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Salmo 24 Salmo 24 En los días miércoles estamos abrazando acerca de temas de la iglesia en los estudios bíblicos y uno de los temas que hemos estado estudiando ha sido la predicación expositiva y realmente creo que el estudiar la predicación expositiva para cualquier predicador es una gran satisfacción porque el estar aquí adelante para enseñar la Biblia nos libra de un gran peso, una gran tentación de que muchas veces cuando estamos preparando un sermón o algo, estamos pensando qué cosas inteligentes podemos decirles a ustedes que llamen su atención, o qué cosas graciosas, o una buena introducción para agarrar, y no es que esté mal en sí mismo, pero a veces la preocupación de los que van a exponer la palabra se centra más que todo en eso, en decir qué cosas inteligentes les puedo decir yo a ustedes que digan wow, ¿no? Pero algo que estábamos viendo en la predicación expositiva es que lo que Dios nos ha llamado a los que vamos a exponer su palabra más allá de eso es a ser fiel a lo que dice acá. O sea, no tenemos que preocuparnos de estar buscando buenas anécdotas, buenas introducciones, sino nuestra preocupación debe ser explicarle a la iglesia lo que Dios ha dicho y eso nos libra de mucha presión porque tal vez para muchas personas lo que podemos llegar a decir no parece inteligente o puede ser interesante pero lo importante es que estamos exponiendo lo que Dios dice y eso es llena de gozo, de paz el corazón del que va a exponer. Y al mismo tiempo pienso que el enseñar la palabra es igual que los futbolistas, ¿no? Les pagan por divertirse, ¿no? Los que juegan fútbol creo que les gusta y aunque es un trabajo todavía les pagan, ¿no? Y se están divirtiendo a las seis. Creo que de la misma manera a los que a veces nos toca exponer la palabra, a través de la semana mientras vamos preparando, Dios nos bendice a través de lo que queremos enseñar y es una gran satisfacción a veces estar estudiando y ver cómo Dios te habla de una manera tan personal en la enseñanza que vas a dar, y eso es una bendición extra, yo pienso. Entonces, mi deseo para la iglesia es que ese fruto o esa bendición que Dios está usando en mi corazón, que también pueda ser transmitida hacia ustedes, y que juntos podamos realmente a aprovechar este sermón, esta enseñanza, y no sea solamente como una enseñanza más, sino que podamos agarrar y apropiarnos de la enseñanza. Salmo 24. Voy a dar lectura del verso 1 al verso 6. Del Señor es la tierra y todo lo que hay en ella, el mundo y los que la habitan. porque él afundó sobre los mares y la sentó sobre los ríos. ¿Quién subirá al monte del Señor y quién podrá estar en su lugar santo? El de manos limpias y corazón puro, el que no ha alzado su alma a la falsedad ni jurado con engaño. Ese recibirá bendición del Señor y justicia del Dios de su salvación. Tal es la generación de los que le buscan, de los que buscan tu rostro como Jacob. Una de las mayores bendiciones creo yo que todo cristiano realmente quiere experimentar debajo de este sol es tener cada mañana cuando nosotros nos levantamos y abrimos nuestras Biblias, si eres creyente verdadero, tu deseo más genuino es tener una comunión íntima con Dios. Creo que la frustración que muchas veces atravesamos es cuando muchas veces leemos la Biblia, pero es como podemos leer la Biblia y llorar sin tener comunión con Dios. Y eso es algo que frustra, que desanima muchas veces el corazón de cada creyente. Así que cada mañana cuando nosotros vamos a la Biblia o vamos a nuestro tiempo devocional, otros lo llaman. Nuestro mayor anhelo es realmente querer tener comunión con Dios. Queremos que Dios nos hable. Queremos que realmente el Todopoderoso se, por así decir, se meta en nuestro mundo pequeñito y nos hable de las cosas que nos están preocupando, de las cosas que deseamos escuchar. Pero lastimosamente eso no siempre pasa. Pero yo sé que todo creyente verdadero al menos una vez en su vida ha tenido este tipo de comunión. Es por eso que cuando nosotros vamos y no tenemos eso, es que experimentamos ese sentimiento de frustración y de incomodidad. Y este salmo es titulado Una generación que busca a Dios. Y la razón por eso es porque muchas veces yo personalmente voy a buscar a Dios y voy con un corazón y normalmente las palabras de David, que en muchos de sus salmos, cuando él empieza, están en mi mente, cuando David dice, ¿Hasta cuándo te esconderás de mí? ¿Por qué escondes tu rostro de mí, Señor? Te busco de día y de noche y pareces cada vez más distante de mí. Esta es la experiencia que, como he dicho, debajo del sol, la mayoría de los cristianos muchas veces experimentamos. Es así que, Este salmo habla acerca de eso, de una generación que busca a Dios. Cómo realmente Dios espera que le busquemos. De hecho, en otro salmo dice Dios que Él está mirando desde los cielos para ver si hay alguno que busque. Y hay muchas partes en la Biblia que menciona que Dios extendió todos los días sus brazos, pero no había nadie que acuda a Él. Este salmo está presuponiendo que hay gente que está buscando a Dios, es decir, que está en oración intentando tener comunión con Dios, pero muchas veces no logra. Y eso es interesante. Muchas veces estamos leyendo la Biblia, pero podemos leer la Biblia, como digo, y al mismo tiempo no tener comunión con Dios. y ya sea por una distracción, a veces, no sé si les ha pasado leer la Biblia, estás leyendo pero tu mente está pensando en otras cosas y a veces estás haciendo esto solamente porque hay que hacerlo cada mañana. Pero, como he dicho, la frustración viene al saber de que no podemos tener esa comunión con Dios, no podemos tener muchas veces esa experiencia que, como he dicho David, muchas veces al iniciar sus salmos reclama a Dios porque sabe que la mayor bendición que nosotros vamos a tener debajo de este sol es una comunión íntima con Dios. No hay nada más grande que un creyente puede experimentar en esta tierra, sino que una comunión íntima con Dios. Y como sabemos muchas veces que estas cosas pasan en nuestra vida, Eso se traduce cuando no tenemos mucho compromiso en las cosas del Señor. La iglesia es como, uy, es domingo, hay que ir a la iglesia, ¿no? Eso es como un corazón que está aguantando la situación. Eso se traduce cuando reviso mi lista de oración y veo mis prioridades. Normalmente, no sé, pero cuando tú te agachas o cuando te arrodillas para orar, muchas veces el récord o el parámetro de tus oraciones muestra dónde está tu corazón cuando nuestras oraciones normalmente son como listas de peticiones. y nunca nada pasa. Eso se traduce cuando estamos en la iglesia y tenemos que improvisar nuestro gozo porque no es real, porque tenemos que aparentar algo que no somos. Y eso es porque nuestra comunión con Dios no está como debería. Y este salmo habla de eso, dice el verso 6. Tal es la generación de los que te buscan, de los que buscan tu rostro como Jacob. Y lo que yo hoy día quiero animarles a estudiar estos seis versos, es decir, cómo podemos nosotros llegar a ser esa generación. ¿Qué cosas nosotros tenemos que considerar a la hora de buscar a Dios para realmente poder encontrarnos con Él? En Jeremías hay un texto que dice, dos males ha hecho mi pueblo. Me ha dejado a mí fuente de agua viva y se han cavado cisternas las cuales no retienen agua. Y lo interesante de este Salmo es que, como vamos a ver en el contexto y en las citas que los autores del Nuevo Testamento hacen de este Salmo, es que hay un trasfondo de idolatría. Y lo vamos a ir viendo. Hay un trasfondo de idolatría bien interesante. Y yo creo que en el pastoreo de Dios, en las semanas, los que estamos pudiendo venir, los miércoles, en las predicaciones de domingos, a veces cuando Dios habla una cosa, lo mismo, lo mismo, lo mismo, es porque Dios nos está hablando. Está diciéndonos algo y es importante que tomemos atención. Y es interesante digo esto porque El día miércoles, el domingo, los estudios que tenemos. Era interesante estudiar para mí este salmo y ver cómo Dios, no sólo este salmo como algo independiente, sino como Dios usando todas las enseñanzas para llevar a la iglesia a un mismo destino, a una misma dirección. Y ese es mi ánimo para ustedes. Vamos a comenzar. Entonces dice la primera parte del Señor es la tierra y todo lo que hay en ella, el mundo y los que en él habitan. Lo primero que nosotros vamos a hacer antes de entrar a este salmo es ver el contexto en el cual se ha escrito. Si nosotros, uno de los errores de la predicación, como hemos visto, es no tenemos que agarrar la Biblia directamente, interpretarla y decir qué significa para nuestro tiempo, sino nosotros tenemos que agarrar la Biblia y decir qué significó para el oyente de ese tiempo y de ahí recién sacamos las aplicaciones para nosotros. Por eso es importante al menos intentar entender en qué contexto David dijo estas palabras. La mayoría de los estudiosos están de acuerdo que Este salmo se pronunció cuando el arca del pacto que había sido llevado a cautivo por los filisteos durante el reinado de Saúl era llevado de vuelta a la ciudad de Jerusalén. El arca del pacto, como ustedes saben, estaba adentro a las tablas que Moisés había recibido. Estaba la vara de Arón y estaba el maná. Pero ellos entendían el arca del pacto como la presencia misma. Y ustedes conocen un poco la historia cuando los filisteos llevaron cautiva el arca, robando, por así decir, y las maldiciones que trajeron al pueblo filisteo la presencia de Jehová. Ahora está el rey David, y el rey David se ha propuesto llevar el arca del pacto de nuevo a Jerusalén. Y ese es más o menos el contexto en el que este salmo es pronunciado. Vamos a ver más adelante un poquito acerca del traslado de este arca, pero más o menos para tomar en cuenta cuál fue el contexto en el que se escribió esto. Otra cosa interesante es que, como he dicho, Estos versos están pronunciados en un contexto de idolatría. De hecho, hay versiones como la NBI que en el versículo 4, donde dice, el de manos limpias y el de corazón puro, el que no ha alzado su alma a falsedad, la NBI traduce esa parte como el que no ha alzado su alma a ídolos vanos. falsedad como ídolos vanos y vamos a ver más adelante cuánto este salmo tiene relación con el testamento en relación a la idolatría. Verso número uno dice del señor es la tierra y todo lo que hay en ella el mundo y los que en él habitan. Es común en la poesía ver paralelismos como ustedes pueden ver del señor es la tierra y todo lo que hay en ella. El mundo es como equivalente a tierra y los que habitan en ella como todo lo que hay en ella. Pero al mismo tiempo podemos ver de manera general a manera específica. Del Señor es la tierra y todo. todo lo que hay en ella y después dice de ese todo los que en ella habitan obviamente haciendo una alusión tal vez más específica a los seres humanos empieza diciendo del señor es la tierra y todo lo que hay en ella del señor es el mundo y todos los que en él habitan ahora bien La verdad más básica que deberían reconocer los pueblos paganos, como he dicho, David está llevando el arca del pacto del pueblo de los filisteos a Jerusalén, y estas palabras se pronuncian en ese contexto. Y la verdad más básica que todo pagano en ese tiempo, porque los filisteos eran un pueblo idólatra pagano, debían saber era que Jehová era el dueño del mundo y aún de ellos mismos. Los filisteos, como los demás pueblos que rodeaban a Israel eran idólatras, es decir, servían y adoraban a lo que no era Dios. El Salmo comienza diciendo que el Señor es dueño de todo y de todos. Todo le pertenece a Él y lo dice de dos maneras distintas como lo hemos visto, usando ese paralelismo. Y al mismo tiempo dice que eso es dueño de cada ser humano que existe. Eso quiere decir que nosotros mismos no nos pertenecemos a nosotros mismos. No sé ustedes, pero cuando nosotros pensamos en esclavitud, y eso es lo que está hablando acá, es tan difícil para nosotros de este lado, no sé, pensar en esclavitud, ¿no? porque nunca hemos visto. Normalmente no es algo muy familiar para nosotros cuando es esclavitud. De hecho, en nuestro corazón el término es como reaccionamos contra el término de esclavitud. Pero lo que está diciendo acá es, del Señor es la tierra y los que habitan en ella. Es decir, nuestras vidas no nos pertenecen a nosotros mismos. Nosotros tenemos un dueño. Ahora, ¿cómo deberían, como he dicho, combatir la idolatría en esos días? La enseñanza que combate la idolatría en esos días y en estos días es hablar acerca del atributo, acerca de Dios como creador. Dios como creador. Lo que David está haciendo en medio de esa transición de llevar el arca es mostrar que Dios era el dueño de todo y que merecía la adoración y el servicio que estos paganos le daban a lo que no era Dios. Ahora, Ver a Dios como creador es la enseñanza más básica de las escrituras. Dios es creador, nosotros somos creación, pero también es la enseñanza más desestimada, ignorada y desechada. La falta de entendimiento de esta verdad ha llegado a convertirse en el hombre como la raíz de todos sus males. Piensen un momento conmigo en esto. La falta de entendimiento de esta verdad sencilla que Dios es creador y dueño de todo, ha llegado a convertirse en el hombre en la raíz de todos sus males. Porque como el hombre no toma en cuenta esta sencilla verdad que Dios es creador, el hombre no le da a Dios lo que de él merece. ¿Y qué merece? Honra y gratitud. Y en vez de eso, el hombre se embanece en sus razonamientos su necio corazón se oscurece. Eso es lo que nosotros tenemos en el Romanos 1.21. Entonces, no es exagerado decir que toda la raíz de los mal del hombre viene acerca de no reconocer esta sencilla verdad que Dios es creador y él es creación. Porque al tener un corazón entenebrecido o lleno de oscuridad, ya el hombre no sabe por dónde debe ir. Ya su corazón le ha enseguecido totalmente, ya no tiene un norte, ya no sabe a quien debe temer porque no reconoce a Dios como creador. Ahora, algo importante para nosotros es ¿qué significan estos versos para la iglesia? ¿Qué significa para nosotros saber que Dios es dueño y Señor de todo. ¿Qué significa para nosotros saber que no nos pertenecemos a nosotros mismos? Un autor que voy a estar citando mucho durante este enseñanza es Donnelly, dice, por ser soberano, Dios tiene el derecho de disponer de su creación como a él le plazca. También puede disponer nuestras vidas según su voluntad. Dios no tiene que consultar a nadie acerca de lo que él hace, tampoco tiene que rendir cuentas a nadie. Aunque esto puede sonar a veces muy duro, eso es la realidad de lo que este Salmo está empezando a decir. Yo soy dueño de todo y aún sus vidas me pertenecen. Y yo puedo hacer con ustedes lo que a mí me dé la gana. Eso suena para nosotros como muy... Eso viola nuestra autonomía. Pero eso es exactamente lo que empieza diciendo este Salmo. Yo... Recuerdo una ilustración de una persona que dijo, él hizo una canoa de madera y le puso ahí como su palo para usar la canoa y él lo dejó a la orilla del mar, a un lago o algo así, escuché la historia. Y después una persona preguntó, ¿de quién es esta canoa? Bueno, del que la fabricó. Y él preguntó, si yo vengo y agarro y empiezo a destrozar esta canoa, ¿es correcto hacer eso? Él dijo, no, ¿por qué? Porque no te pertenece a ti. ¿Y qué tal si el dueño, el que la ha fabricado, viene y la destroza y la rompe? ¿Está correcto hacer eso? Él dijo, sí. ¿Por qué? Porque él es el dueño. Es una sencilla verdad que está poniendo acá. No es muy difícil de entender. Sigue diciendo Don Eli. Nos hace bien como creyentes recordar esta gran verdad. Nos ayudaría a valorar más el hecho de ser el pueblo de Dios. Vamos un momento a Éxodo capítulo 19. verso cinco. Éxodo diecinueve verso cinco voy a leer desde el verso tres diecinueve verso tres y Moisés subió hacia Dios y el Señor lo llamó desde el monte diciendo así dirás a la casa de Jacob y anunciarás a los hijos de Israel vosotros habéis visto lo que he hecho a los alas de, perdón, y cómo os he tomado sobre alas de águila y os he traído a mí. Verso 5. Ahora pues, si en verdad escucháis mi voz y guardás mi pacto, seréis mi especial tesoro entre los pueblos, porque mía es toda la tierra. Piensa en un momento, Dios está diciendo, yo soy el dueño de todo, la tierra me pertenece, pero de todo eso, Hay un pueblo que es su especial tesoro, un pueblo que guarda su pacto, un pueblo que le ama, y de todos los pueblos Dios puso sus ojos, dice, en ese pueblo. Deuteronomio capítulo 10, del 14 al 15. Un poquito más atrás. Deuteronomio capítulo 10, del 14 al 15. Dice, he aquí al Señor tu Dios pertenece en los cielos y los cielos de los cielos, la tierra y todo lo que hay en ella. Sin embargo, el Señor se agradó de tus padres, los amó y escogió a su descendencia después de ellos. Es decir, a vosotros de entre todos los pueblos, como se ve hoy. lo que está diciendo el autor que esto anima a los creyentes a ver que aunque Dios cuando nosotros como hemos estado aprendiendo Dios vemos lo que les hizo a los egipcios vemos que o como recuerdan las diez plagas cuando al pueblo de Israel no pasaba las plagas y al pueblo de Egipcio en un mismo lugar le pasaba algo lo que está diciendo acá es al ver estos textos nosotros podemos ser animados para decir que aunque Dios podría haber hecho con nosotros lo que le dé la gana y eso es su prerrogativa, su derecho como creador. Él nos ha hecho parte de su pueblo, de su especial tesoro, y Él nos ha escogido para que nosotros seamos su nación santa, eso es lo que está diciendo. Ahora, quisiera que un ratito vayamos a Corintios capítulo 10. Pablo va a usar lo que nosotros estamos viendo en este salmo, los primeros versículos como argumento en un problema que estaba pasando la iglesia en Corintio. Corintios capítulo 10. Estamos viendo los versos de que de Dios es la tierra, el mundo, todo lo que hay en ella le pertenece a Dios. Y ahora Pablo va a hacer una cita de este Salmo, de este primer verso en Corintios, capítulo 1, y el contexto en el que Pablo va a hablar este verso es idolatría. Otra vez, idolatría. Empieza en el verso En el verso 7 podemos leer, dice, no seáis pues idólatras como fueron algunos de ellos. Según este escrito, el pueblo se sentó a comer y a beber y se levantó a jugar. Verso 14, por tanto, amados míos, huid de la idolatría. Otra vez. Y dice el verso 26, porque del Señor es la tierra y todo lo que en ella hay. Ahora sigue el 31 más abajo. Entonces, ya sea que comáis, que bebáis o que hagáis cualquier otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios. El contexto en el Salmo 24, como hemos visto en ese verso 4, es idolatría, ver a un pueblo idólatra. Y ahora Pablo está haciendo una cita de este Salmo en Corintios 10 y el contexto también es la idolatría. Y noten una cosa. Idolatría es algo tan sencillo como dar mi tiempo y mi dinero a lo que no es Dios. Dar el lugar que a Dios le pertenece. ¿Qué estaba pasando aquí en la iglesia en Corintio? dice el verso 7, no seáis pues idólatras como fueron algunos de ellos, y está describiendo la salida de Egipto y algunos de ellos como qué hicieron después de la salida de Egipto en el contexto. El pueblo se sentó a comer, se sentó a beber y se levantó a jugar. Y no es que haya nada de malo en estas tres cosas, pero lo que está diciendo acá es que Ellos estaban buscando la satisfacción que sólo Dios puede dar en estas cosas básicas de la vida. Comer, beber y jugar. Ellos estaban buscando la felicidad que, como nosotros ya hemos estudiado en el Salmo 1, Dios da en estas cosas sencillas. Entonces Pablo dice, huyan de estas cosas, salgan de estas cosas. y usa el texto porque del Señor es la tierra y todo lo que hay en ella. El verso 22, miren lo que dice en ese mismo capítulo, dice, ¿O provocaremos a celos al Señor? ¿Somos acaso más fuertes que él? Cada vez que nosotros nos comportamos como estamos viendo acá, este pueblo que estaba viviendo para buscar estas cosas, ¿no? A la comida, vestimenta, o sea, viviendo para el placer momentáneo, entonces nuestros corazones son idólatras, es lo que está diciendo. Y lo que hacemos es provocar a celos a Dios. Y cuando nosotros entendemos esta palabra celos, Obviamente es porque lo que nosotros estamos dando a estas cosas terrenales es lo que le debemos dar a Dios, y eso le provoca celos. Pero al mismo tiempo, no solo es, por así decir, el beneficio totalmente para Dios, sino también para nosotros. ¿Por qué? Porque Dios sabe que la idolatría promete cosas que no va a cumplir. Dios sabe que nosotros vamos a perseguir estas cosas queriendo obtener algo que nunca vamos a hallar. Y como Dios sabe eso, es por eso que nos llama a salir de esa idolatría. Muchos de nosotros tratamos de buscar este texto en Colosenses 3, 5, un ejemplo de idolatría para nosotros en este tiempo. Por ejemplo, Colosenses capítulo 3, verso 5, miren lo que dice ahí. Colosenses 3, verso 5, el verso 2 dice, poned la mira en las cosas de arriba, no en las cosas de la tierra. Verso 5, por tanto considerad los miembros de vuestro cuerpo terrenal como muertos a la fornicación, a la impureza, a las pasiones, a los malos deseos y a la avaricia que es idolatría. Y a la avaricia que es idolatría. Y yo creo que este es un buen ejemplo para nuestra generación acerca de algo tangible para la idolatría, que esa avaricia es buscar por todos medios, querer, tener, tener, tener. Y lo que está diciendo acá, y nosotros hacemos eso porque creemos que cuando tengamos eso, nosotros vamos a hallar una satisfacción que Dios dice nunca la van a hallar, nunca la van a hallar. Pero lo que pasa es un engaño. La idolatría es un engaño para nosotros mismos. Y aunque muchos de nosotros entendemos esto, seguimos corriendo tras estas cosas. Entonces, cuando Dios dice en Corintios, están provocándome a celos, primero es porque eso que le están dando, eso me lo deben a mí, pero también eso que le están dando, eso les va a causar daño solo a ustedes. Entonces Pablo dice, ¿y cuál es el argumento? Ahora, miren en este contexto de Corintios 10, que es la idolatría, ¿cuál es el argumento que Pablo usa para decir por qué no deben ser idólatras? Porque del Señor es la tierra y todo lo que hay en ella. Porque del Señor es la tierra y todo lo que hay en ella. ¿Qué está diciendo? Cada vez que mi corazón se vuelve idólatra, lo que yo debo meditar, si yo quiero ser una generación que busca a Dios, es pensar a quién le pertenezco, quién es creador, quién es digno de que me esté afanando, de que esté gastando mi energía, mi dinero. Tengo que meditar acerca del atributo de la creación de Dios. que Dios es dueño. Él merece nuestro tiempo, nuestro dinero. Entonces, noten que el argumento aún en Corintios es acerca de idolatría y la solución, dice Pablo, a la idolatría es el argumento de poner que Dios es dueño, que Dios le pertenece a mi vida. Piensen un momento conmigo en esto. Si yo trabajo en un establecimiento educativo, yo sé quién es la autoridad ahí. Si yo pertenezco a una familia y soy hijo, yo sé quién es la autoridad en la casa. Pero a menudo yo no reconozco la autoridad de Dios, ni sus derechos sobre mí. La pregunta es por qué a veces nos cuesta tanto ver quién tiene la autoridad en esta creación y en nuestra vida. Es evidente que la presencia de la autoridad es de total relevancia para su autoridad. Quiero decir con esto que la autoridad le da a Es decir que el hecho de que nuestros ojos terrenales muchas veces no ven a Dios, nos hacen vivir como si él no fuera el dueño y él no estuviera. Y eso es una gran verdad, ¿no es verdad? Cuando tú vas a un trabajo y no ves al gerente y no ves al dueño y te dicen un día va a llegar, con el tiempo tú tiendes a trabajar y a vivir como si él nunca iría a llegar. El hecho de que no poder, yo estoy trabajando en un colegio y cada día la veo a la directora y sé cómo me debo comportar porque yo sé que ella es la autoridad. Pero lo que está pasando con nosotros normalmente es que no tenemos muchas veces conciencia, aunque tú entiendes que Dios es autoridad, cada día no estamos conscientes de que este mundo no es nuestro y que un día le vamos a dar cuentas a alguien porque nuestros ojos nos engañan. Y eso es una gran verdad que cada uno de nosotros experimenta. Entonces, Lo que está diciendo el autor de Salmos es, medita a menudo en a quién le pertenece todo y a quién le perteneces tú mismo. La solución para esto es meditar conscientemente la presencia de Dios en su creación. Sigue diciendo el Salmo 24, volvemos allá. del Señor es la tierra y todo lo que hay en ella, el mundo y los que en él habitan, porque Él la fundó sobre los mares y la asentó sobre los ríos." Noten el argumento que Dios da, otra vez no es nada difícil de entender. ¿Por qué a Dios le pertenece todo? Porque Él lo creó, porque Él lo hizo. Dice el Salmo 89, verso 11, tuyos son los cielos, tuya también la tierra, el mundo y todo lo que en él hay. Tú lo fundaste. Ahora, estas palabras, normalmente cuando hablamos de que Dios es creador, que él ha fundado la tierra, no es difícil de entender, pero aquí hay unas partes un poco técnicas, difíciles un poco de entender acerca de que Dios fundó sobre los mares y la asentó sobre los ríos. Otra vez Donnelly, este autor que es de mucha ayuda para esta enseñanza, dice, ¿cómo debemos interpretar estas frases? Algunos comentaristas afirman que lo que David aquí dice concuerde exactamente con la estructura de la Tierra. Según los geólogos, los continentes flotan como isla sobre las placas tectónicas que subyacen sobre los océanos. Aunque esto es cierto, es de dudar que David estuviera diciendo esto. más bien debemos entender estas palabras como la descripción poética basada en la cosmovisión del Antiguo Testamento. ¿Y cómo era esa cosmovisión en el Antiguo Testamento? Génesis del 1 del verso 9 al 10 indica que la creación, que en la creación recuerdan esa parte donde Dios dice que separó las aguas de las aguas y de las aguas separó lo seco de las aguas. ¿Qué entendía un judío acerca de la creación? Y lo que está diciendo es el autor de Salmo 136, verso 6, menciona esto para que nosotros podamos entender este verso. Salmo 136, verso 6, es un un versículo clave para entender lo que aquí está diciendo el autor. Salmo 136, verso 6 dice, Al que extendió la tierra sobre las aguas, porque para siempre es su misericordia. al que extendió la tierra sobre las aguas, porque para siempre es su misericordia. Segunda de Pedro, capítulo 3, verso 5. Estamos viendo acerca de qué significa que Dios ha fundado la tierra sobre las aguas. Segunda de Pedro, capítulo 3, verso 5. Dice, pues cuando dicen esto no se dan cuenta de que los cielos existían desde hace mucho tiempo y también la tierra surgida del agua y establecida sobre las aguas por la palabra de Dios. La tierra surgida del agua y establecida sobre las aguas por la palabra de Dios. Y aquí dice, porque él la fundó sobre los mares y la asentó sobre los ríos. Cuando un judío estaba en la orilla del mar, contemplaba la tierra seca y tenía la impresión de que la tierra salía del mar y tenía sus raíces en las aguas de los océanos. Es así que el autor aquí está diciendo, y nosotros sabemos que en el planeta que vivimos tiene más agua que tierra, y por eso la primera idea acerca de los geólogos tiene total coherencia con lo que aquí David está diciendo, que las tierras son como islas que están flotando sobre las aguas. Ahora, otra vez volviendo al argumento, el punto acá es más que ver sobre las aguas y el poder de Dios, es ver a Dios como creador y dueño de todo, y su derecho es porque Él lo hizo. El argumento es muy sencillo. Ahora, noten otra vez que este salmo ha sido pronunciado en un pueblo pagano, rumbo hacia Jerusalén. La pregunta es, ¿podían los paganos filisteos entender esta sencilla verdad que Dios era creador y dueño de todo? Obviamente no. Este es un argumento tan sencillo como el que mencionas Rato, cuando alguien dice, esta silla me pertenece, ¿por qué? Porque es mía, esta polera me pertenece, ¿por qué? Porque yo la hice. Pero un incrédulo no puede entender este sencillo argumento y no puede vivir en conformidad con esto. Algo que nosotros hemos estado estudiando acerca del Evangelio, Hubo una pregunta un día miércoles acerca de cuál es el propósito del evangelio en la vida de los seres humanos. Cuál es el propósito del evangelio o los propósitos del evangelio. Y una de las cosas que a menudo yo no estaba pensando, uno era que el evangelio nos libra de la condenación eterna de la ira de Dios. El evangelio nos libra de la condenación eterna de la justa ira de Dios. Pero al mismo tiempo el Evangelio restaura la condición inicial para la que fuimos creados. ¿Y cuál era esa? Gozar y tener comunión para siempre con Dios. Una persona que ha sido convertida a Cristo ya puede buscar a Dios, ya puede tener comunión con Dios. Aunque el pecado more en nosotros, un incrédulo no tiene ese privilegio. Un incrédulo como los filisteos no podían entender esta sencilla verdad. Pero nosotros que somos creyentes ya podemos tener esta comunión, esta intimidad por el poder del Evangelio en nuestras vidas. El verso 1 dice que de Dios es todo, a Dios le pertenecemos y la razón que Dios nos da para eso es porque Él lo hizo, porque Él nos formó. Si queremos ser una generación que busca de verdad a Dios, debemos luchar contra la idolatría en nuestras vidas y debemos meditar a menudo en el derecho de Dios sobre su creación. Una de las frases muy conocidas de Agustín de Hipona fue, tú nos has creado para ti, oh Señor, y nuestros corazones estarán errantes hasta que descansen en ti. En sus confesiones Agustín dice, tú nos has creado para ti, oh Señor, y nuestros corazones estarán errantes hasta que descansen en ti. Hemos sido creados para él, por él, y nuestro descanso y nuestra confianza debemos llevarla a él. Otro texto que hemos estado viendo a través de estos estudios es, ¿y cómo se ve en la práctica esto? ¿Cómo se ve una iglesia saliendo de la idolatría? ¿Cómo se ve una iglesia que está practicando la presencia del Señor? Y un ejemplo bien palpable de esto está en Primera Tesalonicenses, capítulo 1, verso 9. Un texto que también lo hemos ido viendo en los miércoles. Primera Tesalonicenses, capítulo 1, verso 9. dice Pues ellos mismos cuentan acerca de nosotros de la acogida que tuvimos por parte de vosotros y de cómo os convertiste de los ídolos a Dios para servir al Dios vivo y verdadero. ¿Cómo os convertiste de la idolatría a Dios para servir al una muestra de que... de que nuestra comunión con Dios, de que nuestro contacto con la presencia de Dios no está muy bien, es que nuestro servicio en la iglesia es pobre, nuestro compromiso con el amor en la comunión con los hermanos es bajo. Y aquí lo que dice es que esta iglesia se había convertido de sus ídolos a Dios para servirle. Es decir, no solamente se habían apartado de sus ídolos, sino que habían empezado a extenderse al servicio de Dios y servirle al Dios vivo y verdadero. Una iglesia con fe, amor y esperanza puesta solo en el Señor Jesucristo nos habla de dejar la idolatría y de seguir a Cristo. El primer versículo dice que Dios es el dueño de todo, que Él la fundó. Después, nosotros encontramos el verso 3, donde dice, ¿Quién subirá al monte del Señor y quién podrá estar en su lugar santo? ¿Quién subirá al monte del Señor? ¿Y quién podrá estar en su lugar santo? Como he dicho, el contexto en el que se ha llevado a cabo este salmo fue el traslado del arca del pacto hacia Jerusalén. Y recuerdan cuando David iba danzando de alegría porque el arca por fin estaba volviendo a su lugar donde debía estar. Pero antes, ese fue el segundo intento de llevar el arca a Jerusalén, porque en el primer intento pasó algo. y quisiera que juntos podamos ver segunda de samuel capítulo 6 del 6 al 7 segunda de samuel capítulo 6 del 6 al 7 el segundo intento es el contexto de nuestro salmo pero el primer intento algo pasó y en el primer intento tenemos nosotros voy a leer desde el verso 1 dice Volvió David a reunir a todos los hombres escogidos de Israel, treinta mil. Y David se levantó y fue con todo el pueblo que estaba con él a Baala y Judá, para hacer subir de ahí el arca de Dios, la cual es llamada por el nombre. el nombre del señor de los ejércitos que está sobre los querubines. Pusieron el arca de Dios sobre un carro nuevo para que pudieran llevar de la casa de Abinadad que estaba en la colina. Usa y Ahío, hijos de Abinadad, guiaban el carro nuevo. Y lo llevaban con el arca de Dios de la casa de Abinadad que estaba en la colina. Y Ahío iba delante del arca. David y toda la casa de Israel se regocijaban delante del Señor con toda clase de instrumentos hechos de madera de abeto y con liras, arpas, panderos, catañuelas y címbalos. Pero cuando llegaron a la era de Nacón, Usa extendió la mano hacia el arca de Dios y lo sostuvo porque los bueyes casi lo volcaron. y se encendió la ira del Señor contra Usa y Dios lo hirió ahí por su irreverencia y ahí murió junto al arca de Dios. Ahora, noten esta escena. Esta es la segunda vez, como he dicho, del Salmo, pero la primera oportunidad, dos bueyes están jalando el arca del pacto, uno va adelante y uno va atrás. Los bueyes, tal vez era un poco el camino no muy firme, los bueyes tiran y el arca se está cayendo y lo único que usa hace es querer evitar que el arca se caiga y pone su mano y toca para sostener el arca y Dios dice que ahí mismo lo mata. Ahora David está preguntando en el Salmo 24 ¿Quién subirá al monte santo? ¿Quién podrá estar en la presencia del santo, la segunda cosa que nosotros tenemos que tener considerado cuando estamos buscando a Dios es reconocer la santidad de Dios. Reconocer que nuestro Dios no es como los otros dioses. Ejemplos como los de USA hay muchos en la Biblia. Dice el pastor Sprull al respecto de la mano que puso Uzzá en el arca para evitar que se cayera. Dice, Uzzá pensó que su mano era más limpia que el barro donde caería el arca. Nosotros tenemos otro ejemplo de algo similar que pasó en Levítico, capítulo 10, verso 1 al 3. Levítico, capítulo 10. Verso uno, igual, un texto muy conocido por nosotros, Levítico, verso uno, dice, Navad y Abiú, hijos de Arón, tomaron sus respectivos incenciaros, y después de poner fuego en ellos, y de echar incienso sobre él, ofrecieron delante del señor fuego extraño, que él no les había ordenado. Y de la presencia del Señor salió fuego que los consumió y murieron delante del Señor. Entonces Moisés dijo a Aarón, esto es lo que el Señor habló diciendo, como santo seré tratado por los que se acercan a mí, y en la presencia de todo el pueblo seré honrado. Es interesante que si ustedes siguen viendo más abajo, Y Navad, hijos de Aarón, Dios ni siquiera le deja hacer duelo a Aarón por sus dos hijos. De hecho, les dice, no hagas duelo. Sus parientes, ellos lo van a enterrar. Tú sigue. Porque estaba escrito así. ¿Dios tomó tan en serio la irreverencia de los hijos de Aarón? ¿Dios tomó tan en serio la irreverencia de Usa? Nosotros tenemos también el mismo ejemplo en Hechos capítulo 5 acerca de la muerte de Ananías y Zafira. Estaba leyendo un comentario de Donald Carson, en mi devocional, y él decía que siempre cuando Dios está levantando una obra o está haciendo algo nuevo, y pasan estas irreverencias en cuanto a su santidad, Dios siempre castiga o hace un juicio donde no hay vuelta atrás. Eso es algo bien interesante porque cuando vemos la mentira de Ananias y Zafira y vemos muchas mentiras de otras personas en el Nuevo Testamento, la pregunta que nos viene a la cabeza es ¿por qué Dios trató a ellos de esa manera y no a ellos de otra manera? ¿Por qué trató de esa manera a Usa? ¿Por qué Nabaf y a Dios murieron de esa manera? Entonces David otra vez hace la pregunta ¿Quién es el que va a subir al santo monte de Dios? Nosotros en este nuevo pacto sabemos que nosotros tenemos acceso libre a la presencia de Dios por lo que Cristo ha hecho en favor de nosotros. Pero yo creo que muchas veces eso ha hecho que nosotros menospreciemos el cómo vamos a la presencia de Dios. De hecho, muchas veces, no sé si ustedes recuerdan cuando Moisés está recibiendo las tablas en el monte, Dios dice que nadie ni siquiera se acerque al monte. Y de hecho dice que el pueblo estaba aterrorizado y le decían a Moisés, intercede tú por nosotros porque nosotros no queremos ir a tener contacto con Dios. Cuando Dios le dijo a Josué que mañana me voy a encontrar con ellos, con ustedes, perdón, como pueblo, ¿qué es lo primero que le pidió a Josué? Santifica al pueblo porque mañana me encontraré con ustedes. Y aunque eran parte del pueblo de Dios, Dios les dice, santifíquense. Y Josué le dice, mañana Dios se va a encontrar con nosotros santificados. Y el pueblo en todo, con una voz en plural, todos empiezan a guardar y a purificarse su vida. De hecho, nosotros encontramos la ilustración en el Antiguo Testamento del sumo sacerdote que tenía que entrar con una campanita en el cuello al lugar santísimo para ver si caía muerto o volvía a salir. Porque era algo tan importante que él estuviera limpio su vida pura. Ahora David en este salmo pregunta ¿Quién va a subir al santo monte y quién va a estar en la presencia de Dios? Nuestro Dios es santo y debemos poner realmente las cosas en perspectiva. ¿Recuerdan el encuentro con Dios y Moisés? Cuando se está encontrando en la zarza diente, el primer encuentro, Moisés se está acercando y Dios le dice, detente, quita tus calzados porque este es lugar santo. Yo creo que muchas veces, como he dicho, a veces esta semana estábamos hablando con mi hijo porque le decíamos, ¿puedes orar por la comida? Ni estoy terminando en pedirle de orar y él normalmente ya estaba orando, ¿no? y tenía que decirle, al poquito tienes que pensar a quién estás hablando. A veces es muy notoria en nuestras oraciones nuestra irreverencia, como nosotros entramos al lugar santo y vamos a ver más adelante acerca de qué es lo que realmente está hablando este Salmo. Pero si tomamos estas palabras literales, el lugar santo literalmente, entonces la pregunta de este Salmo es, ¿Quién está en condiciones para ingresar a la presencia de Dios y servirle? Dicha pregunta sería dirigida directamente a los sacerdotes que oficiaban en ese tiempo, pero también a los judíos piadosos que de manera genuina querían tener comunión con Dios. Y en este nuevo pacto nosotros decimos que la iglesia es donde la presencia de Dios. La iglesia es el cuerpo de Cristo y cada creyente, dice Pedro, es como un sacerdote Y nosotros debemos estar haciéndonos esta pregunta para entrar a la presencia de Dios. Hay dos verbos ahí importantes para nosotros. Dice, ¿Quién subirá y quién podrá estar? ¿Quién subirá y quién podrá estar? Subir algo cuesta sacrificio. Permanecer en algo no es nada sencillo. Esta semana, como compartí el día miércoles, estoy leyendo en mi lectura bíblica el libro de Levítico. Y no sé ustedes, pero los que han podido pasar por Levítico y ver acerca de los sacrificios tanto por la culpa como la ofrenda por paz que ellos hacían, era algo que les costaba mucho. Yo creo que cada persona que iba y hacían esto conjuntamente con el sacerdote, No creo que todos tendrían la profesión de como carnicería, porque si ustedes leen a detalle lo que ellos tenían que hacer, tenían que degollar al animal, tenían que sacar la grasa que estaba cubriendo los riñones, tenían que sacar las patas, la cola, ponerlo en un lugar. tenían que quemar algo, tenían que... Y uno piensa cómo realmente ha podido hacer eso. No era algo tan sencillo. Era algo que llevaba tiempo. Ver un animal sufriendo, ver el detalle de sacar la sangre, hacer llorar una parte al pie del altar. Era todo un ritual y era algo que llevaba tiempo. Como he dicho y cuando nosotros leemos en Romanos capítulo 12, donde dicen, no nos conformemos a este mundo, sino que nuestros cuerpos debemos presentar en sacrificio vivo, Es algo que, como dice acá, cuesta subir y permanecer. Empecé diciendo esta enseñanza que normalmente nosotros tenemos comunión y muchas veces experimentamos la presencia de Dios en nuestras vidas y realmente Dios viene y nos habla de una manera tan personal, pero no siempre pasa eso, porque no siempre podemos permanecer en ese monte en plena comunión con Dios. Para eso requiere esfuerzo. Y eso es algo importante que Dios puede producir en nuestros corazones, pero al fin y al cabo somos nosotros los que lo vamos a hacer. Piensa en un momento en eso, lo que significa en el día a día. Como he dicho, este Salmo presupone que las personas están yendo y están buscando a Dios. Y como alguien ha dicho, los tiempos con Dios no se encuentran, se fabrican. No sé ustedes, pero cuando empezamos enero, normalmente muchos de nosotros tenemos metas, objetivos en cuanto a, por ejemplo, la lectura de la Biblia. Hoy me propongo leer la Biblia tapa a tapa este año. Llegamos enero, febrero, y ya van varios capítulos que nos hemos saltado, ya van libros que nos hemos comido. Y ya está acabando el año y decimos, al otro año lo vamos a acabar. Y casi nunca podemos tener eso. Y creo que todos experimentamos con eso. Como alguien ha dicho, es más fácil a veces leer el periódico que la Biblia. Y eso es por la naturaleza que todavía mora en nosotros, pecaminosa. Pero lo que está diciendo acá, quién subirá y quién permanecerá, hermanos, es algo que no va a ser sencillo. Es algo que nos va a costar. es en las mañanas cuando ya viene el tiempo del invierno y en las mañanas que estemos ahí pensando un momento más, un momento más, el hecho de levantarse y tener comunión con Dios. O a veces incluso cuando leo la Biblia y siento que, o aún mis emociones, parece que Dios no viene, no me habla, y poco a poco ya dejo de hacer eso. Algunos tal vez están acá que han tocado la Biblia de día en día, día intercalado, otro día, otro, solamente el domingo, Es algo importante. Lo que está diciendo acá es lo primero está presuponiendo que los que le van a buscar van a preparar su corazón para buscarle a Dios. Se van a limpiar, se van a santificar y llegamos a nuestro tercer punto. Cómo lo van a hacer? Verso número tres dice perdón a verso número cuatro dice el de manos limpias y de corazón puro. El que no ha alzado su alma a la falsedad oído los vanos ni ha jurado engaño, el de manos limpias y el de corazón puro. Esto nos habla acerca de una pureza externa y una pureza interna. ¿Recuerdan este pasaje cuando cuando Jesús está diciendo que cuando les está lavando los pies a sus discípulos y dice que si no y Pedro dice a mí no me vas a lavar los pies y le dice a Pedro si no te lavo los pies no tienes parte conmigo en el reino y Jesús le dijo y Pedro después le responde y le dice no me laves los pies y no lávame todo le dice y Jesús le responde los que ya están lavados no tienen necesidad de ser lavados otra vez y después habla acerca de la limpieza, y lo que estaba hablando Jesús en ese símbolo, en esa forma que él estaba hablando acerca de los pecados, la suciedad que los pies tienen al caminar en esta vida, y lo que está diciendo acá, el de manos limpias y el de corazón puro. Hay oraciones, hermanos, que muchas veces hacemos a Dios que no pasa del techo y la razón es porque hay pecados, hay cosas que no están confesadas en nuestra vida. Una forma de limpiar nuestro corazón y limpiar nuestras manos es primero pensar, ¿hay algo que está interponiendo mi comunión con Dios? Y normalmente, obviamente es el pecado. Nosotros tenemos textos en la Biblia como el de Josué. ¿Recuerdan cuando Josué va a llegar a la gran batalla de Hai y van a ser vencidos y José se va a postrar en la tierra? Y va a decir, ¿para qué, Señor, nos has hecho eso? Y Dios le dice, levántate. ¿Por qué? Porque hay pecado en el pueblo. Es como si de en vano estás orando. No voy a escuchar. Y de hecho les dice, no estaré con ustedes ¿hasta qué? Hasta que saquen el anatema de vuestra vida. Y lo repito otra vez, no voy a tener comunión con ustedes hasta que saquen eso de su vida. Aquí dice el de corazón puro y el de manos limpias. Y este es un llamado de Dios para nosotros acerca de poner las cuentas en orden con Dios. Nosotros sabemos que solo por pasar por este mundo nuestras manos se van a ensuciar, nuestros corazones no son puros, de hecho la Biblia dice que nacemos en pecado. Y entonces lo que está diciendo esta parte es que antes de ponerme de rodillas yo debo reflexionar acerca de esos pecados no confesados, si realmente estoy limpio delante de Dios. Al menos no recuerdo los pecados conscientemente que he cometido. Yo creo que es un afrenta a Dios, decirle como esa alabanza que cantamos, examíname oh Dios y prueba mi corazón cuando conscientemente yo sé que hay cosas que no están resueltas en mi vida. Eso es hipocresía. David oraba y decía que Dios le examinaba porque él sabía que habían pecados que ni siquiera se daban cuenta. Y eso pasa muchas veces. Hay pecados que ni nos damos cuenta y nosotros necesitamos pedirle a Dios que nos ayude a examinar. Capaz he hecho algo que no estaba bien. Ahora noten algo interesante acá. Dice el de corazón puro y el de manos limpias. En otras palabras, una persona con un corazón íntegro. ¿Cómo se ve eso en la práctica? Vamos un momento al salmo quince, salmo quince es una explicación más o menos del salmo veinticuatro de cómo se ve una persona con un corazón íntegro, una persona que quiere estar en la presencia de Dios, que quiere tener comunión con Dios, dice el salmo quince verso uno, señor, ¿quién habitará en tu tabernáculo y quién morará en tu santo monte? El que anda en el que habla verdad en su corazón, el que no calumnia con su lengua, no hace mal a su prójimo, ni toma reproche contra su amigo, en cuyos ojos el perverso es menospreciado, pero honra a los que temen al Señor, el que aún jurando en perjuicio propio no cambia, el que su dinero no da con interés, ni acepta soborno contra el inocente, El que hace estas cosas permanece firme. Y estas son cosas bien tangibles para nosotros. Lo primero que menciona acerca de un corazón íntegro es, ¿qué tal tu lengua? ¿Normalmente estás habituado a decir mentiras? Calumnias, personas que están hablando de otras personas cosas que no son verdad, el que está pensando hacerle mal a su prójimo, el que no toma reproche contra su amigo, en cuyos ojos el perverso es menospreciado, pero honra a los que temen al Señor. Y aún jurando en perjuicio propio no cambia. el que su dinero no da con interés ni acepta soborno contra el inocente. Estas son algunas características de una persona con un corazón puro, con manos limpias. Y nosotros debemos estar pensando en esto, hermanos. Cada vez que nosotros venimos a la reunión de oración los miércoles o cuando tenemos aquí el domingo un tiempo para orar en silencio y pensar, pedirle realmente a Dios conscientemente Esto es una muestra de los tantos pecados que uno puede cometer y decir, mis manos están limpias, mi corazón está puro. Porque les digo, hermanos, que si eso no es verdad, nuestra oración no va a pasar, como he dicho de este techo. De hecho, en el Nuevo Testamento dice que el que no trata a su esposa como vaso frágil, sus oraciones tendrán estorbo. Y eso es bien interesante, ¿no? ¿Por qué digo esto? Porque los que estamos casados, yo estaba pensando ayer en la reunión de matrimonios, otra cosa sería hacer reunión de matrimonios en la mañana y otra cosa es hacerlo en la noche. ¿Han pensado en eso? ¿Saben por qué? Porque en la mañana nos levantamos, todo anda bien, pero cuando es en la noche hemos tenido todo un día para mostrar un poquito nuestra naturaleza. Y cuando vamos en la noche y a veces el pastor nos hace preguntas de cómo están sus matrimonios, no queremos opinar mucho, porque aún en ese día o del día siguiente venimos arrastrando algunas cosas que no andan bien. Entonces dice que nosotros debemos limpiar nuestros corazones, purificar nuestras almas. Y sigue diciendo, el que no ha alzado su alma a falsedad ni ha jurado con engaño. Como he dicho hace rato, esta palabra falsedad es fácilmente traducida el que no ha desviado su corazón a ídolos, a dioses falsos, el que está persiguiendo esas cosas y también dice el que no ha jurado con engaño. Y esta frase se refiere, dice Donnelly, a las promesas que hacemos, pero al hacerlas no tenemos la intención de cumplirlas o con una intención diferente a la expuesta. Estas promesas pueden ser hechas a los hombres o a Dios mismo. Piensen, y hace rato leíamos en el Salmo 15, que aún cuando doy mi palabra, y esa palabra viene en mi perjuicio, no por eso cambio. Y aquí dice, doy mi palabra por algo y tengo la intención de hacer ese algo. O doy mi palabra y digo que voy a hacer algo cuando en mi mente yo tengo ya otra intención y solo estoy diciendo, por ahora nomás le estoy diciendo así, como es normal en nosotros hacer. El que da sus promesas y cumple tanto a los hombres como a Dios. Y eso es algo que Creo que todos nosotros estamos experimentando en trabajar en nuestras vidas, en cuanto a decir y hacer. Ayer estábamos otra vez en la reunión de matrimonios y estábamos hablando acerca de cómo pedimos perdón, ¿no? Cuando alguien se acerca y dice, hermano, te quiero pedir perdón por esto. Y la otra persona dice, ¿de verdad has pecado contra mí y te perdono? Y a veces, ¿cómo se ve? Nos preguntaba el pastor. Esta semana, una persona me escribió al WhatsApp, Y decía, porque él tenía que pasar a buscar unas cosas en la librería, no lo hizo. Y él puso un texto largo donde decía, hermano querido, y así un protocolo, y decía, de verdad, necesito arrepentirme delante de Dios por la maldad que he hecho o algo así. Te quiero pedir perdón. Y yo estaba pensando en lo que anoche escuchábamos acerca de cómo miraba esa persona y como he dicho, ¿no? Solo era recoger, no era para tanto, digamos, ¿no? Pero esa persona tomaba en serio su palabra. Él dijo algo y no lo cumplió. Y él decía, necesito arrepentirme por lo que he hecho. Entonces acá dice, el empeño y el compromiso que ponemos en nuestras palabras, si realmente tenemos la intención de cumplirla. Y nosotros tenemos en el Antiguo Testamento donde dice, Mejor es que no hagas promesas, que las hagas y no las cumplas. ¿Cómo manejamos cuando nuestra lengua es más rápida que nuestra cabeza? Después dice, sigue diciendo el Salmo 24, Él recibirá bendición del Señor y justicia de Dios de su salvación. Él recibirá, esta persona recibirá la bendición del Señor y la justicia del Dios de su salvación. La pregunta para nosotros es ¿a qué tipo de bendición se está refiriendo? Bueno, por el contexto nosotros entendemos que la pregunta es ¿quién va a estar en la presencia de Dios? ¿Quién va a estar delante del santo? Y dice, el que limpia su mansión, el que vive con santidad, con integridad, el que se presenta hacia el Señor. Y ahora dice este verso, esa persona va a recibir la bendición del Señor. ¿Qué bendición? Gozar de la presencia de Dios. No sé ustedes, pero esta es una gran bendición. gozar, tener comunión con Dios. De hecho, nosotros cuando leemos los salmos encontramos a un David que varias introducciones dice, ¿Dónde estás, Señor? No te veo, no te escucho, Señor. ¿Por qué estás tan lejos de mí? De hecho, esa es la razón por qué Moisés le dice a Dios, quiero verte, quiero verte. Debajo del sol, hermanos, nosotros no vamos a experimentar nada que tenga mayor placer que disfrutar de la presencia de Dios. De hecho, eso va a ser el cielo. El cielo va a ser el cielo porque el pecado ya no va a estar en nuestros corazones y vamos a poder tener comunión con Dios permanentemente, sin interrupciones. La frustración que ahora experimentamos es porque por el pecado nosotros no podemos tener cada día esto con Dios, pero eso va a ser el cielo. Entonces, ¿qué bendición? La bendición de gozar de la presencia de Dios la bendición de ver el rostro de Dios, de ver que el Todopoderoso se mete en nuestras pequeñas vidas y nos da dirección, nos habla, nos consola de una manera tan personal. Eso es una gran bendición. Pero saben, al mismo tiempo, esta semana en mi lectura bíblica encontré algo que me hizo pensar. No solo esta es la única bendición que nosotros tenemos cuando limpiamos nuestras vidas, cuando preparamos nuestro calzón para buscar a Dios, No es la única bendición tener un encuentro con Dios. Una cita que me llamó la atención acerca de para qué limpiar mis manos, para qué purificar mi corazón, fue Proverbios capítulo 20, versículo 7. Miren este proverbio. En mi lectura bíblica lo encontré y me hizo pensar acerca de eso. ¿Por qué vivir una vida de integridad? Proverbios capítulo 20, versículo 7 dice, Dice, el justo anda en su integridad. Cuán dichosos son sus hijos después de él. Y llamó mucho mi atención, mientras estudiaba este tema, este versículo, y lo quería decir a ustedes. ¿Por qué? Porque semanas pasadas hablaba con una persona que tiene hijos jóvenes, y él me decía, no sé por qué mis hijos no quieren ir a la iglesia. No sé por qué mis hijos no quieren saber nada del Señor. De niños iban, y realmente me preocupa que ellos estén así. Entonces le compartí un libro que había leído, o al menos una parte, y era una cita que yo leí en la parte de atrás donde decía Ray Comfort, el 80% de los hijos de pastores y misioneros a la edad de 18 años se apartan de los caminos del Señor para no volver nunca más. Y eso era en base a una estadística que hicieron en los Estados Unidos. ¿Y por qué razón los hijos llegan a una edad donde se apartan del Señor y no quieren saber nada de Él? Muchas veces es por el ejemplo de la integridad de los padres. Y aquí lo que está diciendo, el justo anda en su integridad. Cuán dichosos son los hijos después de él. Y yo pensaba, va a llegar un tiempo los que somos papás, que nuestros hijos van a salir de casa. Y vamos a poder tener la tranquilidad de decir que hemos hecho bien nuestro trabajo y ellos pueden conducirse bien. Eso va a traer gozo a nuestro corazón, tranquilidad. Y cuando miraba la experiencia de este amigo, pensaba en lo que otros hoy están llorando. Otros pueden tener gozo y tranquilidad al saber que andaron con integridad y sus generaciones fueron bendecidas. Entonces la integridad, esa santidad, no solo tiene bendición en cuanto a la comunión, la presencia de Dios, sino aún en tus generaciones que vienen después de vos. Sigue diciendo el texto en Salmo 24, Tal es la generación de los que te buscan. Tal es la generación de los que te buscan. de los que buscan tu rostro como Jacob. Y esta palabra buscar, dice este autor Donnelly, significa caminar o frecuentar. Por tanto, una persona que busca a Dios en el sentido del verbo hebreo es alguien que camina hacia Dios, que frecuenta su presencia. Hay una hermosa promesa relacionada, dice este autor, con este verbo. En Deuteronomio 4, 29 dice, David, el autor de este Salmo, era un hombre que buscaba a Dios con todo su corazón. Y nosotros tenemos muchos versos acerca de eso. De hecho, un ejemplo de eso era en el Salmo 27, 8, dice, Tu rostro buscaré, oh Jehová. David anhelaba estar en la presencia de Dios cada día. Otra vez es importante para nosotros recordar que los tiempos, como he dicho al rato con Dios, no se fabrican, perdón, no se encuentran, sino se fabrican. Nosotros debemos estar pensando en esto, hermanos, acerca de buscar a Dios. la cita que está en romanos capítulo 3 donde dice no hay quien busque a dios es una cita de personas incrédulas pero eso no tiene que ser una descripción para creyentes y esa es una cita del antiguo testamento cuando dice dios y dios miró desde los cielos para ver quién habría de buscarle buscar a Dios. Hay tantas promesas en la Biblia donde dice acérquense a mí y yo me acercaré a vosotros. los que buscan al Dios y al Dios de Jacob. Y esa palabrita que está ahí, al Dios de Jacob, es muy importante para nosotros. Dice el autor Donnelly, al usar el nombre de Jacob con referencia al pueblo de Israel, David está enfatizando la misericordia de Dios. Jacob fue un hombre tan carnal, sin embargo Dios en su gracia y en su misericordia se manifestó a él y fue poco a poco trabajando en su carácter. Buscar y hallar a Dios ejerce un tremendo poder santificador en nuestras vidas. Piensen en esto. Jacob, y cuando vemos en Jacob, como dice el autor, todas las cosas que hizo Jacob, de hecho su nombre es usurpador, el que toma el lugar de, empezó su vida con su mintiendo y todo eso pero aquí dice el dios de jacob y como dice el autor el dios de misericordia y por qué necesitamos escuchar esto hermanos porque como he dicho muchas veces es nuestro propio pecado que no nos permite ir con un corazón correcto a dios y a veces ni siquiera nos permite ir a orar a dios Pero nosotros debemos recordar que el Dios al que estamos siendo es el Dios de Jacob, un Dios que tiene misericordia, un Dios que está dispuesto a recibir a personas que están dispuestas a confesar su pecado y arreglar sus cuentas. A mí muchas veces me pasa, una persona una vez en la iglesia dijo que un día que empieza y no ha tenido comunión con Dios y el sol ya ha salido, es un día perdido. Así decía este hermano. Y no sé, pero normalmente hay días donde me cuesta a veces levantarme, me cuesta orar, me cuesta leer mi Biblia, meditar en la Palabra. Entonces, a veces digo, ya, ya, ¿ya para qué? A la noche o mañana nomás, este día ya, aguantar nomás este día, día perdido. Pero esta verdad dice el Dios de Jacob. un día donde a veces nuestros propios corazones no desean a Dios, no tenemos el deseo genuino de ir a su presencia, podemos ir y aun eso ponerlo a sus pies y decir perdón por esto, pero de todas maneras debo ir a buscar esa comunión con Dios. Este sermón titula una generación que busca a Dios. Y yo estaba pensando, quiero animarles con eso a ustedes, a reconocer a menudo las cosas que se nos olvidan, como saber que Dios es dueño de todo, le pertenecemos a Dios. Saber que nos debemos acercar con limpieza de manos, con pureza de corazón. Saber que si lo hacemos con un corazón genuino, Él nos va a bendecir teniendo comunión con nosotros, sabiendo que nuestras generaciones van a ser bendecidas. Y al mismo tiempo, hermanos, Piensen que la integridad y la santidad no es un fin en sí mismo. No queremos ser íntegros y santos solamente para mirar cómo otros no lo son. La santidad y la integridad son medios para que, medios para que nos permitan estar en plena comunión con Dios. Nosotros hacemos esto, nos esforzamos, queremos hacer lo más justo posible en nuestros negocios, en nuestros trabajos, para que no haya nada que estorbe nuestra plena comunión con Dios. Esta semana intenté poner de manera intencional estos principios, como comenté hace rato, pero hubo pecados que a menudo me desanimaban para decir que difícil es realmente tener un corazón limpio, una mente pura, personas que hemos estado habituados en perversiones, en malos pensamientos, pero me animó mucho saber que el Dios al que vamos es el Dios de Jacob. Hay misericordia. Y yo pude ir y a pesar de todas las cosas malas y cosas pecaminosas que pasan en mi vida, podía seguir yendo y decir, porque hay perdón, hay esperanza en ti. Entonces mi ánimo para ustedes con este salmo es pensar y decir, no hay bendición más grande para nosotros que gozar de la presencia de Dios. Y creo que si eres un creyente verdadero puedes entender eso. Saber que la mayor frustración de nuestras vidas es que no podemos tener eso aquí en esta tierra de manera permanente. Y por eso esa canción que cantábamos hace rato, un día en el cielo, eso va a pasar. Y vamos a tener comunión permanente con Dios. Ya no va a haber nada que obstaculice eso. Y quiero animarles a que cada día Cuando no tengamos deseos de ir a orar, recordemos estas frases de decir que Dios está mirando en los cielos, viendo quién lo va a buscar. Y aún si hay pecado, recordar esas promesas, decir igual voy a ir porque hay misericordia en Dios, hay tolerancia en Dios, hay amplitud en Dios. Y sé que si le confieso mi pecado, él es fiel y justo para perdonarme y restablecer mi comunión. Y como he dicho, en la iglesia de Tesalónica, eso se tradujo en un mayor compromiso un mayor amor por los hermanos. El gozo era contagioso. De hecho, dicen tesalonicenses que los de afuera daban testimonio de que esa conversión había pasado. Hermanos, la iglesia está empezando cada año poniendo fundamentos y Dios nos está hablando a salir de la idolatría. Y la solución para esto es reconocer a quién le debemos todo. y como he dicho hay tantos pecados y uno de manera especial que lo leíamos en Colosenses es salgan de la avaricia porque eso es idolatría y creo que como una iglesia joven todos nosotros queremos tal vez tener cosas que aún nuestros propios padres no las tuvieron y estamos corriendo esa carrera y esas cosas nos distraen y no nos permiten ni siquiera tener plena comunión con Dios. Les animo realmente a que podamos meditar en el derecho de Dios sobre su creación, quién es Dios antes de acercarnos y la bendición que podemos obtener si tenemos ese tipo de corazón. Eso es realmente una gran bendición y que vale la pena limpiar nuestras manos y purificar nuestro corazón para tener un encuentro con un Dios así. Vamos a orar.
Una generación en busca de Dios
Série Salmos Escogidos
Verdad principal: Los que buscan a Dios son los que reconocen a Dios por ser el santo Creador y los que se alinean a Él.
Escrituras tomadas de:
La Biblia de las Américas® (LBLA®), Copyright © 1986, 1995, 1997 por The Lockman Foundation. Usadas con permiso. www.LBLA.com
Y
REINA-VALERA 1960 (SPANISH), Santa Biblia, Reina-Valera Revisión de 1960 (RVR60), © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960.
Identifiant du sermon | 1223221841265339 |
Durée | 1:11:55 |
Date | |
Catégorie | Service du dimanche |
Texte biblique | Psaume 24:1-6 |
Langue | espagnol |
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