el evangelio significa que nosotros estamos conectando personas con nuestro grupo pequeño y con la iglesia y que estamos constantemente haciendo ministerio porque ese es el resultado de la comunión con Dios y la persona que está unida a Dios Siente esa pasión y siente esa carga por llevar a Dios el fruto de lo que Él ha depositado en su vida. Y no siempre es porque su confesión de fe fue falsa. No siempre es porque usted no es un creyente verdadero. probablemente si es un creyente verdadero probablemente si su membresía en la iglesia significa algo probablemente si su bautismo fue un bautismo verdadero ¿Pero entonces qué es lo que sucede? ¿Por qué no llevo frutos? ¿Por qué no estoy conectado con la iglesia local? ¿Por qué no siento esa necesidad y ese deseo de traer, de conectar personas a mis amigos con el grupo pequeño y con la iglesia local? ¿Por qué? Porque está separado de Cristo. Porque no tiene comunión con Dios. no tiene comunión con dios porque el tiempo que necesitaría invertir para estar con dios a sola con la escritura y con la oración usted lo dedica a facebook a whatsapp a netflix a las series que mira a x o y entonces hasta que podamos ponerle un alto un hasta aquí a todas estas distracciones que nos impiden a nosotros meternos en un tiempo de comunión con Dios hasta ese entonces vamos nosotros a experimentar lo que es el fruto abundante resultado de tener comunión con Dios Tampoco le estoy diciendo que tener todas estas cosas es malo, es pecado, es delito, es del diablo, se va a ir al infierno. No. Estoy diciendo que tenga su tiempo con Dios. Estoy diciendo que no permita que estas distracciones lo aparten del tiempo que debería de tener con Dios. Y le estoy diciendo también que Dios demanda de su vida frutos de justicia. ¿Por qué? porque todo árbol que no da buen fruto es cortado si somos creyentes si somos discípulos de Cristo vamos a hacer lo que Cristo hacía vamos a ser obedientes a lo que Cristo dice nos guste o no nos guste pero yo he entendido que sea que esté de acuerdo o no esté de acuerdo tengo que ser obediente porque la palabra nos manda a ser obediente y eso es terriblemente difícil es un terrible sacrificio ¿por qué? porque muchas veces Dios nos demanda lo que nosotros más queremos con lo que nos sentimos más cómodos haciendo viendo esa serie que no nos deja nada edificante escuchando esa música que no nos aporta nada a nuestra espiritualidad haciendo esas actividades y llevándonos con esas personas que sabemos que nos apartan de parecernos más a Dios tanto interna como externamente y Dios demanda ese sacrificio Y lo que quiero decirle con todo esto es que no siempre va a ser fácil. No siempre se va a levantar de la cama y va a decir, ay que bonito, hoy tengo ganas de tener comunión con Dios. Voy a andar en comunión todo el día con Dios. No, la mayor parte del tiempo le va a costar. Le va a costar una barbaridad, va a tener que pelear contra usted mismo, va a tener que pelear contra las cosas que le gustan, va a tener que pelear contra las cosas que la gente le dice, que son fanáticos, que son radical, que solo en la iglesia quieren pasar, que yo no sé qué es lo que te pasa, chiquito no eras así, etcétera, etcétera. Va a tener que pelear contra todas esas cosas, porque no es fácil. pero tiene que hacerlo porque Dios demanda eso de cada creyente y hasta que usted no lo haga usted no va a poder avanzar en su caminar cristiano de eso se trata la santificación progresiva y por último la santificación progresiva está seguida por la glorificación Esta última santificación o este último proceso se llama la santificación prospectiva o santificación última. ¿Cómo nos vemos nosotros ya allá en el proceso de gloria cuando Cristo venga por su iglesia? Dice 1ª de Juan 3 del 1 al 2. 1ª de Juan 3 del 1 al 2. Mirad cuán gran amor nos ha otorgado el Padre para que seamos llamados hijos de Dios. Y eso somos. Eso somos. Por esto el mundo no nos conoce. Porque no le conoció a Él. Verso 2. Amados, ahora somos hijos de Dios y aún no se ha manifestado lo que habremos de ser. pero sabemos que cuando él se manifieste seremos semejantes a él porque le veremos como él es seremos semejantes a él porque le veremos como él es es una palabra tan profunda y tan rica hermanos para que usted lo entienda finalmente quiero decirle que este este hecho de la santificación progresiva es el acto intermedio de una obra que tiene tres actos una obra que tiene tres capítulos ¿Se acuerdan cuando uno contaba los chistes chiquitos de que en el primer acto se abre el telón y todo eso? Bueno, algo así es. No es un chiste, sino que es una obra literal. La obra maestra de Dios en nuestra vida. Y la santificación progresiva en el acto intermedio, el capítulo del medio de esta obra de tres capítulos. En el primer capítulo se abre el telón Y este acto cuenta la historia de que fuimos rescatados, puestos en unión en Cristo mediante el poder transformador del Evangelio. Respondimos al llamado del Evangelio. El Evangelio iluminó nuestras tinieblas. Nosotros respondimos a la necesidad de arrepentimiento de nuestros pecados y a la necesidad de un Salvador. Porque caminamos en la luz de su palabra. Y fuimos transferidos al reino de Dios y se nos confirió una nueva misión y ahí se cierra el telón. Ese es el primer capítulo, el primer acto. En el segundo acto, que es este acto intermedio del que estamos hablando, se abre el telón y este trata acerca de la santificación progresiva. Aquí en este acto tratamos de completar aquella misión que se nos fue conferida aquí en la tierra y de ser participantes del reino de dios para su gloria y ensanchar la causa de cristo es la continuación de nuestra misión aquí en la tierra de participar del reino de dios y de ensanchar la causa de cristo se cierra el telón entonces comienza el tercer acto el acto final se abre el telón Y Dios hace completas todas las cosas al cumplir todas sus promesas. Cada lágrima desaparece, cada naturaleza es modificada de modo que la gloria de Cristo es todo lo que nosotros necesitamos. Y lo vemos en Apocalipsis, ¿verdad? No habrá llanto, ni dolor, ni tristeza, y Él será todo lo que necesitamos. Ese es el final del acto. y se cierra el telón. ¿Se imaginan qué glorioso es ese día? En que desaparezca todo nuestro sufrimiento, en que todo lo que por lo que luchamos aquí en la tierra por vencer el pecado, las cosas que nos alcanzan, las cosas que no están bien delante de Dios, finalmente van a desaparecer en ese día cuando él vuelva por su iglesia. Ese es un día glorioso para nosotros. Hablábamos con mi esposa antes de comenzar cuando la hermana leyó el último versículo. Y decíamos, ¿qué forma más romántica de Pablo de poner las cosas? ¿Cómo demuestra el amor por un salvador? Yo encuentro eso nuevamente en Romanos 8, 18-23. Romanos 8, del 18 al 23. Miren cómo describe Pablo este tiempo. 8, 18 hasta el 23. Dice, pues considero que los sufrimientos de este tiempo presente no son dignos de ser comparados con la gloria que nos ha de ser revelada. porque el anhelo profundo de la creación es aguardar ansiosamente la revelación de los hijos de Dios porque la creación fue sometida a vanidad no de su propia voluntad sino que por causa de aquel que la sometió en la esperanza de que la creación misma será también liberada de la esclavitud de la corrupción, a la libertad de la gloria de los hijos de Dios. Pues sabemos que la creación entera, a una, gime y sufre dolores de parto, hasta ahora. Y no sólo ella, no solamente la creación, no solamente la sociedad, no solamente el mundo allá afuera, sino que también nosotros, nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu, que antes que el mundo recibimos nosotros el Espíritu Santo, aún nosotros mismos gemimos en nuestro interior, aguardando ansiosamente la adopción como hijos y la redención de nuestro cuerpo. porque en ese momento en que experimentemos la glorificación no vamos a tener nunca más que esforzarnos en mortificar las obras de nuestra carne y me llama la atención el énfasis de la palabra gemimos en todo este pasaje y creo que cobra una vital importancia en este tiempo es para nosotros esta palabra de Pablo una esperanza de que seremos como él como dijo Juan vamos a ser como él porque veremos como él es y cuando les digo que esta palabra toma vital importancia en este tiempo es porque yo sé que es difícil imaginarse que algo bueno pueda ocurrir de la crisis mundial que está sucediendo Dígame si no es cierto que usted mira esas imágenes en las redes sociales y en la televisión. Mira esos niños que murieron a causa de gas químico y se compunge su corazón. ¿Se compunge su corazón cuando mira esas cosas? ¿Siente usted aquel anhelo ferviente porque Cristo traiga libertad a esas naciones y que venga pronto en aras de la paz mundial. Es difícil pensar que algo bueno pudiera resultar de tanta maldad que estamos viendo en el mundo. Es desgarrador ver a esos niños muertos en Siria por ataques químicos y puedo imaginar que usted siente ese dolor de las víctimas en carne propia. Usted siente como que si fueran sus hijos, sus nietos o cualquier otro familiar, Romanos 8.23 dice que gemimos desde nuestro interior aguardando ansiosamente nuestra redención. Nuestro corazón clama por justicia de la misma manera que Israel clamaba la intervención de Dios cuando eran sometidos a todos los vehámenes que Babilonia practicaba con ellos. Asimismo gemimos nosotros. Y ante tal situación, yo solo puedo hacer una cosa, darle el mensaje que Dios me ha enviado a predicarle. Y ese es, nuestros tiempos son finales. Cristo viene pronto. Esfuércese, esfuercese, esfuercese. Eso es, tome todas sus fuerzas. Esfuércese en su santificación. Trabaje en su santificación. Porque en su tiempo, en su tiempo dará buen fruto. El fruto de justicia que Dios demanda de nosotros. En palabras del pastor John Piper, la vida es dura, pero Dios es bueno y nuestra redención está cerca. Pónganse de pie, vamos ahora.
Contexto Teologico de La Santificacion
Série La Santificacion Progresiva
Existen 3 cosas que nosotros tenemos que saber para ubicar la Santificación Progresiva en su contexto teológico apropiado y por consiguientes ser más efectivos en nuestro caminar cristiano: 1. La santificación progresiva es precedida por la justificación. 2. La santificación progresiva es dependiente de nuestra unión con Cristo y de la morada del Espíritu Santo en cada creyente. 3. La santificación progresiva esta seguida por la glorificación.
Identifiant du sermon | 41917031102 |
Durée | 47:48 |
Date | |
Catégorie | Service du dimanche |
Langue | espagnol |
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