Usted está escuchando una traducción de una prédica de Richard Cadwell, pastor y maestro de Founders Baptist Church en Spring, Texas. Esta traducción fue realizada en vivo y sin edición. Nuestro mayor interés es avanzar la verdad de Dios para la gloria de Dios. Usted puede colaborar con nosotros compartiendo esta prédica con sus amigos a través de las redes sociales como Facebook, Twitter, Google Plus y Pinterest. Estoy agradecido por Josh. Estoy agradecido por su don espiritual y su talento. Es un ánimo para mi corazón. Bueno, nosotros tenemos una noche especial. Nuestro ministro de estudiantes es el hombre que nos ha servido por ya casi. Al estar encargado de los estudiantes por los últimos años, Daniel Malenkov nos deja para ser parte de la plantación de una nueva iglesia. El nombre de la iglesia es la Iglesia del Redentor de la Comunidad y el primer servicio será el noviembre 11. Y Daniel y Michelle y su familia van a estar viajando a San Antonio. Si Dios quiere, octubre 21. Le damos la bienvenida esta noche a los miembros de su familia que están con él y algunos de los miembros de la familia de Michelle, algunas de las personas que serán parte de esa plantación de una iglesia nueva. Nos acostumbramos tanto a un tipo de experiencia cristiana individualizada que está siendo promovido en nuestro país, de que nosotros olvidamos la identidad corporativa. Y esta noche es mi privilegio simplemente representar la actitud y la voluntad del cuerpo de ancianos. Mientras que yo comparto lo que voy a compartir esta noche y el cuerpo de ancianos tiene el privilegio de representarlo a usted. Así que esta noche quiero que usted reconozca que hay un sentido en el cual la iglesia, al ordenar a Daniel y lo enviamos a él y a su familia para plantar esta nueva iglesia, la iglesia tiene algo que decir, algo que decirle a este hombre y a su familia. Esta noche yo voy a dar de la Palabra de Dios un cargo, lo cual es decir que vamos a pedirle a Daniel que recuerde algunas cosas mientras que él sale a servir a nuestro Señor en la vida de la Iglesia de Cristo. Pero ustedes están siendo testigos de esto. Así que no solamente es el que yo estoy diciéndole a Daniel, recuerda estas cosas, o el cuerpo de ancianos que le está diciendo, recuerda estas cosas, sino que la iglesia, los fundadores, la iglesia baptista, que le va a decir a Daniel a través de nuestras oraciones y nuestros ánimos y nuestras conversaciones en los años que vendrán, le diremos, recuerda estas cosas. El Señor te plantó aquí, Daniel, y eso sucedió por una razón, y ahora sales de nosotros, y hay una razón por eso. Y nosotros queremos ser el instrumento de Dios para decirle que hay algunas cosas que queremos que tú recuerdes. Quiero pedirle que por favor vaya a 2 Corintios capítulo 4. Leemos el verso 1 al 7. Por tanto, puesto que tenemos este ministerio según hemos recibido misericordia, no desfallecemos, sino que hemos renunciado a lo oculto y vergonzoso, no andando con astucia ni adulterando la Palabra de Dios, sino que mediante la manifestación de la verdad nos recomendamos a la conciencia de todo hombre en la presencia de Dios. Y si todavía nuestro Evangelio está velado, para los que se pierden está velado, en los cuales el Dios de este mundo ha cegado el entendimiento de los incrédulos para que no vean el resplendor del Evangelio de la gloria de Cristo, que es la imagen de Dios. Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Cristo Jesús como Señor, y a nosotros como siervos vuestros por amor de Jesús. pues Dios que dijo que de las tinieblas resplandecerá la luz, es el que ha resplandecido nuestro corazón para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Cristo. Pero tenemos este tesoro en vasos de barro para que la extraordinaria grandeza del poder sea de Dios y no de nosotros. Vamos a nuestro Dios juntos en oración y pidámosle su bendición sobre su Palabra. Padre, en el cielo, te pedimos que me fortalezcas esta noche, que yo, Señor, pueda hacer un buen trabajo de presentar tu Palabra. Lloro de que tú estés obrando en y a través de mí, de que tu Palabra pueda salir adelante de una manera que te agrada a ti, de una manera que edifica a tu iglesia, de una manera que ministre a tu pueblo, pero también específicamente a Daniel, y que esta sea una noche que él pueda recordar y se la pueda llevar con él mientras que él sale a servirte en esta iglesia nueva. Señor, estamos emocionados por lo que tú estás haciendo. Le damos gracias y adoración. Oramos por adelantado de esta nueva obra y pedimos tu gran bendición sobre esta obra. Señor, por favor, enséñanos esta noche. Abre nuestras mentes y nuestros corazones para ser capaces de recibir bien la semilla que va a ser sembrada. Y que Tu Espíritu obre de tal manera que el buen fruto sea el resultado de lo que escuchamos esta noche. Oramos por esto en el nombre de Jesús. Amén. El ministerio pastoral no es para los débiles de corazón. No es para los débiles o los cobardes. No es para el que está centrado en sí mismo. No es para la persona que va a comprometerse por amor a preservarse a sí mismo. No es para aquellos que se van a imaginar de que nunca van a ser decepcionados, o que alguien va a hablar mal de ellos, o que van a ser maltratados o traicionados. Recientemente, yo estaba escuchando a una pregunta que se le hizo a John MacArthur, y John, ahora ya de 73 años, han pasado años tras años de servicio, y la pregunta fue, ¿Cuál es la cosa más difícil con la que usted trata en el ministerio? ¿Cuál es la cosa más difícil con la que usted trata en el ministerio? Él dice, después de todos estos años, la cosa más decepcionante, lo más difícil es la traición. Él dijo que no era de parte de las personas, pero la traición que usted experimenta en el nivel de liderazgo de aquellos en los cuales usted ha invertido más tiempo y ha pasado más tiempo con ellos. Así que si usted piensa que usted nunca va a ser decepcionado o que alguien va a hablar mal de usted o maltratado o traicionado, no entre en el ministerio, por favor. El ministerio no es para aquellos que se imaginan que nunca van a ser criticados. o que usted nunca va a hacer o se va a decepcionar a sí mismo profundamente. Estudie a cualquier siervo de Dios en el Nuevo y el Antiguo Testamento, y usted va a ver que esto es lo que le pertenece al futuro de aquellos que se dedican al ministerio vocacional. El ministerio no es para aquellos que piensan que van a ver todos los frutos de su labor en esta vida. La historia de la iglesia está llena de hombres que sirvieron bien, hombres fieles que nunca llegaron a ver el impacto completo del esfuerzo que ellos invirtieron durante sus vidas. De hecho, si usted puede, por favor, por un momento vaya a 2 Timoteo capítulo 4. Y pensé acerca de esto muchas veces, como es que Pablo Pudo haberse preguntado acerca del éxito de sus esfuerzos en términos terrenales. Cuando venimos al final de su vida, y aquí él está, en una prisión romana. Desee cuenta de cómo se veían sus circunstancias. 2 Timoteo 4 1 1 Te encargo solamente de la presencia de Dios y de Cristo Jesús, que ha de juzgar a los vivos y a los muertos por su manifestación y por su reino. Predica la palabra. Insiste a tiempo y fuera de tiempo, redarguche, reprende, exhorta con mucha paciencia e instrucción. Estas son sus palabras finales a su Hijo en la fe, Timoteo. Predica la palabra. ¿Por qué vendrá tiempo cuando no soportarán la sana doctrina, sino que teniendo comezones de oídos, acumularán para sí maestros conforme a sus propios deseos, y apartarán sus oídos de la verdad y se volverán a mitos? Pero tú, sé sobrio en todas las cosas, sufre penalidades, haz el trabajo de un evangelista, cumple tu ministerio, porque yo ya estoy para ser derramado como una ofrenda de libasión y el tiempo de mi partida ha llegado. He peleado la buena batalla, he terminado la carrera, he guardado la fe. En el futuro me está reservada la corona de justicia que el Señor, el Juez Justo, me entregará en aquel día, y no solamente a mí, sino también a todos los que aman su venida. Procura venir a verme pronto, pues Demas me ha abandonado habiendo amado este mundo presente y se ha ido a Tesalónica. Crescente se fue a Galacia, Haití, toda Almasia. Sólo Lucas está conmigo. Toma Marcos y tráelo contigo porque me es útil para el ministerio, pero a ti, Kiko, lo envié a Éfeso. Cuando vengas, trae la capa que dejé en Troas con carpo y los libros, especialmente los pergaminos. Alejandro, el calderero, me hizo mucho daño. El Señor le retribuirá conforme a sus hechos. Tú también cuídate de él, pues se opone vigorosamente a nuestra enseñanza. Escuche a esto. En mi primera defensa, nadie estuvo a mi lado, sino que todos me abandonaron. Que no se les tenga en cuenta. ¿Se puede usted imaginar, después de todos esos años de ministerio, todas esas iglesias, todas esas personas? Básicamente, él ha quedado solo al final de su vida. Pero el Señor estuvo conmigo y me fortaleció, a fin de que por mí se cumpliera actualmente la proclamación del mensaje y que todos los gentiles oyeran. Y fui liberado de la boca del león. El Señor me liberará de toda obra mala y me traerá a salvo a su reino celestial. A él sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén. Su futuro eterno no está en duda, pero me pregunto en qué estaba pensando él acerca de las iglesias y de las personas en las cuales él había invertido, y aquí está él al final, y nadie está junto a él. Así que, Daniel, yo no quiero que tú pienses que el ministerio no va a tener dificultades para ti. Lo tendrá. Pero el ministerio no es para alguien que no puede ver la luz del sol. El ministerio es el privilegio más grande que existe. Representa el tesoro más grande. Para todos aquellos a quienes el Señor ha llamado, nosotros rápidamente vamos a decir que es La recuperación más grande de la inversión que uno pueda hacer, el gozo del Señor es su gozo. La iglesia es el gozo del pastor. Las ovejas del Señor están bajo su cuidado. como un pastor bajo Jesús. Ellas son sus ovejas, las ovejas de Jesús, pero usted tiene el privilegio de cuidarlas. La novia del Señor es el enfoque de su obra, pastor. Usted tiene el privilegio y la responsabilidad de servir al pastor principal, quien es el Señor de ellas, y su Señor, al cuidar las almas. Así que el ministerio es todo esto. Es valentía. Y gozo. Es sacrificio. Y riqueza es tristeza y una canción. Todo en una sola vez. Y nadie es digno de esto. Nunca tome a la ligera este llamado. Nunca lo subestime. Nunca piense que usted es digno de este llamado. Nunca presuma el privilegio de este llamado. Intente dependiendo en Dios para servir bien, y para servir bien por el resto de su vida. Hay muchos pasajes que yo pude haber traído para hacer el cargo, pero aquel en el que yo me centré es en el que yo quiero que usted vaya de regreso. Segunda de Corintios, capítulo 4, porque es un pasaje que se enfoca en la obra de la predicación. 2 Timoteo 4.1 dice, predica la palabra. Aquí es donde usted empieza. Daniel, fuera de tu relación personal y tu devoción a Cristo, aquí es donde tu obra empieza. Este es la orden de la marcha del ministerio. Este es nuestro llamado. Y en estos versos leímos que el Espíritu Santo nos imparta un punto de vista apropiado de lo que esta obra va a consistir y cómo tenemos que llevar esta obra a cabo. Todo lo que harás en el ministerio, y hay muchas cosas en las cuales estarás involucrado en términos de trabajo, todo lo que harás en el ministerio va a fluir de esta cosa fundamental, que es la predicación de la Palabra. En mi propia vida, cada uno de los ánimos personales o consejos que yo doy, o cualquier afirmación o advertencia que yo doy como un pastor bajo Cristo, todo fluye de cómo usted maneja la Palabra de Dios. Así que hay cinco cosas que yo quiero animarte a que siempre recuerdes cuando te vas de nuestra iglesia y vas a predicar la palabra. Primero que nada, en el verso uno, quiero resaltar en lo que nosotros descansamos. Mientras que usted se involucra en la obra del ministerio, esto es en lo que nosotros descansamos. Verso uno, por tanto, puesto que tenemos este ministerio, según hemos recibido misericordia, no desfallecemos. No desfallecemos. El final del verso nos recuerda que habrá momentos en los cuales tenemos tentación de desfallecer. La palabra significa cansarse, desanimarse, aún desesperarse. Y Pablo dice que hay una buena razón por la cual no debemos desesperarnos o desanimarnos o desfallecer. De hecho, bajo la luz de esta razón, dice que ellos no desfallecen. Por lo tanto, puesto que tenemos este ministerio según hemos recibido misericordia, no desfallecemos. En lo que usted está descansando y lo que siempre debe de recordar es la misericordia de Dios. Es la misericordia de Dios la cual explica la conversión de Pablo. Él ni siquiera es un creyente si no es por la misericordia de Dios. Es la misericordia de Dios que explica su llamado. Cuando Ananias fue enviado a Pablo, fue enviado a Pablo con estas palabras, pero el Señor le dijo, ve, porque él es un instrumento escogido de mí para llevar mi nombre delante de los gentiles de los reyes y los hijos de Israel, porque yo le mostraré cuánto debe padecer por mi nombre. Hechos 9, 15 dice eso. Yo lo salvé. Jesús dice, él ha sido salvado. Él es un instrumento escogido mío, pero ha sido escogido para llevar mi nombre al mundo. La misericordia de Dios explica su conversión. La misericordia de Dios explica su llamado. Por lo tanto, la misericordia de Dios explica la confianza de Pablo. Descansamos en el conocimiento de que nosotros hemos experimentado lo que predicamos. predicamos acerca de la misericordia de Dios y la salvación, y nosotros somos un objeto de la obra salvadora de Cristo. Sabemos lo que es el ser traído de la oscuridad a la luz. Sabemos lo que es el ser traído de la muerte a la vida. Sabemos lo que es el ser traído de la esclavitud a la libertad. Sabemos lo que es el ser traído de ser un odiador de Dios a ser un adorador. Hemos experimentado esto nosotros mismos. Así que descansamos en el conocimiento de lo que Dios ha hecho en nuestras vidas. Ahora Él nos ha llamado a compartir esto con otros, a compartir con otros acerca de Cristo, y que Dios va a estar obrando mientras nosotros hacemos eso en la vida de aquellos que nos escuchan, así como Él obró en nuestras vidas. Cuando recordamos las misericordias de Dios Eso anula el desánimo. Cuando usted tiene la tentación de estar desanimado y desfallecer, recuérdese de la realidad de la misericordia de Dios. Así es como usted recibió este ministerio. La misericordia de Dios se lo dio. Segundo, hay cosas en las cuales no solamente tenemos que descansar, Daniel, sino que hay algunas cosas que tú tienes que renunciar mientras que te vas de la iglesia. Tienes que renunciar a algunas cosas. Verso dos, sino que hemos renunciado a lo oculto y vergonzoso. no andando con astucia ni adulterando la Palabra de Dios. Recibimos la misericordia de Dios y ahora esta misericordia nos llama a un estándar alto, un punto de vista correcto de la obra salvadora de Dios, un punto de vista correcto de cómo Dios salva a los pecadores. Este punto de vista va a anular todo lo que se va a meter en medio del camino de eso. todo lo que los hombres van a usar para sustituir de la manera en que Dios realmente obra. Tú tienes que renunciar a estas cosas. Tú tienes que estar convencido de que no puedes hacer la obra de Dios a tu manera. de que Dios no va a tener nada que ver con que nosotros hagamos cosas con nuestras propias fuerzas y nuestra manera, a nuestra manera, con nuestra propia sabiduría, aún en manera, en una manera pecaminosa. Él no se va a adherir a esa obra. Él no va a adherir su nombre a esa obra. Así que tenemos que intentar obtener la pureza en la predicación de la palabra de Dios. Eso quiere decir que nosotros vamos a rehusar hacer ciertas cosas. En términos generales, verso 2, Todo lo que sea vergonzoso. Todo lo que sea oculto. Así es como usted puede decirlo generalmente. Estas son las cosas que usted tiene que rehusar a hacer. Cualquier cosa que no represente integridad en términos de cómo usted maneje la palabra de Dios. No puede manipularla. no puede usar astucia humana. De hecho, lo pone en términos específicos. Él dice que nos renunciamos a lo oculto, no andando con astucia ni adulterando la Palabra de Dios. Algún tipo de ingenuidad o habilidad humana que no represente el Evangelio. No se involucre en eso. Y no distorsione la Palabra de Dios. No tuerza la Palabra de Dios. No corte porciones de la Biblia en el nombre de hacer que su iglesia crezca. No adultere la palabra de Dios. deshacerse de la verdad en las Escrituras. No use las Escrituras de una manera en que destruye lo que las Escrituras son. Las Escrituras son la verdad. Son verdades que confrontan a los hombres. Son verdades que aún mientras vimos esta mañana, vimos que estas verdades exponen las vidas. No sustituya sus métodos por los métodos de Dios. Y el método de Dios es su mensaje. Así es como Él hace su obra. Y no solamente usted debe renunciar a estas cosas. De una manera personal, diciendo en su corazón, nunca haré eso. Pero donde sea que usted tiene autoridad, donde sea que usted tiene algún cargo, un cargo que existe en la vida de la iglesia, usted debe tomar esto como una responsabilidad personal de que nadie bajo su liderazgo vaya a hacer eso también. Renuncie a estas cosas. Descansa en la misericordia de Dios. Renuncia a cualquier cosa que no representa realmente como Dios demuestra Su misericordia. 3. Daniel, yo quiero que te acuerdes a lo que has sido llamado a hacer. Él dice en el verso 2, sino que mediante la manifestación de la verdad, nos recomendamos a la conciencia de todo hombre en la presencia de Dios. Dios te ha llamado a ti a simplemente desatar la revelación de Dios. Ese es tu trabajo. Él simplemente y sin vergüenza y dependiendo en Dios, declarar las verdades de la Palabra de Dios. Diga lo que dice la Biblia. Desate la revelación de Dios. Y hágalo de tal modo que, si alguien le recuerda a usted por algo, comentase usted mismo a la conciencia de ellos de esta manera, de que usted estuvo delante de ellos con una Biblia abierta, y usted le dijo a ellos lo que decía la Biblia. No deje que su vida sea comendada a ellos de esa manera. Usted, que ha sido llamado por Dios como un representante de su verdad. Usted es un mensajero. Usted es un embajador. La iglesia es el pilar y el soporte de la verdad, y usted es un predicador de la verdad. Ese es su llamado. Y de esa manera usted va a apelar a ambos, a los pecadores y a los santos de Dios, como alguien que consistentemente y fielmente, y sin cansarse, como un obrero que no necesita estar avergonzado, usted obró duro para simplemente poner las verdades de Dios delante de las personas. Y usted hace todo esto recordando algo, recordando la presencia de Dios. Por declaración abierta de la verdad, verso 2, nosotros encomendamos a la conciencia de todos, los hombres, en la presencia de Dios. Antes de que usted predique un sermón, recuérdese a sí mismo que usted realmente está predicando para la audiencia de uno. Si al final del día las personas le dan un golpe en la espalda y le dicen, hiciste un buen trabajo, pero no has agradado al Señor y no has predicado ese sermón estando consciente del hecho de que tú estás predicando bajo la vista de Dios, has fallado. Y si eres fiel a la Palabra de Dios y predicas con una dependencia en el Espíritu Santo y lo haces para agradar al Señor, y estás consciente de que estás predicando a la vista de Dios y todos se van de la iglesia odiándote a ti, entonces has hecho lo correcto. No estoy diciendo que eso sea lo que tú quieres que suceda, pero estoy diciendo que has hecho lo correcto si ese fuese el caso. Pero escuche, predique de una manera en la cual usted no solamente está consciente de que usted está haciéndolo bajo la vista de Dios. Haga usted al oyente consciente de que ellos están escuchando bajo la vista de Dios. Dios está presente donde su obra está sucediendo. Esto es lo que usted hace. Descanse en la misericordia de Dios. Renuncie. toda cosa oculta y vergonzosa o algún tipo de manipulación humana de la palabra, y desate la revelación de Dios con claridad y teniendo cuidado y dependiendo en el Espíritu de Dios, hágalo constantemente y fielmente. Ese es tu llamado. Mientras que haces eso, cuarto, recuérdate lo que está sucediendo cuando la palabra sale. Verso 3, y si todavía nuestro Evangelio está velado, para los que se pierden está velado, en los cuales el Dios de este mundo ha cegado el entendimiento de los incrédulos, para que no vean el esplendor del Evangelio de la gloria de Cristo, que es la imagen de Dios. Usted debe de predicar a Cristo. Usted está presentando delante de las personas una luz, la luz del Evangelio. Es la luz de las Buenas Nuevas. Y estas Buenas Nuevas es el mensaje de la gloria de Dios. Y esta gloria está en la faz de Cristo. Tú declaras a Cristo como la gloria de Dios. Eres la imagen de Dios. Y todos los que pueden ver, pueden ver su belleza y ven su gloria y ven la necesidad que ellos tienen de Cristo. Así que si alguien no lo ve, mientras que usted está declarando a este Cristo, si alguien no ve su belleza y él no está atraído a él y rechaza estas buenas nuevas, qué es lo que está sucediendo? Hay un velo. Solamente en el caso de aquellos que están pereciendo. Pero en su caso, el Dios de este mundo ha salgado a la mente de los incrédulos. Dios es soberano en la salvación, pero nosotros tenemos un enemigo real. Y Él está obrando en contra de la predicación de la palabra de Dios Nunca se olvide que va a haber oposición, últimamente no de las personas, pero de Satanás mismo y su reino. En otras palabras, mientras nosotros tenemos el privilegio de predicar la palabra de Dios, Dios nos ha dado entendimiento de lo que está sucediendo detrás de las bambalinas, lo que está sucediendo bajo la superficie, en el ámbito que no podemos ver. Nunca permita que su mente piense de que se trata acerca de usted y las personas. Y eso es todo lo que es. Tenga usted un punto de vista espiritual de su ministerio. Entienda lo que está sucediendo. De tal modo que usted entienda que su obra es muy sencilla. Declare la gloria de Dios. Ponga la luz delante de las personas, lo que nos lleva a la última cosa, cuarto y quinto. Recuerde dónde está nuestra confianza. Recuerde dónde está nuestra confianza. ¿Quién va a salvar a las personas? ¿Quién va a edificar a aquellos que están siendo salvos mientras que vas predicando el Evangelio? ¿Quién va a producir buenas cosas en la iglesia? 5. Porque lo que proclamamos no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Cristo Jesús como Señor, y a nosotros como siervos vuestros por amor a Jesús. Solamente somos servidos, siervos. Tenemos el privilegio de declarar al Señor Jesucristo. De tal modo que cuando Dios salva, ¿qué está sucediendo? Verso 6, pues Dios que dijo, que de las tinieblas resplandecerá la luz. El Dios que es el Creador. El Dios soberano. El Dios que tiene toda autoridad en los cielos y la tierra. El Dios que trajo todo y creó todo de la nada. Lo trajo a la existencia solamente con sus palabras. Él dijo, deje que haya luz. Ese Dios. ¿Cómo nos salva a nosotros? Él ha mostrado en nuestros corazones para dar la luz. Así es como nos salvó. Él dijo, que haya luz, y donde hubo luz, en nuestros corazones. ¿Y qué era esta luz? que era esta luz que Dios le impartió a su corazón a través del ministerio de la Palabra de Dios, que fue lo que Dios hizo en su vida a cristiano. La luz del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Cristo. Él nos permitió ver a Cristo por quien Él realmente era, o es. Y el Dios que le salvó de esa manera es el mismo Dios que está salvando a otros de esa manera. Usted simplemente debe de predicar a Cristo. Usted simplemente hace resplender la luz. y donde Dios salva, Él hace brillar esa luz en los corazones y da conocimiento, el verdadero conocimiento de Su Hijo. Así que su punto de vista de sí mismo a través de todo el resto de su ministerio debe de ser uno de divinidad. 7. Pero tenemos este tesoro en vasos de barro. Si mi confianza estuviera en mí, yo renunciaría. Pero mi confianza no está en mí. Simplemente soy un vaso de barro. Pero hay un poder mayor. Y ese poder mayor es la razón por la cual él ha escogido usar vasos de barro, para mostrar algo, para demostrar algo, que este poder mayor le pertenece a Dios y no a nosotros. Yo estoy tan agradecido. No hay una solamente persona que va a estar en el cielo que va a poder decir que ellos fueron convertidos por mí. Si usted es mi convertido, usted está perdido. Si usted es de salvo, dele gracias al Señor. Usted es una demostración del poder de Dios. El poder no nos pertenece a nosotros. La pertenece a Dios. Eso significa, Daniel, que Dios puede usar a alguien, aún como yo, y a alguien aún como tú. Usted no intenta ser profundo. Usted intenta ser fiel. Así que este es nuestro cargo hacia ti, Daniel, como un cuerpo de ancianos y como una iglesia. Recuerda descansar en la misericordia de Dios. Si estás siendo tentado a desanimarte, recuérdate de la misericordia de Dios hacia ti que explica tu conversión y tu llamado. Recuerda a renunciar a cualquier tipo de manipulación. Si parece por un tiempo que esa pequeña iglesia no está creciendo, que las cosas no van bien, no. Te dejes ser tentado a rendirte algo que no represente integridad del ministerio. Recuerda de continuar desatando la revelación de Dios. Con una declaración abierta de la verdad, encárgate a ti mismo, a la conciencia de todos, como a alguien que tiene la Biblia abierta, un mensajero de Dios. Y deja que en tu vida sea visto o mostrado la manera en que tú vives. Recuerda hacer claro acerca de lo que está sucediendo en el caso del perdido y el salvo. Debes de tener un punto de vista espiritual de tu ministerio. Confía en el Señor. Confía en el Señor. Él tiene el poder necesario. Él va a construir a Su iglesia. Confía en Él. Iglesia, si usted está de acuerdo con eso, ¿podría usted decir amén? Voy a pedirle a Daniel, si puedes, por favor, a venir y a unirte con nosotros aquí al frente y a mis y a los ancianos que vengan a este lugar. Iglesia, mientras que oramos por Daniel, usted puede unirse en su corazón y orar por él. Daniel, si te puedes arrodillar aquí, por favor. Vamos a orar por Daniel, apartándolo, enviándolo de esta congregación para servir al Señor bien. En San Antonio, Texas, mientras que esta nueva iglesia está siendo plantada y mientras que él sale a servir al Señor a donde sea que el Señor lo envíe y como sea que el Señor lo use. Michael Jackson, ¿puedes empezar orando por él? Padre Dios, te amamos y te damos gracias. Es por tu gracia y tu misericordia que cada uno de nosotros podemos estar delante de ti, con un agradecimiento en nuestros corazones, diciendo que te amamos porque tú nos amaste primero a nosotros. Padre, te damos gracias por Daniel. Te damos gracias por la obra que has hecho en su corazón y en su vida. Te damos gracias por el llamado que tú has puesto sobre su vida, la manera en que tú has dado evidencia de eso en el ministerio que él tuvo aquí. Le damos gracias por el ministerio que él ha tenido en la vida de muchos, muchos jóvenes aquí. Y yo oro, padre, de que ahora tomes eso y que tomes eso a este nuevo, a esta nueva obra a la cual tú le has llamado. y oro de que tú lo uses de una manera poderosa en la ciudad de San Antonio. Padre, y oro de que tú animes a aquellos que van a empezar esta obra con Daniel. Oro de que tú le des comodidad y fortaleza, de que tú lo construyas y que de hecho le des un gran tiempo en tu palabra, que Tu enseñanza lo moldee y lo forme al servidor que tú quieres que él sea, y que lo puedas usar de una manera grandiosa. Gracias, Padre, de que nosotros podemos encomendarlo a ti y a esta iglesia encomendarla a ti también. Y oro de que tú continúes obrando en la vida de él y en la vida de su esposa Michelle y en su familia. Úsalos, Padre, y te daremos adoración. Te pedimos esto en el nombre de Jesús. Amén. Padre, yo te doy gracias por el privilegio que ha sido nuestro, mientras que estamos aquí como un cuerpo de ancianos y te encomendamos a ti a Daniel Malankov. Señor, gracias por. Gracias por el privilegio que ha sido mío de conocer y servir con él cinco años en esta iglesia. Que no solamente hayas escuchado lo que le has llamado a hacer, pero que él sea el ejemplo, padre. de haber conocido a su esposa Michelle y a sus hijos, ser capaces de haber tenido comunión con ellos en su hogar y ellos en nuestro hogar. Y el lazo que has formado entre nosotros todo por Jesucristo, mientras que Él sale de este lugar y ha sido bien enseñado, tú tomes lo que has puesto en su corazón. y que Padre, Él vaya y sirva y tenga el deseo y el celo de ver a las personas que sean salvas.